Capítulo C.

554 84 22
                                    

***
Katsuki se hizo la cena, la cual consistía en ternera con arroz, pues había aprovechado que la carne estaba de oferta.

Cuando se sentó a la mesa para comerla, apareció Hanta.

—¡Hola, Bakugou!—¿Qué estás comiendo?

—Arroz con ternera.

—¡Suena bien!—¿Hay para mí?—Bromeó.

—No, te jodes sólo hice para mí.

El de cabellos azabaches de rio.

—Jajaja. No te preocupes. Solamente bromeaba.—Dijo para comenzar a alejarse.

Momento en el que Katsuki le dijo:

—En realidad sí que hay para ti.

Sero paró en seco y preguntó:

—¿De verdad?

—Sí, en la cacerola.

—¡Qué amable! ¡Gracias!

—Tks, no lo he hecho por ti. Sólo te lo digo porque las cantidades fueron un poco más grandes de lo que creía.

Su amigo, que lo conocía muy bien; sabía que no era cierto pues al rubio era muy metódico y nunca se equivocaba con las porciones de comida.

—Claro, claro.

Finalmente, se dirigió a la cocina y se echó un plato de arroz con ternera. Luego se sentó junto a Bakugou para comer.

—Oye, Bakugou. ¿Qué pasó con las fotos al final?

—Denuncié a la zorra que lo hizo.—No sé si habrá juicio o llegaremos a un acuerdo pero, por el momento, ya está jodida y con eso me basta.—Aseguró para luego seguir comiendo.

—Ojalá reciba su castigo.—Dijo Hanta.

—Ni lo dudes.

Siguieron comiendo tranquilamente hasta que Sero anunció algo:

—Bakugou, mañana por la tarde vendrá Mina a pasar unos días aquí.—No te importa, ¿verdad?

—No, mientras que no arméis mucho escándalo por la noche...

Su comentario hizo que el chico se sonrojase.

—N-nosotros somos discretos.

—Más os vale.—Por cierto, ¿ojos de mapache sigue estudiando en la universidad de derecho de Osaka?

—Sí, todavía sigue.

—¿Y cómo le va?

—Bastante bien. Ella estudia mucho y además le ayuda su amiga Yaoyorozu; una compañera suya.

—Me sorprende que le esté yendo bien. Ella rara vez sacaba buenas notas.

—Eso es porque se aburría en el instituto pero esta carrera le agrada y no le importa esforzarse lo necesario para obtener una buena nota.

—Supongo.

A los pocos minutos, acabaron de comer y Sero se ofreció a lavar los platos.

—Yo lo haré. Tú me has hecho la cena de hoy después de todo.

—Vale, estaré en mi habitación.

—De acuerdo.

El de ojos rubí, salió de la cocina, fue a lavarse los dientes y después a su habitación para comenzar con un trabajo que debía entregar en una semana.

"Lo acabaré en dos días y así podré darle toda mi atención a Eijirou."—Pensó imaginando el fin de semana apasionado que iban a tener.

***

Kirishima se había dirigido al comedor de su residencia, algo que era bastante cómodo para él, ya que no le apasionaba demasiado cocinar.

"Ojalá haya algún buen plato de carne."—Pensó por el camino.

Cuando llegó, tomó una bandeja, un plato, un vaso, una servilletas y cubiertos. Por desgracia para él, la fila avanzaba con lentitud aquella noche.

"Qué fastidio. Con el hambre que tengo."

Entonces alguien tocó su hombro derecho y se topó con un rubio que, por alguna desconocida razón; se le hacía familiar.

"¿Quién es este tipo?"

—Eh... Hola. ¿Te conozco de algo?—Cuestionó Eijirou.

—Sí, Kirishima. Nos conocimos en una cafetería a la que fuiste con amigos tuyos. Te di mi teléfono.

El pelirrojo frunció el ceño y empezó a recordar.

—¡Oh! ¡Tú eres Monoma!

Neito sonrió satisfecho al ver que el de dientes afilados.

"Esto es genial. ¡Él realmente lo recordó!"

—¿Qué estudias en esta universidad?

—Interpretación. Quiero ser actor algún día.

—¡Eso es genial!—Espero que tengas suerte.—Dijo con la intención de dar media vuelta para empezar a elegir su cena.

Al rubio no le gustó eso, así que tomó la muñeca de Eijirou.

—¡Oye, espera!

El de ojos rubí se giró para mirarlo, sorprendido por la actitud del contrario.

—¿Qué pasa?

—Quiero cenar contigo.—Me siento sólo y quiero que tú me hagas compañía.

—¿Por qué? ¿No tienes amigos?

—Sí, pero quiero conocerte mejor y que seamos amigos.—Dijo para parecer inocente y que el otro no se percatase de sus verdaderas intenciones.

—Oh, entiendo.—En ese caso, está bien. Cenemos juntos.—Dijo sonriendo.

Neito también sonrió.

"Bien. Finalmente podré saber más de él y así lograré conquistarlo."

Cada uno tomó para cenar lo que quiso y después se sentaron juntos en una mesa.

"Lo siento, Awase. Pero me parece que yo seré el que se lleve a este bombón~"

—Kirishima, cuéntame algo sobre ti. Lo que sea.

La petición del rubio lo dejó algo descolocado, sin embargo accedió.

—Está bien. ¡Pregunta lo que quieras!

Al oír eso, Monoma sonrió de nuevo. Él aprovecharía al máximo aquella ocasión."

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!


Sexo sin compromiso [Kiribaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora