𝐿𝑜𝓋𝒾𝓃𝑔 𝒶𝓃 𝒰𝓃𝓁𝑜𝓋𝑒𝒹 | 𝙽𝙾𝙼𝙸𝙽

➡️19⬅️

[JAEMIN]

Todo estaba oscuro. No sabía cuánto tiempo estuvo así, pero, poco a poco abrió los ojos. Había una luz blanca y muy brillante, la cual le forzó a fruncir el ceño. Sintió algo helado y pesado en su frente. Débilmente, movió su brazo derecho para sostener lo que tenía en su rostro, era una bolsa con hielo.

Se sentó lentamente y pronto supo que estaba en la enfermería. Aún llevaba su uniforme de deportes, así que no debió pasar mucho desde que le golpearon en la cabeza con el balón. De vez en cuando, Jaemin escuchaba un pequeño zumbido. Pronto, escuchó unos tacones crear eco en el lugar. Vio al enfermero entrar.

—Que bueno, ya despertó Na.—

Sonrió cálidamente el adulto. Jaemin asintió con su cabeza levemente. Después, el hombre con bata blanca se acercó al adolescente. Sacó una pequeña lámpara y examinó los ojos del joven.

—¿Sientes alguna molestia?—

Preguntó el enfermero.

—Me siento un poco mareado.—

—Eso es normal después de haber perdido el conocimiento. Lo bueno es que no fue grave, solo fue un duro golpe en la cabeza. Tu nariz ni orejas sangraron, no convulsionaste, no te salió un chichón, no respiraste anormalmente, y como veo ahora, no tienes problemas con la visión, ni para moverte, ni has sudado y tampoco te pusiste pálido. Me alegra que todo esté bien.—

—¿Cuánto tiempo estuve así?—

—Como unos... Treinta o veinte minutos. Ven conmigo.—

Jaemin bajó cuidadosamente de la camilla con apoyo del enfermero. Después, lo guió al escritorio de este.

—Eres Na Jaemin de segundo... Ummm, ¿en qué salón estás?—

—A uno.—

—Gracias.—

Respondió el enfermero, este escribía en un papel. Era para que le den permiso de volver a las clases y asegurarse de que el está bien. Cuando terminó, le tendió el papel a Jaemin.

—Ve a cambiarte y podrás entrar a tu salón. Si sientes algún mareo, te da sueño, o sientes algún malestar, ven a la enfermería. Eso es todo, puedes irte.—

Jaemin le agradeció y dio una reverencia, acto seguido, se fue de la enfermería. Se dirigió a los vestidores, se tomó una rápido ducha y se puso su uniforme. Ya tenía el permiso en mano y se apresuró en llegar a su salón. En ese momento debía estar en la clase de historia con el profesor Yang.

Se paró frente a la puerta de su salón, respiró hondo y tocó la puerta, esta segundos después, se abrió, revelando a su profesor.

—Llega tarde joven Na.—

Jaemin dio una reverencia en forma de disculpa y le tendió el papel, el cual le otorgaba el permiso de entrar al salón, ya que su ausencia estaba justificada. Su profesor leyó el contenido de la hoja y le dio el pase.

—Si se siente mal, tiene permiso para volver a la enfermería. Adelante.—

Jaemin volvió a dar una reverencia y se sentó en su asiento, no sin antes sentirse incómodo por los alumnos que le miraban pasar detenidamente.

—¿Estás bien?—

Preguntó Mark en un susurro. Jaemin asintió con su cabeza, no había sido nada grave, así que no había razón por la que debía preocuparse.

—Que debilucha es la gordita, por un golpecito se desmaya.—

Rió Yonbok en voz baja.

Jaemin suspiró y trató de concentrarse en lo que restaba de la clase.