¿Compañero nuevo?
Trabajo pendiente… mucho trabajo pendiente. Eso era lo que ocupaba la cabeza de Lu en esos momentos. Con todo lo ocurrido en las últimas semanas se había atrasado con sus diseños, y Stefanno, su jefe, no estaba feliz con eso…
- Bella- pronunció con ese acento italiano que lo caracterizaba- no dudo de tu talento… de tu capacidad… de tu brillante cabecita… Pero esos diseños debieron estar listos hace una semana y media…- con rostro serio apoyó sus codos sobre su escritorio. Instintivamente, Lucianna se alejó y se hundió un poco en su asiento frente a Stefanno- te he dado muchas facilidades… pero bella, que tengas una creatividad y talento infinito no significa que seas imprescindible…
- Lo sé Stefanno, créeme que lo tengo claro. Es solo que he tenido unas semanas desastrosas- resopló y sintió una punzada en el pecho al recordar las últimas semanas. Emilia ya no seguía enfadada con Jared, pero tampoco hablaba de él. Por su parte, Jared no se había contactado con Lucianna, ni siquiera para preguntar por Emi. Eso, en vez de tranquilizarla, solo la preocupaba más- Discúlpame- se aclaró la garganta- tendré esos diseños listos, te lo aseguro. Serán lo mejor que hayas visto jamás- dijo recobrando la seguridad.
- Eso espero bella, ya que para la próxima semana tengo otra tarea para ti...- Stefanno sonrió de forma cómplice, como si tuviera algo entre manos. Luce se sintió curiosa al respecto.
- ¿de qué se trata?- enarcó una ceja y Stefano soltó una carcajada-
- ¿has trabajado diseñando ropa para hombres?- Luce frunció el ceño. Ella lo había hecho, pero no lo consideraba su fuerte. Siempre había preferido diseñar para mujeres.-
- La verdad… si, pero – hizo una mueca de desagrado- no crea que sea competente…- Stefanno sonrió con calidez. Él era consciente de las capacidades de Lucianna, pero sabía también que ella era precavida y prefería quedarse dentro de su zona de confort. Es por eso que estaba decidido a sacarla de esa burbuja y exigirle más para así sacar su verdadero potencial-
- Pues yo sí creo que lo eres- Stefanno dio un soplo a sus uñas- tómalo como un desafío, además, no estarás sola en esto…- guiñó-
- ¿Alex trabajará conmigo?- él negó con la cabeza y volvió a sonreír de forma pícara- ¿Amanda?- Luce arrugó la nariz-
-No querida… ni Alex, ni Amanda, ni nadie que esté trabajando en este edificio- movió sus manos haciendo círculos- es un viejo amigo mío… bueno, no tan viejo- río como si se tratara de una broma privada. Te aseguro que se llevaran de maravilla- Stefanno volvió a guiñar y luego suspiró- tengo un buen presentimiento sobre esto bella, confía en mi-
Lucianna casi sintió pánico. Primero, tenía la situación de Jared y Emilia metida en la cabeza, segundo, debía terminar esos diseños ahora, tercero, ese “desafío” que su jefe había planteado era algo que la asustaba, cuarto… ¿quién demonios era ese “amigo” de quien hablaba Stefanno?
-¿Alex?- Lucianna entró a tropezones a la oficina-
-Aquí – Alex estaba de cabeza en su laptop, solo levantó su mano para indicar que se encontraba allí-
-Tengo que contarte algo…- se sentó sobre la mesa de Alex y comenzó a contar con detalle su reunión con Stefanno. Incluyendo el desafío y nuevo compañero de trabajo.
- uhhh… ¿Amigo dices?, pues… no sé quién pueda ser. Stefanno conoce a mucha gente. Pero te aseguro de que debe ser un proyecto importante, él no es de los que saca nuevas líneas por qué sí…
- De todos modos, me da miedo. ¿y si es un estirado? ¿Un pesado? ¿si YO no le agrado? – Luce sentía que iba a hiperventilar. Había muchas preguntas e inseguridades que la aquejaban.
- Tranquila Lu, si tienes algún problema estoy seguro que podrás hablar con Stefanno – Ella nos e tranquilizó, al contrario. Su corazón palpitaba cada vez más rápido, era como una de esas veces en las que tenías un presentimiento tan fuerte que sabías con toda certeza que algo iba a suceder.
-Mami, me duele mi pancita- Emilia volvía a quejarse de aquel dolor. Ya la había llevado a un médico pero al parecer los calmantes que le dieron no seguían haciendo efecto-
- ¿Duele mucho, bebe? – Emi asintió e hizo un puchero-
- Y también me duele mi corazón- llevó una mano hasta su pecho, posando su mano en el lado derecho. Luce sonrió con ternura-
- Mi amor, tu corazón está aquí- tomó la mano de la pequeña y la llevo hasta el lado izquierdo. Emi asintió- ¿por qué te duele el corazón?
