Love Drama © | Johnmark

XVLII

Aunque no quisiera la fiesta de Sicheng era un compromiso que tenía, no sólo porque era "novio" de uno de sus mejores amigos, si no porque Haechan también quería ir arrastrandolo consigo a pesar de que quisiera estar aplastado en su cama todo el día como el adolescente deprimido emocionalmente por un tipo que sólo jugaba con él que claramente era. En primer lugar, quería descansar después de la semana de exámenes, en segundo lugar, después de la "pelea" con Johnny no quería verlo ni en pintura y en tercer lugar, no le agradaba el ambiente de las fiestas que los reyes montaban.

Y ahí se encontraba, con una sonrisa falsa fingiendo que todo estaba bien mientras su amigo lo arrastraba más dentro del antro que Sicheng había rentado para su fiesta de cumpleaños, el lugar sin exagerar era grandioso, muy grande, con una gran pista de baile en el centro, una barra de bebidas, mesas en las esquinas para descansar e incluso un segundo piso.

—Mark tienes que relajarte y que mejor manera que bailar un poco— Le dijo su amigo casi gritando sin soltar su mano—. Además te ves grandioso, Johnny no te merece y tú puedes tener a quien quieras a tus pies.

No solía arreglarse tanto pero debía admitir que esa noche lucía bien, su vestimenta consistía en una camisa simple negra fajada en un pantalón de mezclilla igualmente negro con un cinturón y una cadena colgando, de abrigo una chaqueta oversized oscura y de zapatos sus vans. Todo cortesía del "rey de la moda" Lee Donghyuck.

Soltó una risa mientras negaba con la cabeza.

—No quiero a nadie más Donghyuck, sólo vine por tí y a despejar mi mente un rato— Le contestó haciéndolo rodar los ojos.

—Está bien, entonces hay dejarnos llevar, vamos a la barra de bebidas, el barman es muy guapo— Dijo este mientras está vez lo jalaba hasta el lugar sin dejarlo opinar nada.

Una vez frente este se sentaron en dos de los bancos que estaban disponibles para que Haechan llamara la atención del barman este yendo a atenderlos después de estar libre.

—Muy buenas noches, ¿qué desean llevar?— Cuestionó mientras limpiaba con un trapo un par de copas.

—Yo quiero una coca.

—¿Qué puedes ofrecernos?— Respondió en cambio el moreno interrumpiendolo recargando su barbilla en sus manos.

El barman rió para alzar la ceja mirándolos a los dos detenidamente.

—No lo sé, ¿qué se les antoja?— Preguntó está vez haciendo al de cabello multicolor soltar una risita pequeña.

Espera, ¿estaba ligando?

—Está bien, queremos una bebida tranquila con poco alcohol, ya sabes para empezar— Aludió mientras le guiñaba el ojo.

—Está bien pero, ¿cuantos años tienen?— Cuestionó con la ceja alzada mirándolos de nuevo.

—Dieciocho— Contestó sin dudarlo haciendo que el rubio lo mire con los ojos abiertos de par en par porque estaba intentado hacerle creer al barman que tenían la mayoría de edad para poder tomar alcohol.

—Okey, ¿me permiten sus identificaciones?— Dijo está vez recargandose en la barra.

Donghyuck se enderezó en su lugar cruzándose de brazos dispuesto a seguir con su mentira dejando muy confuso a Mark quien tan solo se mantenía callado.

—Las dejamos en casa, pff, ¿quién las lleva consigo?— Rodó los ojos.

—Bueno, las lleva la gente que quiere tomar alcohol en una discoteca— Habló el barman dejando dos copas frente a ellos—. Venga, se nota a kilómetros que apenas tienen quince o dieciséis años, les voy a servir gaseosa, ¿cuál quieren?