𝐿𝑜𝓋𝒾𝓃𝑔 𝒶𝓃 𝒰𝓃𝓁𝑜𝓋𝑒𝒹 | 𝙽𝙾𝙼𝙸𝙽

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[CHENLE]

En el fin de semana, el chico había decidido hacerse un rizado permanente. Desde la secundaria había querido tener el cabello así y ese era el momento. Le encantó cuando terminó el procedimiento con el estilista y aparte de eso, pagó una grande cantidad porque a Chenle le gustan las cosas de calidad.

El lunes por la mañana, se acomodó su cabello y al preguntarle a su familia y al personal si estaba bien, todos respondían que se le veía genial.

Subieron al carro que los esperaba para dejarlos en la escuela y durante el recorrido, Renjun le volvió a decir:

—Se te ve muy bien. Prefiero esto que tu cabello lacio.—

—Gracias.—

Sonrió el menor.

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Chenle caminaba por el pasillo principal alegremente, eso era nuevo. El lunes siempre era de flojera y sueño, pero esa mañana estaba de buen humor, no esperaba por recibir elogios por sus compañeros acerca de su nuevo look.

Cuando entró a su salón, este ya estaba casi lleno. Todos los presentes lo miraron, unos sin importancia y otros tratando de ocultar una sonrisa. Chenle puso su mochila en su asiento y se acercó a su grupo de amigos.

—¿Y ese cabello?—

Sonrió Samuel.

—Es un rizado permanente, quería hacer esto desde hace un tiempecito y... ¿qué les parece?—

Jeongin hizo una mueca.

—Honestamente... no me gusta.—

Daehwi se aguantó la risa.

—Ahora que me doy cuenta, pareces de esos fideos... los maruchan.—

Beomgyu estalló a risas:

—Si te pongo unos palillos, ahí si pareces maruchan.—

Kuanlin tenía el ceño fruncido.

—Se te ve bien raro.—

Yechan estaba cruzado de brazos y lo miraba detenidamente.

—Algo debió salir mal.—

—¿Entonces se ve mal?—

Preguntó Chenle mientras fingía una sonrisa. Sus amigos asintieron decepcionados.

"Me mintieron..."

Pensó el chico al recordar lo que le comentaron su padre, su madrastra, su hermanastro y el personal de la casa.

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Chenle se fue a los baños y se vio al espejo preocupado, ¿en serio se le veía tan mal? Empezó a verse desde diferentes ángulos, con razón los alumnos lo veían raro, estaba muy feo. Se echó agua en el cabello, pero no funcionó para alisarlo.

Pegó un brinco cuando escuchó una voz:

—No entiendo porque le prestas atención a ellos. A mi me gustó tu nuevo estilo.—

Chenle bufó y rodó los ojos, era Jisung, otra vez de entrometido.

—¿Te pregunté?, no ¿verdad?—

El mayor se retiró de los baños, dándole un leve empujón en el hombro al pasar.