- Porque parece que Jared se olvidó de mí, y yo dije que lo quería mucho- Lucianna tomó a la pequeña en sus brazos-
- Estoy segura que Jared no se ha olvidado de ti, mi bebé. Debe estar trabajando… él trabaja mucho, ¿sabes?- Emi negó- pues sí, escribe canciones, les pone música, hace videos…
-¿Videos de monitos?- preguntó entusiasmada, fue como si por un momento olvidará que su estómago dolía-
-No amor- Lu rio- videos de música… y también dibuja…
-¿cómo yo?- la niña esbozó una sonrisa, para ella, que Jared compartiera ese pasatiempos era algo único-
-ajam… como tú…- Luce acarició el cabello de Emi y le dio un beso en la frente-
-¿y como tú?-
- y como yo…
… Una semana después…
Aún no había noticias sobre Jared. Lucianna evaluó la posibilidad de llamarlo, intentar hablar… hacer ALGO para que Emilia no estuviera triste, pero el nerviosismo y el miedo le ganaban…
Por otra parte, de nuevo había llevado a Emilia al doctor, habían cambiado las pastillas dela pequeña y al parecer esta vez el dolor había desaparecido…
“Una preocupación menos” pensó Lucianna…
Ahora debía enfocarse. Por fin conocería al amigo de Stefanno, su nuevo compañero de trabajo. Estaba ansiosa, nerviosa, preocupada… Alex había mencionado que seguramente era algún diseñador que parecía ser talentoso y que seguramente era gay (además agregó que de ser así, él quería conocerlo). Lucianna no hizo comentarios al respecto, solo esperaba que ella y su nuevo compañero se llevaran bien…
Ese día se vistió un poco más formal que lo habitual, llevaba un vestido formal ajustado, llegaba hasta la rodilla y era de color gris claro. Agregó un cinturón delgado de color rojo, que hacía juego a sus zapatos de tacón del mismo tono. Recogió su cabello en la parte baja de su cabeza y luego corrió hacia Ian en busca de aprobación. Él y Emi habían dado el sí a su nuevo atuendo y le desearon suerte antes de que ella saliera de casa.
A penas puso un pie en la oficina, Grace, la pelirroja secretaria de Stefanno, le informó que el señor Di Berardi de encontraba en una reunión con el nuevo diseñador y que en unos minutos la harían pasar para que fueran presentados.
-¿y, cómo se llama?- Luce preguntó mirando hacia la puerta de la oficina de Stefanno-
- Mmmm, no lo recuerdo…- Grace mordió su labio y reprimió una sonrisa.
- Vamos Grace, sé que estás mintiendo… ¿quién es?- Lucianna insistió-
- Lu, no puedo decirlo. El señor Di Berardi me ordenó que no dijera ni media palabra sobre tu nuevo compañero…- “Mierda” pensó Luce, eso no podía estar bien
- ¿Por qué?- Grace se encogió de hombros y volvió a esconder una sonrisita.
- ¿Es gay? – preguntó intentando sacar algo de información- ¿se ve simpático?, ¿es famoso? Dime algo por el amor de Dios, estoy muriendo de nervios- retorció sus dedo hasta hacerlos sonar-
- Lucianna, no me pongas en aprietos, no puedo decir nada…- Luce la miró con ojos suplicantes y Grace no pudo aguantar más- Bien, no es gay… es bastante agradable, y si, es famoso…
- Y… ¿cómo luce?...-Grace negó- por favor Grace, te prometo que no diré que has mencionado algo. En serio- Luce levanto ambas cejas y sonrió. Grace suspiró-
- Alto, pelo oscuro, rostro cincelado – a medida que hablaba, Luce notó como Grace se sonrojaba- nariz definida… ojos azules…- “mierda” pensó Lucianna otra vez…- Y no diré más. Grace se inclinó y comenzó a teclear mirando fijamente la pantalla mientras tarareaba una canción que Lu no logró reconocer…
Lucianna se alejó del escritorio de Grace y caminó en círculos, nerviosa. Alto, pelo oscuro, rostro cincelado… muchas personas podían ser así, ¿verdad?... ojos azules… los ojos azules son relativamente comunes ¿no?... bien, quizás no tanto… pero no podía ser Jared, él era famoso… ¿qué iba a hacer aquí? Además, ¿siquiera se conocía con Stefanno? ¿era eso posible? Esperaba que no…
Mientras seguía dándole vueltas a la posibilidad de que Jared fuera su nuevo compañero de trabajo y cuántos hombres famosos de ojos azules existían, Grace la llamó… Stefanno Di Berardi la estaba esperando. Era cuestión de segundos antes de corroborar sus sospechas…
Tocó la puerta un par de veces antes de abrir… Entró mirando hacia sus zapatos y se volvió para cerrar la puerta. Respiró hondo y corrigió su postura, volvió a voltear al momento que levantó la vista. Frente a ella dos hombres… Stefanno… y él…
Sintió que su boca cayó hasta el piso y probablemente había arruinado sus zapatos nuevos con baba. Él se veía increíble en ese traje, uno muy caro, notó. Remeció su cabeza y se acercó procurando no tropezar.
Él sonrió y ella sintió que se derretía.
Él estiró su mano para estrechar la de ella.
Ella aceptó el saludo y una corriente de calor se extendió hasta lo más profundo…
- Señorita Marelli, es un placer-