Sexo sin compromiso [Kiribaku]

Capítulo LXXXVII.

***

Los novios caminaban despreocupadamente sin haber sido conscientes de que habían sido espiados por Neito, quien ya estaba informando a Awase de que estaban juntos.

Awase.

Mira esta foto._Monoma

El rubio adjunto la imagen y el de cabellos negros no tardo en responder mediante audio muy alterado.

>¡No puede ser! ¡Kirishima es toda una puta! Se acuesta con otro y no conforme con eso se trae al verdadero novio. Se ve que le gusta tener más de un pene disponible. Tal vez la idea del trío no sea descabellada viendo en lo que se ha convertido.

Ojalá ;)_Monoma

Aunque también podríamos convencer al rubio que va con él, es muy sexy._Monoma.

Haz lo que quieras._Awase

Yo lo que quiero es tener al antiguo Kirishima de vuelta, no a este cerdo asqueroso sediento de hombres._Awase

Jajaja. Me encanta que te hagas el puritano cuando tú mismo me has contado que le engañabas con otra gente._Monoma

¡Fueron malentendidos! Kirishima se puso celoso sin permitir que me explicase._Awase

Pero eso es cosa del pasado, si volvemos ya no cometeré los mismos errores y Kirishima no querrá irse de mi lado jamás._Awase

Sí, bueno. ¿Tienes algún plan?_Monoma

Por el momento les dejaremos tranquilos para esta cita pero mañana será todo muy distinto. Les voy a sabotear su fin de semana como pareja._Awase

Es posible que hasta terminen si sale bien el plan que estoy pensando._Awase

¡Eh! ¡Comparte tu plan!_Monoma

Mañana._Awase

Todavía tengo que pensar ciertos detalles._Awase

Está bien. Hablamos mañana._Monoma

Yosetsu no le respondió más y decidió ignorar su teléfono, pues estaba demasiado enfadado.

"Serás mío de nuevo, Kirishima. Pronto conseguiré tu atención y dejarás a ese Bakugou y al resto de hombres con los que te revuelcas."

***

Eijirou había decidido que estaría bien llevar a su novio para visitar un museo sobre arquitectura grecorromana, pues sabía que a Katsuki le encantaba.

Cuando llegaron, el rubio cenizo no se lo creía.

—Ei, ¿Estás seguro de que quieres entrar aquí?

—¡Claro! ¿Acaso no quieres?

—Sí, pero... ¿No será aburrido para ti?

—No, me hace ilusión poder compartir contigo sobre algo que te apasiona.—Aseguró sonriendo ampliamente.

Katsuki se sintió complacido y le sonrió.

—Gracias, Eijirou.—Eres el mejor.—Dijo para luego darle un beso.

Tras su momento cariñoso como pareja, entraron al museo, donde les hicieron un descuento por ser universitarios.

—¡Vamos, Katsu!—Exclamó llevando de la mano a su novio.