9 Meses Para Enamorarte [Pablo Alborán] [TERMINADA]

Noche En Lisboa

Lo observo en el escenario de La Voz Portugal, y el verlo tan feliz haciendo lo que más ama hacer, me hace sonreír. Parezco una fan mas... en realidad lo soy, ¿a quién quiero engañar? Las mujeres le gritan, cantan a la par, y pienso en la magia que tiene la música... no importa qué idioma hables, ni la religión, ni nada... solo importa sentir esa conexión con la canción y disfrutar.

Al notar que está a punto de terminar su actuación, decido ir al camerino y esperarlo allí. Hemos quedado de ir y disfrutar de la noche en Lisboa ya que mañana al finalizar el concierto de Navidad partiremos directamente al aeropuerto para pasar unos días en Málaga antes de ir a Madrid para la final de La Voz España. Tenemos una agenda apretada, pero ya está llegando a su final; al menos hasta que comience la gira...

Me siento en el sofá que hay en el camerino y mientras tanto aprovecho para actualizar mis redes sociales y subir algunas fotos de la presentación de Pablo. Es una locura lo que sucede cada vez que subo algo de él... Los "me gusta" y comentarios hacen que mi móvil explote.

Unos cuantos minutos después, la puerta se abre y cuando el entra me lanza una enorme sonrisa. -¡Que pasada!- Exclama y se sienta a mi lado una vez que deja su guitarra a un lado. –Estoy ansioso por la gira.- Me comenta y tal como hemos quedado no nos damos ninguna demostración de cariño aquí dentro; ya hemos aprendido la lección.

-Me imagino que si... tus fans también están ansiosas por la gira.- Añado.

El me mira un poco más serio esta vez –Lo único que me tiene preocupado es que no se que haremos cuando nazca Génesis.- Comenta y tapo su boca con mis manos.

-Aquí no.- Le regaño y quito mis manos para encontrarme con su media sonrisa que es capaz de matar a cualquier mujer...

-Vale, me callo... ¿vamos?- Pregunta poniéndose de pie y ofreciéndome sus manos para ayudar a levantarme de aquí.

-Vamos.- Afirmo y sujeto sus manos.

[...]

Una vez que nos despedimos de todos, hemos decidido dejar que el chofer lleve la guitarra al hotel y nosotros tomarnos un taxi para explorar un poco la ciudad; al menos, esa ha sido nuestra excusa. El taxi nos deja en la puerta del bar que le han recomendado a Pablo, y al entrar vamos directamente hacia el área privada que hay. Al parecer en este sitio están acostumbrados a tener gente famosa, ya que todo es llevado con mucha discreción. -¿Qué deseas beber cariño?- Me pregunta al oído para que pueda escucharle ya que la música está muy alta.

-Daiquiri de fresa sin alcohol obviamente.- Le pido y el asiente.

-Ya te lo traigo, no te muevas de aquí.- Me pida y antes de irse deja un beso en la comisura de mis labios.

Me siento en uno de los taburetes que hay alrededor de la mesa alta que hemos escogido con pablo y simplemente disfruto de la música que suena. Lo observo parado en la barra y sonrió perdiéndome en su perfecta espalda y la manera tan sensual que esos pantalones se ajustan a él; definitivamente soy una mujer con suerte...

-Olá- Dice una voz masculina y al mirar a mi costado me encuentro con un hombre bastante alto de cabello castaño claro y ojos negros. Es bastante flaco y me mira de una manera un tanto incomoda.

- Eu não falo português.- Le digo y pongo mi mejor cara de "discúlpame".

-¿Espanhol?- Me pregunta.

Genial... un tio típico de bar, pero bilingüe...

-Si.- Me limito a responderle.

-Te estuve observando desde que has llegado, y eres preciosa de verdad.- Me dice sonriente y sin dejar de mirarme fijamente.

No entiendo... ¿acaso no se ha dado cuenta que estoy embarazada?

-Gracias.-

-Soy agente de modelos y me encantaría hacerte una sesión de fotos.- Me explica mientras me da una tarjeta de presentación.

-Vale, pero estoy embarazada.- Le explico y por si le queda alguna duda le muestro mi barriga.

-Lo se y te sienta hermoso el embarazo... quisiera hacerte unas fotos así.- Me comenta y esto ya es incomodo.

-No gracias...-

-Piénsalo...-

-No, de verdad no.- Le vuelvo a repetir.

-¿Qué cosa debe pensar mi prometida?- Escucho a Pablo decir y al darme vuelta allí está el mirando al tío este de mala manera.

-Soy Paolo.- Le dice sonriente –Soy agente de modelos y le estoy ofreciendo que se haga una fotos conmigo.- Le explica y creo que no ha sido una buena idea.

-No, ella no se hará ningunas fotos; ya te lo ha dicho... ahora, si nos disculpas...- Le dice y esa ha sido la invitación a retirarse.

-De acuerdo, pero te dejo mi numero por si cambias de opinión.- Me dice antes de irse.

-Te dejo diez minutos sola y quieren convertirte en modelo...- Comenta Pablo mientras deja los tragos en la mesa.

-Amor, por favor...- Le pido.

No quiero discutir...

-No te preocupes, no es tu culpa... o si... es que eres tan bella...- Me dice y acaricia mi rostro.

-Tú eres guapo.- Le digo sonriente.

-Tu mas...- Me discute amistosamente y para callarlo lo beso.

-Vamos a bailar...- Propongo sobre sus labios.

-Sí que sabes ganar una discusión, eh...- Se queja entre risas.

-Siempre...- Bromeo y me pongo de pie para arrástralo al área del bar que hay para bailar al ritmo de la música.