Capítulo 44

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La bruja del cuento

Vayolet

Hablemos de cosas feas, el día comenzó con una amenaza de Liam diciendo que si no dejaba a Henry. Haría cualquier cosa para que él me dejara y me rompiera el corazón. Sí justo dijo "para que si estas lo que yo sentí cundo mataste a nuestro bebé". Liam era el único error que había cometido en mi vida. Pensándolo bien tal vez era el más reciente.

Hoy era nuestra fiesta de compromiso, sí era la real, la que había organizado Smith y mi hermano. Por supuesto que invite a Smith de hecho ella aún no lo sabía pero planeaba hacerla una de mis damas de honor.

El lugar les había quedado hermoso. El penthause de mi hermano en uno de sus hoteles había sido el lugar. Claro que esto decía elegancia y familia, Aleck significaba eso para mí.

El lugar era muy grande pues tenía una gran terraza la cual habían arreglado para que se viera perfecta. Mi hermano se había encargado que nadie más que familia y amigos cercanos estuvieran. Evidentemente no había permitido que mi madre decidiera la lista de invitados.

Todo iba bien, traía un vestido color crema y Henry igual traía un traje de ese color solo que no iba tan formal. Los dos estábamos platicando con personas que nos preguntaban cosas sobre nuestra relación, pero nos mirábamos a lo lejos de forma intensa. Sus ojos azules no paraban de verme y yo solo podía dejar de pensar en lo que había pasado en el carro antes de subir.

Supongo que él pensó lo mismo porque sonrió cómplice, y yo igual relamio sus labios y joder estaba a punto de ir por él.

-Cariño, estoy tan feliz de verte por casarte, al fin-Regrese mi mirada a mi madre y le sonreí de vuelta. Últimamente solo podía sonreír. No lo hacía por quedar bien o porque tenía una sonrisa hermosa que hacía que me viera como algo que todos desean. Lo hacía porque él rubio que platicaba y jugaba con sus cabellos rubios, me tenía feliz.

-Lo amas ¿cierto? -Preguntó Aleck, mire a mi hermano y no sabía que decir yo solo no lo sabía. Mire a Henry que abrazaba a Kristen como a una niña pequeña.

-Yo...

-Aleck, por dios ¿Qué clase de pregunta es esa? Se casara con él. ¡Dios mio muchacho! parece que no te eduque bien. Tu hermana es difícil, si no lo amará no haría esto. ¿Cuantos novios le conoces? Dime uno.

Mi mamá miró molesta a Aleck y él sonrió, e hizo cara de niño inocente. Sabía que diría algo que molestaría a mamá, pero era el niño de mami nada de lo que dijera la haría enojar realmente.

-Tienes razón, madre sólo le conozco novias. Shanon la pelirroja de allá de cuerpo de infarto ¡oh! y ves la hermosa rubia de grandes ojos por allá.-Señaló a Smith que estaba en los bocadillos buscando que picar. Se veía fuera de lugar y eso le divertía a Aleck. -Su relación fue de 4 años o eso me dijo.-abrazo a mi madre y ella solo hizo cara de angustia. Así que hable antes de que ella lo hiciera.

-¡Aleck! , no jodas, no es verdad mami, la pelirroja es mi mejor amiga y la rubia es la inocente y nueva presa de tu malvado hijo. -Lo mire con los ojos de enojo y él rodó los ojos como siempre lo hacía. Sonrió de lado y negó con la cabeza.

-No es mi nueva nada. Ella me molesta cada que puede. Deberías de buscar a alguien más eficaz, mira se espanto y se tiro una bandeja de dulces encima en frente del padre de mi hijo. Ahora espera un buen apodo para eso, la pobre es un desastre. - volteé y en efecto estaba Danille con ella riendo y pasándole servilletas. Supongo que la había impresionado. Smith estaba roja y lo miraba tímida.

-Aleck no me gusta para nada que bromees con eso. Si te escuchan harán un alboroto sobre esto-los dos nos reimos. De mi podré madre a la que esto la escandalizava.

El Mujeriego Es Mi Prometido (editando) Where stories live. Discover now