•Little Lies. |PJM

Cuarenta y tres.

JiMin

Tenía un mal presentimiento, Bae no me respondía las llamadas, ni los mensajes. Quizás estuviese hablando con EunBi, ella me dijo que esa conversación debían tenerla a solas y yo respeté eso, pero aún así me preocupaba.

Luego de que Ji se fue a su habitación, yo decidí tomar mis llaves e ir a casa de las chicas. Tenía una inquietud creciendo en mi pecho y no se iría hasta que viera a Bae, ella estaba muy afectada por enterarse de la verdad con respecto a HoSeok y yo no quería dejarla sola en ningún momento. Me conformaba con verla de nuevo por algunos minutos.

Cuando llegué a la casa y pasé el portón, estacioné frente a la puerta. Toqué el timbre y abrió Jen, su expresión fue indescifrable. Sentí que algo andaba mal aún si ella no me hubiese dicho nada, no me dio el paso hacia dentro de la casa como en otras ocasiones había hecho.

–Hola, JiMin.

–Jen, necesito ver a Bae.

Noté que desvió la mirada e hizo una mueca.

–JiMin... ella... ella y EunBi se fueron. –Me miró con pena

–¿Cómo que se fueron? ¿A dónde?

Mi corazón se aceleró repentinamente y la desesperación comenzó a invadirme.

–A Brasil.

Tenía que ser una broma.

¿Por qué se irían? ¿Por qué Bae no me dijo nada? Hace unas horas estábamos juntos y ahora ella simplemente se había ido, no podía procesarlo.

–Pensé que lo sabrías. –Mencionó.

–No... –me pasé una mano por el cabello– si voy al aeropuerto quizás yo... pueda...-

–JiMin –me interrumpió– ellas ya deben estar volando, se fueron hace unas cuantas horas.

Que mierda.

–¿No sabes cuando volverán?

–Desearía saberlo pero no me dijeron. Lo siento.

En cinco días se cumplirían tres meses desde que Bae se había ido. Y no sabía nada de ella.

Esa noche intenté comunicarme con ella pero no obtuve resultados, hasta que Jin me dijo que las había llevado al aeropuerto y estaba tan molesto con él por no habérmelo dicho, por no hacer que ella cambiara de opinión.

No sabía muy bien por qué lo habían hecho o que era lo que las había llevado a tomar la decisión de irse tan repentinamente.

Yo trataba de no pensar en ella, por eso hacía muchas cosas para no perderme y atormentarme con mis pensamientos aunque eso no funcionaba cuando en las noches me encontraba solo en mi habitación. Había empezado la universidad de nuevo, trabajaba, pronto sería la inauguración del bar, iba al orfanato, cuidaba de Ji o eso intentaba. Él no se había tomado muy bien que digamos la ida de las que él consideraba sus hermanas mayores, por lo que últimamente casi no salía de su habitación a no ser para ir a la escuela o a sus prácticas, se había alejado de sus amigos. Casi no hablaba conmigo, y se había cansado de preguntarme cuando volverían, dándose cuenta que mi respuesta seguiría siendo la misma: No lo sé.

Me sentía mal por él y por todo, pero no me podía permitir caer, él dependía de mi y yo debía seguir.

Al volver a la universidad todos me miraban con curiosidad, pero yo pasaba de las miradas, tenía a mis amigos y era lo único que me importaba. Lo que me pareció extraño fue no ver más a HyunJin, pero decían que se había regresado a su ciudad, quizás le había afectado lo de HoSeok. Lo que sabía era que su familia ya no trabajaba para la empresa.