Ocho.

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Me desperté y miré la hora, eran las ocho y media de la mañana, a pesar de ser sábado me había acostumbrado a despertarme temprano.

Luego de salir del baño, bajé las escaleras y me dirigí a la cocina, al entrar no esperé ver a los Park, mi madre, EunBi y HoSeok, todos en la barra, desayunando.

Al notar mi presencia, dejaron de charlar y voltearon a verme.

–Cariño, ya iba a subir a despertarte para desayunar. –Mi madre habló con tono amable, casi no pude evitar rodar los ojos al escucharla.

No entendía que hacían aquí tan temprano, un sábado.

–Buenos días, Acassia. –Ésta vez fue SungJun quien habló, sonriéndome.

–Buenos días –respondí un poco seria – iré a cambiarme, ya regreso. –Me di la vuelta y salí, para subir las escaleras.

Tenía mi pijama, que consistía en un top y un short corto de algodón, a veces dormía en ropa interior y no era problema pasearme por la casa de esa manera en las mañanas, ya que, sólo estábamos mujeres. Cuando no lo hacía era porque HoSeok se quedaba.

Ahora estaban unos extraños -técnicamente- aquí, y no podía estar tan cómoda.

Genial.

Entré a mi habitación y me cambié los shorts por un pantalón de algodón, de igual manera se me veía parte del abdomen, pero era más discreto que lo que llevaba antes. Bajé las escaleras de nuevo.

Anna y SungJun venían saliendo de la cocina.

–Anna, ¿puedo decirte algo? –Dije tratando de que no se me notara la molestia.

–Con permiso. –El señor Park se adelantó, e hizo el ademán de irse por el pasillo que daba hacia el jardín trasero.

–SungJun, ya voy contigo. –Anna le sonrió y este asintió para continuar su camino. –¿Qué pasa? -cambió su tono al dirigirse a mi–, no me llames Anna, soy tu madre.

La tomé del brazo y la halé hacia la estancia.

–¿Qué crees que estás haciendo? –La solté y me crucé de brazos.

–Respétame, BaeMin –la miré fulminante cuando me llamó así, sabía que lo hacía para molestarme– y no sé a qué te refieres.

–No te hagas la estúpida –escupí tratando de mantener un tono bajo– ¿por qué ellos están aquí? –Cuestioné.

–Me pareció buena idea invitarlos a pasar el día de hoy con nosotras, aprovechando de que SungJun no estaría trabajando.

–No me digas, ahora seremos la familia feliz. –Dije irónica.

–¿Por qué te molesta tanto? Vinieron la otra noche. –Se quejó.

Respiré profundo, su cinismo no tenía límites.

–Me da igual si quieres revolcarte con él, pero no pretendas traerlos aquí y fingir un mundo de fantasía. –Sentencié.

–Lo que digas, ya me cansé de escucharte.

Me pasó por al lado y la tomé bruscamente del brazo, me acerqué a ella mirándola directo a los ojos.

–Recuerda que ésta no es tú casa. –La solté y le di la espalda para entrar a la cocina.

HoSeok se reía mientras JiMin le decía algo, EunBi estaba al lado de su novio, comiendo tranquilamente y JiHwan estaba con su tablet y comiendo al mismo tiempo.

Voltearon a verme cautelosos, creo que se notaba mi mal humor. Pero es que Anna lograba molestarme fácilmente.

–Cassie, ahí está tu desayuno. –EunBi señaló un plato que estaba frente a ella.

•Little Lies. |PJMWhere stories live. Discover now