El Mujeriego Es Mi Prometido (editando)

Capítulo 59

Drama y más drama.

Vayolet.

Tiempo presente

Como había prometido Zeus. Antony llegó en la madrugada, él mismo lo traía en brazos pues estaba dormido. Se lo dio a Aleck quien lo recibió en brazos.

—Lo quiso sacar del país, que ilusa. —fue lo que dijo, asintiendo tomó la cabeza de Aleck y alboroto su cabello. —Te dije que no era necesario que hicieras nada.

-Gracias. -Aleck comentó firme y le extendió su mano, a lo que Zeus se comenzó a reír y lo jalo para darle un abrazo.

-No seas idiota. Lo haría sin pensarlo nadie toca a mis hijos de otro padre. -dice sonriendo.-Nadie toca a mi familia.

-¿Dónde esta?-Pregunta Smith se ve molesta. Bastante molesta. Aun que a él no le habla mal. -¿Dónde está ella?

-Giselle.-comenta Aleck en un tono rendido y esto no parece normal en él. Mi hermano mayor no habla así nunca.

-No te preocupes mujercita hermosa, no hará nada huyó asustada pero no se acercara.

-Bien. ¿Entonces Anthony esta a salvo? ¿Usted lo mantendrá a salvo verdad? -pregunta y no entiendo esto. Ella no suele ser así.

-Ya que veo que estas totalmente nerviosa lo pondré así. Te doy mi palabra de que ese niño estara a salvo y no importa que pase. Así la tierra se destruya él no tendrá ni un rasguño. Es una promesa... Tampoco le pasara nada a su padre lo prometo.

-Bien, gracias. Fue un gusto conocerlo. Pero tengo que irme, no tengo nada que hacer aquí. Conpermiso.

Smith tomó su largo abrigo y una bolsa pequeña. Camino a la puerta de entrada y Aleck tenía la mirada sobre ella pero solo no sabía que hacer. Parecía debatirse algo. Pero no podía hablar.

-Señorita Smith. -dijo difícil, pero con su porte reconpuesto y su mirada fría.

Ella volteó pidiendo clemencia con la mirada. Henry camino a ella angustiado. Yo miraba todo como espectadora. Tomé sin pensarlo el saco de Zeus como su fuera una niña y me protegiera de algo.

-Mi chófer la espera abajo. La llevara a donde necesite. -dijo Aleck y se dio la media vuelta a lo que yo lo seguí a él y Henry a Smith.

Aleck entró al cuarto de Anthony donde lo acostó de forma suave y lo arropo. Susurro algo le dio un beso y solo se quedó mirándolo.

-Cuando me entere que tenía un hijo me volví loco. Yo jamás tendría hijos. Como alguien tan brusco y ostil podría ser padre de un pequeño humano. Eso no era para mí, yo no sería buen padre. ¿Qué sería de mi sin mi adorada soledad y la continua tranquilidad de actuar como quisiera sin temor a perder nada?

-Fue aterrador ser padre. Más bien lo es, pero Anthony al final de todos los días es el único que está conmigo. Un niño me salvo. Viendo en perspectiva mi vida creo que siempre seremos Anthony, yo y mi gran maldición.

-Aleck. -Se a que se refiere y me enoja que una vez más Elizabeth lo está arruinando y haciéndolo creer que tiene una maldición. "Todo lo que amo muere o enloquece" decía continuamente.

-Esta bien Vy, no te preocupes, soy malo en todo lo que signifique el dejar de ser calculador. Sin con tal que mi maldición es más grande cada vez.

Solo lo miró sin decir nada. Agobiar a Aleck no es algo que le guste o que esté dispuesto aceptar. No cuando se ve como si lo hubieran aplastado.

-¿Camille? -preguntó cambiando de tema aún que más bien quiero información sobre donde está ella y cómo fue para él verla de nuevo. Quiero saber en que términos quedo todo y el por que Smith salio corriendo de aquí.