Los gemelos Channy

185. Todos son gays

Heinz

Ya que yo soy el único que estoy con Lía en el curso, Noah me ha pedido que la cuidará.  Obvio que lo voy a hacer, pero me está llenando de preguntas, ya que como el doctor dijo, ha perdido la memoria y ahora su cerebro quiere estar repleto de información.

—Noah me dijo que ustedes son novios, o sea que ¿Noah es gay?

—Pues sí —le contestó tranquilo.

—¡¿Y por qué me entero tan tarde?! —expresa exaltada.

—Sólo te olvidaste, cuñada —me río.

—¿Y esta por qué me mira raro? —señala a Linzy que está sonriente sentada en su pupitre y la saluda desde ahí.

—Porque me gustas —responde ella parpadeando varías veces de manera coqueta.

—¡¿Una lesbiana?! —grita y se lo piensa —¿Son todos gays aquí o qué?

—El término correcto sería homosexuales, para englobar, chiquita —le corrige la rubia.

—Lía —la llamo cuando se acerca a una de sus amigas.

—¿Tú también? —le pregunta a Zana.

—¡¿Qué?! ¡¡No!! —le responde alterada.

—Yo tenía que preguntar, parece que aquí todos se convierten en gays.

Linzy hace una carcajada fuerte.

—Que lentita la chiquita.

Lía levanta el puño.

—¡¿Quieres que te golpeé?!

—Me encantaría —se muerde el labio inferior.

—Lía, ignorala —me levanto de mi pupitre y la guío hasta al suyo.

—Ni que fuera una lisiada —se queja tocándose el golpe de la cabeza.

—Que yo sepa el doctor te dijo que podías ir al colegio, pero que no hagas ningún tipo de ejercicio o esfuerzo.

Se revuelve el cabello.

—¡¡Pero si yo hago ejercicio todo el tiempo, ah los odio a todos, quiero mi bat, papá por qué me lo quitaste!! —agita los brazos con mucha energía y termina mareándose —¡Ay, ya me cansé! —apoya la cabeza sobre su mesa.

—¿Quieres un juguito de manzana? —le ofrece Linzy.

—Lo aceptaría, pero no hay ninguna manzana en eso.

Miro hacia afuera del aula y visualizo a Gregor esperando a que toque el timbre de recreo.

—Tu novio vino a verte —le aviso a Lía.

—¿Qué novio? Yo no tengo —me mira mal porque le han insistido sobre el tema varias veces.

—¡Chiquitita, te conseguí la manzana! —expresa Linzy cortando la comunicación con su celular.

Lía la mira pensativa, acaban de nombrar a su debilidad, la comida. Eso es trampa.

La agarro del brazo y la saco del aula. Debo cumplir lo que le prometí a Noah.

—Gregor te comprará una torta —digo antes de empujarla hacia él.

—¿Una torta? —el castaño levanta una ceja.

Ella frunce el ceño.

—¿Me comprarás una torta?