La familia del padre de mi hijo... ¿Cómo?

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Capitulo 27:

Trish Malik corría de aquí para allá en su casa, ultimando los últimos detalles de la mesa. Contó la cantidad de vasos, cubiertos, servilletas y platos. Al parecer todo estaba en perfecto orden. Por alguna extraña razón se sentía realmente nerviosa. Y así había estado después de que Zayn la llamara por la tarde para decirle que iría a cenar con Vanessa allí.
Se sobresaltó un poco cuando giró y se encontró de frente con su hija. Se llevó la mano al pecho y respiró profundamente.
—Miley, Dios santo, me asustaste —le dijo.
Ella se cruzó de brazos y la miró acusadoramente.
—¿Vas a decirme de una buena vez quienes vienen a cenar con nosotros, como para que estés tan nerviosa? —le preguntó.
Trish miró nerviosa a su alrededor. A pesar de que no le gustaba ocultarle cosas a su familia, no había podido hablar con sus otros dos hijos sobre la GRAN noticia que Zayn le había comunicado a David y a ella el día anterior. En ese momento Chace también ingresó al lugar.
—¿Y cual es el gran misterio? —preguntó él.
—Es lo que estoy esperando que me diga —le dijo Miley. Volvió a mirar a su madre. Trish le sonrió para evadirla —Tanto tú como papá han estado muy raros. Escuché a papá hablando con el tío John y le dijo algo como: 'Me llegaron las canas antes de tiempo' No lo entendí, pero por lo que parecía el tío lo felicitó y papá se puso a reír...
Trish se sintió acorralada. No sabía como hacer para abordar el tema... era tan complicado. Tal vez debería dejar que fuera Zayn el encargado de decirles a sus hermanos lo que estaba pasando. Pero en realidad, ya no podía más de la ansiedad.
—Bueno —suspiró —Voy a decirles lo que sucede. Papá se refería a 'me salieron las canas antes de tiempo' porque... vamos a ser abuelos.
Ambos fruncieron el ceño levemente. Entonces el rostro de Chace se deformó.
—Voy a matarlo —murmuró y miró a Miley —¡Ese hijo de puta te embarazó!
—¿Qué? —chilló ella —¡No, imbécil! ¡Yo no estoy embarazada!
Chace miró rápidamente a su madre. Se puso algo pálido.
—¿Dejé embarazada a alguien, mami? —preguntó con voz insegura. Trish negó con la cabeza y soltó un suspiro.
—Zayn —susurró Miley espantada —La bruja está embarazada...
—Sí, fue Zayn —asintió su madre y rió algo nerviosa —Pero la embarazada no es Hilary.
Ellos la miraron más extrañados.
—¿Qué nos estás queriendo decir, madre? —preguntó Chace y luego una sonrisa divertida se dibujó en su rostro —¿Me estás queriendo decir que mi hermano Zayn, el siempre correcto Zayn, embarazó a otra mujer que no es su novia?
—Sí, es eso lo que quiero decir —asintió —Y dentro de cualquier momento van a llegar, para que todos la conozcamos.
—No entiendo —dijo Miley —No comprendo... todo esto es... ¡Estoy confundida, mamá! ¿Cómo es que Zayn está esperando un hijo y no me dijo nada... a mí?
El timbre sonó, haciendo que todos voltearan hacia el sonido. Trish salió corriendo hacia la puerta.
—¡David! —lo llamó. El hombre entró corriendo a la casa desde el patio.
—¿Qué pasó? —preguntó agitad.
—Están aquí —murmuró nerviosa.
David se giró a ver sus otros dos hijos. Ambos miraban realmente confundidos a sus padres.
—Chace, arréglate esa camisa, prende esos botones... pareces un muchachito de revista, te queda horrible —le dijo —Miley, esa pollera es muy corta, niña. Luego la quemas y la metes en una bolsa biodegradable. Pónganse derechos y sonrían. S O N R Í A N.
Trish se arregló el vestido y el collar, esbozó una pequeña sonrisa y abrió la puerta para encontrarse con la mirada de Zayn. Su hijo le sonrió levemente.
—Hola, ma —la saludó.
—Hola, cielo —sonrió ella. Entonces dirigió su mirada al costado de su hijo, y observó detenidamente a la muchacha. Ella era mucho más bajita de lo que esperaba. Y se veía mucho más bonita que en la revista. Sacó lentamente su mirada de ella, para volver a mirar a Zayn. David la empujó levemente para que reaccionara —Hola, Vanessa...
—Hola, señora Malik —dijo ella tímidamente.
—Oh, nada de señora, por favor —rió quedamente —Solo dime Trish.
