Una nueva visión

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—¡Armitage Hux, Armitage Hux!

Cuando Hux dio un paso el frente por petición seria de Ren, nunca imaginó ni por un segundo que este fuera a nombrarlo Lugarteniente legítimo del Clan Oscuro. Fue tanta la emoción que sintió, la dicha que lo embargó sin tregua alguna, que se habría quedado de piedra en su lugar de no ser porque la multitud comenzó a corear su nombre en voz alta. Se les unió muy feliz, ronroneando en agradecimiento por el honor que acababa de recibir.

El joven Líder asintió desde la cima de la Roca Alta y bajó de ella a saltos veloces para reunirse con su amigo y felicitarlo. Sabía de sobra que Hux era más que el indicado para portar el título importante. Además de Phasma, no conocía guerrero más trabajador y leal que él que tuviera el derecho de ser su zarpa derecha durante todo el tiempo que durara su liderazgo.

—¡Felicidades, petirrojo! —celebró su amiga gris, restregándose contra su costado con fuerza cariñosa y amistosa. Se notaba en sus facciones, en sus intensos ojos azules, lo orgullosa que estaba de su ascenso —Te lo mereces.

—Ya, Phas, agradezco tus atenciones, pero ¡me estás aplastando!

El reciente Lugarteniente no mentía en lo absoluto con lo que su amiga hacía con él, pues lo tenía de tal manera abrazado con su cola y zarpas que le impedía sin querer respirar correctamente al estar demasiado pegado contra su pecho. Las lágrimas que Phasma derramaba a raudales resaltó aún más su alegría.

—Los vas ahogar si no te detienes, Phas —bromeó Kylo una vez llegó con ellos a la base de la gran roca. Cuando su amiga se giró hacia él y soltó al fin a Hux, el fuerte gato negro se arrepintió de inmediato de haberla parado —. No, no, ¡ni se te ocurra!

—¡Ven aquí, hermano! —saltó en su contra, no logrando derribarlo, pero si lamerlo en la mejilla repetidamente y avergonzarlo frente al público que todavía los rodeaba —Siempre supe que ambos estaban destinados a grandes cosas —Kylo dejó de forcejear y permitió que Phasma descargara sus emociones en él. Hux también se acercó y ella lo animó a unirse a su abrazo. Él no dudó mucho en obedecer —. Ustedes, cachorros impulsivos; ustedes mis hermanos más valiosos de guerra.

Los dos machos que antes sufrían por sus atenciones desmedidas, se derrumbaron contra ella, llorando y agradeciendo la fe que les tuvo desde el principio. Ninguno creyó jamás que Phasma pensará así de ellos. Se sintieron comprendidos, a gusto por fin, después de muchas lunas y años, de formar parte del Clan Oscuro.

—¡Váyanse todos! —gritó Mitaka a la multitud chismosa que contemplaba la tierna escena —¡No hay nada que ver aquí!

Todos se fueron reticentes a sus lugares respectivos, dejando a solas al trío lloroso que se recuperaba de apoco de las lágrimas y se erguían derechos para seguir mirándose con suma felicidad.

—¿Cuál es tu primera orden a seguir, Líder Ren? —preguntó Hux, con los ojos brillantes de la emoción.

—Sea cuál sea, la acataremos sin dudar —aseguró Phasma por los dos, causando que Kylo ronroneara encantado.

—Me alegra que lo preguntes, petirrojo —su mirada ambarina, feroz y envolvente, los dejó sin habla, no por temor, sino por asombro. Definitivamente tenía que ser algo bueno para que se mostrara tan decidido.

—¿Y bien? Somos todo oídos, Ren —alentó el Lugarteniente a que comenzara. No quería hacerse ideas que no eran, pero tenía la leve sospecha de lo que pretendía. Y tal parecía que la guerrera también pensaba igual que él en ese aspecto.

—Primero, dejen de llamarme así —sus amigos lo miraron sin comprender. Continuó, con un suspiro pesado, algo dudoso —. Kylo Ren está muerto, ya no existe más.

Star Paws: A New WarriorМесто, где живут истории. Откройте их для себя