Los gemelos Channy

199. Recordando el error (1/3)

Lía

Miro como corren dando vuelta alrededor de la cancha con su respectivo bate de beisbol y yo sigo sentada en la banca. Que irritante, quiero participar pero mi condición no me lo permite, el estúpido doctor tuvo dar aviso, sino yo hubiera jugado igual, no me importa. Mejor estaría en casa durmiendo en vez de venir a este estúpido torneo, ya que no puedo participar, pero mis faltas a clases no me lo permiten, me quedan poquitas.

—Esto ni es beisbol profesional —hago puchero —una pérdida de tiempo mirar —abro mi mochila y observo mis estampitas.

Pensar que tengo algunas que no recuerdo, ni sé cuando las compré. Es frustrante no recordar nada, ni la alegría de conseguir una.

—Se te cayó —levanto la vista visualizando a Gregor que sonríe sosteniendo una de mis estampitas —Chica despistada.

Frunzo el ceño y se la agarro abruptamente, guardando todo en mi mochila de manera rápida, mientras le respondo de forma arisca.

—¿Y tú que quieres?

—Tu agresividad nunca cambia —se ríe —¡Me encanta!

Levanto una ceja.

—¿Es una broma? Si te estás burlando, no duraré en golpearte —me levanto del banco y lo amenazo con mi puño.

—"Se tu misma, no importa lo que digan los demás, eres genial como eres, no lo olvides" —quedo tildada cuando cita la nota de Dan como si la hubiera estudiado.

—¿Cómo es qué tú...

—Es difícil buscar las palabras correctas para animar a la chica que te gusta. Uno tiende a memorizar si se tarda mucho en elegir cada una y que se sienta especial —opina.

—No sé a dónde quieres llegar, pero se está volviendo raro esto así que... —vuelvo a levantar el puño —¡Deja de hablar! —lo agito nerviosa.

—Cambio de jugador, Tyrone Bleiker —oigo al profesor y giro a ver a la persona con ese nombre desconocido, pero que de repente titila en mi cerebro.

"Volverás mañana, Noah sabe que decirle a tu mami. Ahora sientate, vamos a beber."

El recuerdo de una finca desconocida para mí, aparece en mi cerebro.