Sexo sin compromiso [Kiribaku]

Capítulo CII.

***
Katsuki estaba ansioso con su móvil en la mano pues tenía mucha prisa por llegar a Shibuya.

Pensó por unos instantes en contactar con Eijirou mas lo descartó, no quería distraerlo de sus clases de la universidad.

"Se lo contaré por la tarde o por la noche."

Después inició sesión en intagram y vio varias personas le habían seguido y que otras tantas le habían escrito mensajes, algunos eran obscenos; así que los ignoró.

"Tks, qué gente más estúpida."

Luego decidió escuchar un poco de música hasta que finalmente llegó su tren y se subió.

Una vez dentro tomó asiento y continuó escuchando música. Katsuki no prestaba atención al resto de pasajeros, ni siquiera a los empleados que intentaban llamar su atención sin éxito pues estaba más concentrado en mirar por la ventana mientras se encontraba enfocado en sus pensamientos. Tanto que ni notó que un señor de mediana edad se acababa de sentar junto a él.

—Hola, joven. ¿No te importa que me siente aquí, cierto?

Katsuki no le contestó e insistió un par de veces más pero el chico seguía sin decirle nada, por lo que interpretó que le dejaba sentarse junto a él.

No fue hasta veinte minutos después que Bakugou notó la presencia de aquel hombre.

—¡Eh, viejo! ¡¿Qué mierda haces aquí?!

—¿Yo? Nada, sólo estoy aquí sentado porque es el asiento que tengo asignado. Y aun así te pregunté varias veces si te importaba y, como no dijiste nada, lo interpreté como un sí.

—¡Pues no estoy de acuerdo con eso! ¡Ve a otro que esté libre!

—No me moveré este es mi asiento, además el único que queda libre está demasiado lejos de la puerta.

El de ojos rubí refunfuñó pues debía aguantarse.

—Tchs, como sea.—Mientras no me molestes.

—No te he molestado en los veinte minutos que he estado sentado, así que puedes estar tranquilo.

—Bien.

No se dijeron nada más y una empleada que se acercó al señor se acercó a él para comprobar si todo estaba bien.

—¿Le ha molestado mucho este joven de aquí, señor? ¿Quiere usted que lo llevemos a otro vagón?

—No, no. Solamente fue un malentendido, no se preocupe. Ya está todo arreglado.

—De acuerdo, ¿desea algo?

—Sí, quisiera un periódico.

—¿Alguno en concreto?

—No, el que sea estará bien.

La mujer le aseguró que enseguida se lo traería y le dedicó una mirada de desaprobación al de ojos rubí.

"Qué maleducado. Gritarle así a un hombre tan agradable."—Pensó ella al alejarse.

Por su parte, a Katsuki no le importó en absoluto la mirada de ella, así que la ignoró completamente.

"Menuda estúpida."

El trayecto continuó con normalidad hasta que llegó a su destino.

***
Mientras que el rubio cenizo estaba viviendo un mal momento de su vida, Eijirou se encontraba en una de sus clases. Él estaba muy atento y apuntaba todo lo importante pues tenía mucho interés ya que ser profesor de gimnasia era algo que lo llenaba de ilusión.

"¡El profesor Toyomitsu es tan genial y varonil!"—Pensó mientras lo escuchaba.

Entonces Taishiro les habló a sus estudiantes para decirles:

—Estad atentos, chicos. Que tengo algo que anunciar.

En ese instante, todos se callaron y él pudo continuar con lo que iba a decir.

—Para el jueves día 19 quiero que hagáis por parejas un trabajo sobre las tres grandes pruebas del atletismo. Algunas parejas lo haréis sobre las carreras, otras sobre la prueba de lanzamientos y sobre la prueba de saltos.—Las instrucciones para hacer este trabajo están ya colgadas en la plataforma.—¿Alguna duda?

Todos los alumnos le habían echado un vistazo a las condiciones que el rubio les había impuesto para el trabajo. Nadie respondió, por lo que concluyó que los jóvenes lo tenían claro.

—Si no hay ninguna duda; decidme las parejas.

Le fueron diciendo con quien iba a ponerse cada uno y sobre el tema de su trabajo, Kirishima tenía la ventaja de que podía ponerse de pareja con cualquiera de la clase, pues era bastante sociable y se llevaba bien con todos. Sin embargo, para Todoroki no era tan sencillo, y no porque cayera mal sino porque le costaba más socializar y entablar relaciones con otras personas. Así que el pelirrojo decidió que quería ponerse de pareja con él, aunque le preguntaría antes por si acaso.

—Hey, Todoroki.—Se volteó Eijirou para hablar con el bicolor.

Shōto elevó sus ojos y miró al de dientes afilados.

—¿Qué quieres, Kirishima?

—Hablar sobre el trabajo que ha dicho el profesor Toyomitsu. ¿Quieres que nos pongamos juntos?

El de ojos desiguales lo pensó por unos segundos y le respondió:

—Vale.—¿Qué tema hacemos?

—A mí me gusta el de lanzamientos.

—Pues yo prefiero el de carreras.

Ambos se miraron y estuvieron en silencio por un breve tiempo hasta que Todoroki dijo:

—Podemos hacerlo sobre lanzamientos si quieres, me da igual.

—No, no. Se me ha ocurrido una idea: Vamos a ver de cual de los dos podemos sacar más información y, sea el que sea; lo hacemos. ¿Estás de acuerdo?

—Sí, me parece bien.

Seguidamente, cada uno revisó el tema que le gustaba y; cuando ya comprobaron cual era más extenso, se decidieron.

—Parece que el más extenso es el de carreras, así que lo haremos sobre ese tema.—Concluyó Eijirou.

—¿Seguro? ¿No te molesta?

—No, no. ¡Para nada!

A Eijirou realmente no le disgustaba aquel tema, era sólo que le agradaba más el  otro.

—Bien. Entonces se lo decimos al profesor.

—Sí, vamos a decirle.

Los dos fueron a decirle al profesor y, cuando ya estuvieron acordadas todas las parejas; la clase se dio por terminada y pudieron irse a almorzar.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!