El Mujeriego Es Mi Prometido (editando)

Capítulo 53

Obsesionada

Vayolet

Tiempo pasado

Hace poco Liam me había hecho una escena que me había dejado tan furiosa que le había dejado de hablar. Al menos por unos días. Justo hoy se cumplía un semana de cunado le llegaron las fotos a Aleck del pequeño Anthony así le había puesto Elizabeth al bebe.
Las fotos eran claras había un rubio sentado de espalda mirando al bebé que jugaba en la orilla del mar con Elizabeth cerca de él.

—¿Qué vamos a hacer? Sabes su nombre y su edad pero aún no sabemos si es tuyo.

—Es un mini yo ¿aún dudas si es mio?creeme ese niño es mío y no planeo hacerme ciego ante eso.

—Ni si quiera querías tener hijos.

—Pues ya lo tengo Vayolet,—dijo de forma desesperado — y si no es lo que planeaba y me enoja. Pero me enoja más que ese niño no crezca con la imagen paterna que se merece. No me mal intérpretes sé que el rubio insípido es bueno, se que él sería un buen padre para mí hijo pero Elizabeth no es buena ni para el bebé ni para el rubio.

—Suenas como si te importará, y no hablo del niño. —Aleck al escucharme rueda los ojos y suelta un bufido.

—Solo... No me gusta la idea de que alguien pase lo que yo pase con ella. No es por él, es por cualquiera.

—Eres tan paternal. —Digo de broma sonriente y solo puedo pensar en cómo será cuidado el pequeño ojos bonitos. Nadie siquiera lo mirara mal. No habrá nada en el mundo que ese niño no pueda tener porque Aleck le conseguiría la luna si fuera necesaria.

—Pues espero serlo. Tengo que serlo. —su voz sono como si se la dijera más a así mismo que a mi y eso lo entendía.

Sono la puerta de mi departamento abrirse, sabía bien quién era. Danielle tenía llaves de mi departamento desde que me había mudado pues decía que un día me encontraría momificada en mi computadora. (chiste que hacía porque solo trabajaba, olvidaba comer y estaba más sola que la soledad) camino a paso suave como siempre hasta nosotros.

—Mi mujer preciosa —dijo besando mi mejilla —Hola amor de mi vida—Dijo ahora chocando el hombro con Aleck.

—Hola, cariño. —Dijo Aleck en un típico abrazo de hombres. —Tenemos malas noticias para nuestra relación.

—¿Por eso el SOS?—me pregunta ahora a mi, Aleck me ve mal por que no quería que nadie más que yo supiera.

—Bueno necesitábamos apoyo—Dan sonríe travieso por qué eso le da con qué bromear. —y no Danielle no digas algo como en que pared los apoyo. —la sonrisa de los labios de Danielle se borro y sacó lengua como si fuéramos unos niños.

—Bueno, amargada ¿por qué el SOS?

—Sencillo, serémos papás y espero eso no afecte en nuestra relación. —Le comento Aleck a Dan y tomó su mano. Danielle hizo cara de impacto. Y soltó su mano no sin antes darle un manotazo.

—¡Aleck Vaclav Campbell! ¡¿EMBARAZASTE A ALGUIEN?! No se supone que eres el tipo “ni encuentros casuales”, “ni citas con desconocidas.”

—Y lo soy Dan, siempre lo seré. Pero no embarace a una desconocida. Y el sermón ya me lo di yo mismo créeme. Lo hice hasta el cansancio.

—Así que esperamos un bebé,—Dan suspiro y cambio el tema porque el error ya no era algo que podíamos solucionar. —¿cómo le pondremos?.

—No, ya no esperamos un bebé. Ya existe un bebé mío y de la rubia despampanante de 1.78. —Dan abrío la boca de nuevo indignado, estaba tan indignado como cuando tú amiga te dice que regreso con su ex que le ha hecho el corazón como si fuera plastilina.