Normal life - Pepperony - IronFamily [Terminada]

10 Tener Corazon

Mierda. 
Había arruinado todo. 
Ni siquiera había pensado bien lo que dije, solamente hable, sin filtro alguno como siempre. 
Soy un estúpido.

Pepper se había enojado conmigo, algo que no debería pasar, porque además de que la afecta a ella y a nuestra relación, puede afectar a nuestro hijo.

Pase mis manos por mi cabello frustrado. 

-Señor... - Dijo Peter, había olvidado que seguía ahí. Habíamos armado una escena frente al chico, me sentí aún peor. Sentía que cada día Peter conocía la verdad sobre mi, me asustaba desepcionarlo... él había dicho que yo era su héroe -lo siento si yo...

-No, nada de esto es tu culpa. Yo lo arruine. Deberías acostumbrarte. - dije mirando al suelo, para nada orgulloso de mis palabras -Es casi imposible enojarme con ella, - sonreí por unos segundos -pero conmigo... Siempre cometo tantos errores... Estoy realmente arrepentido, de todo.

-Dígale lo que siente, mírala a los ojos y... Y haga que ella se sienta especial... Ella me dijo que eso era el secreto... Que así ustedes la había enamorado. 

Recordé todos los momentos que he vivido junto a ella... Recordé lo que me había costado aceptar y decirle mis sentimientos... Momentos muy buenos y otro muy malos... Recordé lo que se sentía perderla... No puedo vivir sin ella.

-Peter - suspiré -si tu.. si me quieres preguntar algo y me ves ocupado... Acércate y pregunta. Me importas, dará igual si me interrumpes. Nada es más importante que mi familia- le dedique una media sonrisa a la que él contestó con otra. -cuando quieras que te lleve a tu fiesta me avisas - él asintió -si me buscas estaré arreglando esto en mi habitación.

[...]

-¡Pepper! ¡Por favor! ¡Abre! ¡Te lo ruego, por el amor de Dios! ¡Virginia! - llevaba una hora encerrada en la habitación. Escuchaba sus sollozos por detrás de la puerta, me sentía como basura, como lo peor del mundo. -Amor, por favor. - dije ya casi en un susurro.

Dejé de gritar, me apoye en la puerta. Sentía las lágrimas calientes caer por mi cara. Me reincorpore y patee, lleno de cólera la pared frente a mi. 
Vi algo tambalearse en el estante de vidrio apoyado en esta. 

"Prueba de que Tony Stark tiene un corazón" 

Pepper Me lo había regalado después de haber creado un segundo, nuevo y mejorado reactor. 

Debía demostrarle que realmente tenía un corazón. Todo lo que sentía por ella y todo lo que la amaba. Ese era el secreto.

Me senté con la espalda en la puerta. Ella había parado de llorar.

-Peps - suspiré - recuerdo los días que estuve en esa cueva... como si fuera ayer. Podría decir que fue lo peor que me ha pasado en la vida. - me detuve un momento -Pero no fue así. Lo peor que me pudo pasar fueron esos minutos en los que pensé que estabas... - no podía decirlo -Primero te puse en riego. Te secuestraron e hicieron sufrir, experimentaron contigo... No sabes cuánto me duele saber que sufriste... Por... Por mi culpa. Después dije que te sujetaria. Pero no lo hice. Caíste. Sentí como - sin darme cuenta mi voz se entrecortaba. Mire hacia arriba intentando no llorar -Pensé que te perdería para siempre. ¿De qué sirve ser un superhéroe, si no puedo salvar a lo que más amo en este mundo? - solloce -gracias a ti cambie y a veces, creo que, soy mejor persona... Cada día intento mejorar, pero realmente no puedo hacerlo... No si no estás a mi lado. - mi llanto cada vez era fuerte -El día que me rescataron, el día que escape con la primera armadura... Al llegar estabas tú. Esperándome. Llorando... ¿De felicidad? Te veías tan hermosa. En ese momento no sabía cuál era el sentimiento, pero mi corazón se aceleraba al saber lo feliz que estabas de verme, que me esperaste y sufriste por mi. - medio sonreí por unos segundos, al recordar -Lo siento, por todo Virginia. Lo menos que quería era herirte. 

