Los gemelos Channy

152. "Fuga de protesta"

Dan

Le dije a la profesora de natación que Bruno se había ido, luego le avisé a Tyrone que estaba solito en la pileta y ahora puedo ver lo que observaba en su celular mientras ellos están distraídos discutiendo.

—Oro puro —expreso reproduciéndo un vídeo de Noah en el que se pone su uniforme masculino mientras estaba disfrazado de Lía.

Genial, ni a mí se me hubiera ocurrido mejor.

Me envío el vídeo a mi celular y lo guardo en la carpeta en la que tengo la foto de Lía, esa del día que Tyrone la ató en el garaje y la hice llorar.

Me lo pienso.

—Creo que le falta una foto a mi colección —levanto el celular y le saco una fotografía a esos dos en la pileta, para luego sonreír —perfecto —exclamo dejando el móvil de Bruno en el banco en el que estaba y me retiro de allí de manera triunfante.

Envío unos mensajes y rato después espero afuera a ver que pasa, visualizo a Bruno salir corriendo mientras lloriquea. Tira su celular al tacho y cuando me ve cambia de dirección para no cruzarse conmigo. Parece que Tyrone le explicó lo de su padre, aunque no creo que lo haya perdonado del todo.

Debo dejar de analizar a las personas, es tan aburrido.

—Cabeza de tornillo ¿Sigues aquí? —exclama Tyrone al verme y se me acerca.

—¿Le diste tus más sinceras disculpa? —le respondo cambiando de tema viendo su ropa mojada.

—Cállate, necesito una cerveza —se queja.

—Sé que siempre estás pendiente de encontrar la aprobación de de tus padres, pero tengo malas noticias, por eso sigo aquí —le contesto a su pregunta anterior.

Frunce el ceño.

—¿Qué quieres decir?

—Ya saben que Bruno está vivo, que Noah se disfraza de Lía y que ella estuvo encerrada en el garage de tu casa. Parece que alguien delató nuestras acciones —explico con demasiada hipocresía.

—¡¿Qué?! —pone la mano sobre sus cabellos oscuros sorprendido —. Es una broma ¿cierto?

—No, por eso estoy aquí, como buen amigo que soy, he venido a ofrecer mi ayuda. He mandado un mensaje a unos conocidos para que me traigan unas cosas, ¿Cómo te suena fugarte a modo de protesta?

—¿Irme? ¿Huir? —expresa confundido mirando hacia el suelo —pero...

—¿Permitirás que te azoten otra vez? —le aclaro y levanta la vista abruptamente.

—Yo... ¿Y si de nuevo le hacen algo a Copito? —expresa preocupado.

Sonrío.

—Yo me encargaré de eso, tú tranquilo.

—Eso no me genera confianza —rueda los ojos.

—Pues si te vas, no pueden hacer nada, ya que no estás —le aclaro —no pueden amenazar a la nada.

Bufa.

—Tienes razón.

Recibo un mensaje y sonrío sintiéndome el ganador cuando lo leo.

—Ya llegó tu transporte —levanto la vista a mirarlo —me trajeron la moto de mi padre, evita los controles de tránsito y tardarán en rastrearte.

—Cállate y dime a dónde hay que ir —comienza a caminar y lo sigo.

Tyrone

Subo a la motocicleta, miro el bolso que está amarrado en la parte de atrás y luego observo a Dan. Asiente y me despido a la vez que me pongo el casco. Había conducido antes una moto pero esta está de lujo.

Arranco el vehículo y me voy muy lejos.

Rato después viajando, me bajo en una estación de servicio y saco dinero de aquel bolso para llenar el tanque de la moto, el cual no estaba muy lleno cuando salí.

Al girarme visualizo a la rubia alta, sentada sobre la motocicleta.

—¿Adelaine?

—No —me abrazan por detrás —esa es Linzy, cariño.

Frunzo el ceño al percatarme y miro a la gemela que está sobre mi ahora motocicleta.

—¡Bájate de mi vehículo, lesbiana retrógrada! —me quejo.

—Y el gay cavernícola ha hablado —se burla de mi insulto pero cuando voy a golpearla, Adelaline me detiene tocando mi mano.

—Se ve que tienes un problema, cariño —exclama sonriente.

—Sí, que le falta el cerebro —se ríe Linzy y sigue jugando con mi medio de transporte, tocando todos los botones —¿Esto no tiene radio?

—Mientras ni hermana sigue en lo suyo ¿Quieres hablar?

Miro a la gemela que me interesa y sonrío.

—¿Por qué no?