9 Meses Para Enamorarte [Pablo Alborán] [TERMINADA]

Acuerdos y Miedos

Estamos muy cómodos en el sofá intentando elegir un nombre para nuestra niña, pero realmente es complicado. Cuando a mí me gusta uno, a el no le gusta o viceversa. –Amor, no puede ser tan difícil.- Dice mientras seguimos yendo de un sitio web al otro.

-Es el nombre de nuestra hija, no de una mascota.- Le explico haciendo que se ría y me abrace más fuerte y me acomode mejor entre sus piernas.

-Lo sé amor, pero de verdad es complicado...-

-Vera, Jordana, Alexandria, Paris, Sidney, Keira, Alaia, Siena...- Leo la nueva lista y el detiene mi mano para que no avance más.

-Este me gusta.- Me dice señalando el nombre "Keira"

-Está muy bonito, y creo que podría ir con Alexandria.- Comento.

-¿Keira Alexandria Moreno?- Me pregunta.

-No se... solo sé que quiero un nombre raro.- Le dejo saber con una enorme sonrisa.

-Este también me gusta.- Dice señalando el nombre "Serena".

-¿Y este?- Le pregunto señalando el nombre "Indira"

-No se cariño...- Me dice poco convencido.

-Este está bonito.- Dice y me muestra el nombre de "Naia"

-Mmmm... De verdad que estoy muy indecisa.- Le confieso.

-Amor, aun tenemos tiempo para pensarlo bien.- Me anima y va dejando pequeños besos por mi cuello.

-Lo sé, pero tampoco quiero llamarle "la bebe" estos meses que quedan.- Le explico.

-¡Mira este nombre!- Dice con entusiasmo y señala el nombre "Génesis"

-¡Me encanta!-

Creo que por fin estamos llegando a algo.

-Mira lo que significa.-

Al leer su significado me enamoro. Génesis "principio de las cosas, el origen de la creación, un nuevo nacimiento".

-El principio de nuestro amor.- Comento.

-Si...- Dice y deja un beso en mi cuello. –Génesis Moreno.- Dice para ver cómo suena y debo de admitir que me encanta.

-Ese es.- Afirmo.

-¿Entonces nuestra hija se llamara Génesis?- Me pregunta para estar cien por ciento seguro.

-Sí, si estamos de acuerdo si.-

-Estamos de acuerdo.- Sentencia y ahora sí que estoy contenta, ya nuestra hija tiene nombre, y vaya que si es significativo.

Nos quedamos así en silencio unos cuantos minutos solamente abrazándonos y respirando con calma tal como si cada uno estuviese pensando en algo diferente.

-¿Vamos a dormir?- Le pregunto rompiendo el silencio.

-Vamos, mañana tenemos que estar temprano en el aeropuerto.-

-Si.- Me limito a responder y nos ponemos de pie para ir a nuestra habitación.

Al meternos en la cama, el me abraza fuertemente contra él y se me queda mirando sin decir absolutamente nada. No sé muy bien que le sucede, pero este silencio entre los dos no es común.

-¿Te encuentras bien?- Le pregunto finalmente sin poder aguantar más.

-Sí, solo pensaba.- Comenta y enreda sus dedos en mi cabello.

-¿Puedo saber en qué?-

-En que ya hay fechas para la gira por Latinoamérica y España.- Me responde, pero en vez de estar feliz lo noto triste.

-¡Eso es genial!- Digo con entusiasmo.

-Se supone que sí, pero comienza en Marzo y no termina hasta prácticamente Octubre... a eso luego se le sumara Estados Unidos.- Dice cabizbajo y me preocupa mucho que este así.

Delicadamente con mis manos acaricio su cabello y luego voy bajando hasta su rostro -¿Y porque estas así?- Pregunto preocupada.

-Tengo miedo de no estar contigo cuando nazca Génesis. Tengo miedo de perderme los momentos más importantes de su vida por mi carrera. Tengo miedo de perderte a ti.- Me dice angustiado.

Entiendo cada uno de sus miedos; va a ser difícil todo lo que nos espera, pero yo lo amo con todo lo que es.

-Tú no me vas a perder ni a mí ni a tu hija.- Le digo con toda la seguridad del mundo y lo beso.

-Prométemelo.- Me pide casi como una súplica.

-Te lo prometo. Siempre estaré a tu lado, y aunque a veces tengamos que estar separados y pueda costarnos; confía en mí, yo te esperare en cada una de tus partidas.- Le digo firme.

-Te pediría que vinieses conmigo a todos los sitios, pero eso es simplemente injusto. Yo no puedo hacer que viajes con nuestra hija de aquí para allá.-

-Lo sé guapo, no me lo tienes que explicar. Pero, ven... no pienses en eso ahora.- Le digo y esta vez soy yo quien es su almohada para que descanse apoyado en mi pecho.

-Te amo.- Me dice –Y a ti también princesa.- Dice un poco más bajito y deja un tierno beso en mi vientre.

Tiernamente sus manos van acariciándome hasta el punto que debo detenerlo. –Amor, no juegues con una mujer embarazada.- Bromeo.

-Yo no soy mujer, ni estoy embarazada, pero creo que también estoy sintiendo lo mismo que tu.- Dice entre risas y así comienza su ataque de besos y caricias que provocan que dormirnos temprano sea prácticamente imposible...

Tengo la sensación de que el necesitaba esto para saber que a pesar de lo que se viene, estamos más juntos que nunca.

Sera difícil, eso está claro, pero no podría vivir sin el... se ha convertido de mi aire vital.