Me quedé callado un momento. La escuché levantarse de la cama. Me ilusione.

-Pepper, N-no te puedo obligar a abrirme - me levanté y apoye en la puerta, ya muy cansado. No sabía qué más hacer -pero no podré dormir esta noche si no te encuentras bien. ¿Podría por lo menos escuchar tu voz? - acerqué mi oreja a la puerta, expectante por la respuesta. Estaba apunto de rendirme cuando la oí carraspear.

-N-no quiero verte ahora. - sus palabras me dolían, pero me alegraba escucharla. -Estoy bien, pero muy cansada. Buenas noches Anthony. 

-Te... Te amo. Y siempre lo haré, - intente sonar lo más sincero posible -aunque me odies. Descansa, hemos tenido un largo día... 

Se demoró en responder.

-No te olvides de Peter. - dijo cortante, para no volver hablar.

No me fui de la puerta de la habitación hasta cerciorarme de que estuviera durmiendo.

[...]

Peter se encontraba sentado a la orilla de su cama, con su celular. Me acerqué.

-Salimos cuando me digas. - tome asiento junto a él -No me ha perdonado, pero por lo menos me habló - dije mirando al suelo. 

-No iré a ningún lado hoy señor Stark. Gracias por ofrecerse a llevarme. - me miró sonriendo -la fiesta se ha cancelado... La pospusieron unas semanas más... Lo más probable es que no la hagan. Tampoco tenía muchas ganas de salir - dijo medio desganado.

-Quizás algún día, quizás, podemos hacer juntos una fiesta aquí... Yo soy un gran anfitrión - sonreí. -Algo a lo grande.

-Quizás sí - me contestó el chico con una media sonrisa.

Hubo un silencio incómodo.

-¿No quieres que te lleve a algún lugar con tu cita? - le pregunté.

-Estoy muy cansado ¿Sabe? Quizás lo deje para mañana - dijo bostezando.

Me levanté de su cama.

-Descansa niño, que tengas una buena noche.

-Hasta mañana, señor Stark.

Esa noche dormí en el sillón de la sala, si es que dormí algo. No podía parar de pensar en ella. Me sentía muy culpable. 

En la madrugada me levanté y fui a nuestra habitación. La puerta ya no estaba con seguro. 
Ella dormía plácidamente, abrazada a una almohada. Siempre lo hacía cuando dormía sola.

No quise acostarme junto a ella, obvio lo deseaba, pero sabía que ella no y la respetaba. Me quedé admirando la. Lo hermosa que se veía. Estuve atento de todos sus movimientos, hasta del más mínimo. Todos eran hermosos.

El sol ya estaba por salir cuando Pepper empezó a sollozar y a cambiar repetidamente de posición. Me acerqué más a ella pensando que había despertado, pero no. Balbuceaba palabras inentendibles. 

Parecía que tenía una pesadilla. 

-No. Por favor, no. - decía ella repetidamente. Había empezado a llorar 

Me dolía verla así, pero tenía miedo de despertarla y que se enojara conmigo por eso. No quería seguir arruinando todo. Ya había hecho mucho por hoy.

Pepper grito desesperada mi nombre mientras se intentaba levantar de la cama. Sentada en la cama, giró la cabeza buscándome en la habitación, con una expresión de miedo y llorando, hasta que me vio parado junto a ella. Vi en su cara alivio. Me acerqué más a ella.

-Pepper ¿Estas...

No termine de hablar, cuando ella me abrazó, haciéndome caer en la cama junto a ella.

-¿Estás bien? - dijo sollozando -dime qué está todo bien... Que esto es real.

No entendía lo que pasaba. Me dediqué a abrazarla lo más fuerte que pude. Enterré mi cabeza en su cuello, su cabello olía a shampoo de limón.

-Estoy aquí... Nunca te dejare, te amo, y nunca dejare de hacerlo. Es lo más real que siento y siempre sentiré, aunque me odies o estés enojada conmigo... Siempre voy a estar aquí, Pepper...