Amor por el baloncesto - MYG+KTH.

Extra 5:

Yang Mi, Sunoo y DaeHyun

[Varios años después del epílogo]

TaeHyung se encuentra frente a la pantalla de su lap top.

—¿Y cómo te sientes? —Pregunta Suk del otro lado de la pantalla, el castaño sonríe ampliamente ante la pregunta, se permite asentir como respuesta.

—Muy emocionado —reconoce—, pero también n-n-nervioso —agrega.

Suk suelta una risa y asiente.

—Ya me imagino. ¿Y YoonGi Oppa?

TaeHyung suelta una risa.

—Creo que el t-t-triple de nervioso, pero sin duda es el más controlado y el que me ayuda a controlarme.

—Ya decía yo —comenta la ahora peli-rosa, fue algo inesperado para TaeHyung el verla hace algunas semanas con ese nuevo look, pero comprendía que era la moda y cosa de hoy en día en las chicas de la edad de Sukie.

Suelta un suspiro al llegar a la conclusión de que su hermanita dejo de ser una niña hace ya varios ayeres, ahora con 25 años eso queda en evidencia.

—YoonGi y tú son de complementarse —suelta una risa, que le hace reí a él también.

—¡Hyung! —Una tercera voz lo hace mirar a un costado de Suk y encontrarse con Jin saludándole—, ¿cuándo vienen a Daegu con los niños? —Pregunta.

—Espero que p-p-pronto —responde sin haber borrado su sonrisa. Pero se detiene y ladea la cabeza—, espera, Jinie ¿dijiste "niños"?

La sonrisa que su hermano le regala lo confunde más.

—Vamos, todos sabemos que será más de un niño —alza ambas cejas y Tae sonríe apretando sus labios.

—¡Buenooo! Nosotros ya nos vamos, tengo tarea que terminar pero no quería perderme nuestra video llamada habitual —informa la menor—, no olvides hablar con papá esta semana —recuerda y Tae asiente—, él también está muy interesado y emocionado con todo esto —reconoce haciéndole sentir tan feliz y querido porque su familia comparte los mismos sentimientos que él.

—De acuerdo, hablamos la otra semana, los am-m-mo chicos —despide con la mano, siendo correspondido por los otros dos del otro lado de la pantalla.

—¡Nos vemos!/¡Adiós!, ¡te amamos! —recibe como respuesta. Sonríe una última vez y finaliza la llamada.

Una risa se escapa de sus labios y niega con la cabeza, sus hermanos están locos. Guarda el archivo que ha estado usando últimamente y sin más apaga la laptop, para luego dejar todo en su lugar y ponerse de pie.

Se dirige a paso tranquilo a la habitación de al lado, la puerta se encuentra cerrada, por lo que sin haber borrado su sonrisa toca 3 veces con sus nudillos.

—Adelante —escucha del interior, toma el picaporte de la puerta y lo gira para poder ingresar. Sonríe amplió al encontrase con un pelinegro que le gusta mucho sentado en una silla detrás del escritorio principal de la habitación, su corazón se alborota al momento que aquel hombre apuesto le mira por encima de sus lentes—, hola, mi amor —saluda YoonGi y eso lo hace sonreír bien grande.

—Hola, ¿ya vas a ir a la cama? —Pregunta mientras se adentra y camina con dirección al mayor de los dos.

YoonGi separa la silla giratoria del escritorio y recibe de manera feliz al castaño sobre sus piernas, echando la cabeza hacia atrás en cuanto el contrario posiciona su brazo en su nuca.