David se asomó detrás de su mujer y apoyó sus grandes manos en los hombros de la misma.
—¿Qué tal, Vanessa? —le preguntó y le ofreció la mano. La morena la tomó y le sonrió.
—Muy bien —le contestó.
—Soy David, el padre de ese galán.
—Papá —dijo el moreno en forma de advertencia. Vanessa se aguantó una sonrisa.
—Pero ya, hace frío aquí, pasen —dijo Trish.
Vanessa no podía sentirse más nerviosa. Jamás pensó que los padres de Zayn podrían estar nerviosos por conocerla. Pero había percibido la ansiedad en sus voces. Zayn apoyó una mano en su espalda y la empujó levemente para que entrara primero. Ella miró atentamente a su alrededor.
—¿Vanessa? —escuchó que alguien decía su nombre.
Al instante buscó a esa persona. Y allí estaba Miley, mirándola algo confundida y con los ojos bien abiertos. A su lado se hallaba un muchacho que Vanessa notó era muy parecido a Zayn.
—Hola, Miley —la saludó por lo bajo.
La castaña claro miró a su hermano y volvió la vista a la morena. Los miró consecutivamente una y otra vez. Abrió la boca para decir algo pero las palabras no salieron de ella.
—Les acabo de contar la noticia —Trish le murmuró a Zayn —Pero no del todo...
—Yo... —dijo Miley, pero entonces se dio la vuelta y comenzó a subir las escaleras hacia su habitación.
—Miley —la llamó David. Ella no se detuvo.
—Ven aquí, jovencita —dijo Trish. Tampoco prestó atención.
—Miley Destiny Hope Malik...
—Papá —lo detuvo Zayn —Déjala, iré a hablar con ella... —miró a Vanessa y pudo ver la incomodidad en había adquirido. Se acercó y sin que sus padres y hermano lo vieran, le tomó la mano por lo bajo —No pasa nada —le murmuró. Ella clavó su mirada en la suya. Él le sonrió entregándole seguridad —Solo está algo confundida. Iré a hablar con ella y todo estará bien, ¿si? —ella asintió. Zayn no pudo evitarlo y le dio un pequeño golpecito en la nariz. Miró a sus padres —Se la encargo bien a los tres... —comenzó a caminar hacia las escaleras —Sobre todo tú, hermano. Se amable con ella porque sino voy a rebanarte las pelotas...
—¡Zayn! —lo retó Trish. Chace sonrió
—Que sutil eres—dijo Chace divertido.
—Y lo seguiré siendo —aseguró. Zayn palmeó su hombro al pasar por su lado y luego fue corriendo en busca de su hermanita.
Chace miró a la morena.
—¿Qué tal, preciosa? —le dedicó una sonrisa galante.
—Chace, compórtate —lo restó Trish. La morena le sonrió.
—Hola, Chace —lo saludó —Tu hermano me ha hablado mucho de ti.
—Espero que te haya dicho lo maravilloso que soy...
Vanessa rió levemente. Chace se acercó a ella y le tomó la mano para luego depositar un pequeño beso en el dorso de la misma.
—Chace, ya basta —dijo David divertido.
—Solo estoy siendo amable con mi nueva cuñada... —aseguró —Zayn va a castrarme sino lo hago, y aunque no lo crean, quiero tener mis hijos algún día.
Vanessa rió algo incomoda. Iba a corregirlo con lo de nueva cuñada. Pero David le ganó al hablar.
—Vanessa, disculpa las tonterías de mi hijo.
—No se preocupe, señor Malik. No me molesta en lo absoluto.
—¿Lo ven? Todos terminan amándome —dijo él. David rió por lo bajo.
—Linda —la llamó Trish —¿Quieres darme tu abrigo? Lo colgaremos por aquí.
—Claro —asintió ella.
Le entregó sus cosas a la madre del moreno y luego le entregó una suave sonrisa. Aquella mujer era realmente hermosa. Sus ojos marrones eran enormes y estaban llenos de amor. Amor hacia sus hijos, hacia su esposo y hacia su familia.
Un nudo se instaló en las entrañas de la morena. Ella cambiaria cada cosa de su vida por tener una madre como Trish.
Una madre que al mirarla le transmitiera paz y seguridad. Una madre que se jugaría por ella sin pensarlo dos veces, y que jamás, pero jamás la dejaría sola.
Tragó el nudo en su garganta y sacudió la cabeza. Tal vez, solo por ahí, aquella familia le abría los brazos y la dejaban pertenecer a ellos. No serían tan mala idea.
De repente sintieron un suave olor a humo. Chace miró a David y este también miró a su hijo.
—¡La carne! —exclamaron los dos y corrieron hacia el jardín. Trish miró a Vanessa y le sonrió.
—Nosotras dos vamos a recorrer la casa... dejemos que ellos se encarguen de la cena.


Camila


Es ComplicadoWhere stories live. Discover now