Encadenada al Amor [COMPLETA]✔️©️

Cap. 56. Parte 1 - Un simple conocido.

El tatuaje tardó más de lo que había esperado, se tuvo que dividir el trabajo en diferentes sesiones, cada una en diferentes semanas. 4 sesiones después el tatuaje estaba listo, la primera vez que me miré en el espejo fue una experiencia poderosa.

Decidí no verme hasta estar en casa, necesitaba estar sola para ver los resultados, para encontrarme con esa nueva parte de mí.

 Y una vez en la soledad de la habitación, frente al espejo del vestidor, me giré para mirarme. En el lugar donde antes estaba esa "D" marcada burdamente sobre mi piel, ahora había un par de grandes alas que de una vez por todas le daba fin a ese obscuro sentimiento de que le pertenecía a alguien más y finalmente lo dejé ir, dejé ir a Darko, dejé ir el miedo y dejé ir de mi día a día los recuerdos y detalles dolorosos.

No se trataba sólo de un poco de tinta sobre una cicatriz, se trataba de un símbolo de libertad, significaba que poco a poco comenzaba a recuperarme a mí misma y en realidad sólo faltaba una cosa más para lograrlo por completo.

Esa mañana cuando desperté, los pensamientos y recuerdos lujuriosos de Alek me inundaron. Estaba avergonzada y sonrojada por encontrarme a mí misma, sola, en la cama pensando en la última vez que Alek me había tocado, hasta el punto en que comencé a sentir mi corazón latir con una fuerza particular en lo profundo de mi pecho.

Quería, necesitaba recuperar por completo todo lo que me habían arrebatado. Y eso incluía la sensación de bienestar y comodidad que acompañaba un momento tan intimo como ese.

Sin pensarlo demasiado bajé la mano entre las cobijas que me cubrían y la deslicé por debajo de mi pijama. Cerré los ojos visualizando mejor los recuerdos de Alek mientras casi lograba escuchar su voz junto a mi oreja... Hice un verdadero esfuerzo por recordar solo lo mejor, aquello que había hecho latir mi corazón y me había desbordado en placer en el pasado.

 Pero entonces, la sensación de silencio absoluto, el latir de mi corazón acelerado subiendo a mi cabeza y retumbando en mis oídos y un vacío en el estómago me hizo detenerme de golpe mientras sentía que sudaba frío.

Abrí los ojos como si acabara de despertar de una pesadilla, sin darme cuenta aún había un obstáculo que ensombrecía esa parte tan importante de mí, un obstáculo que me impedía sentir placer y que me provocaba náuseas tan sólo de pensar en estar con alguien, incluso si ese alguien era una persona con la que ya lo había experimentado.

¿Pasaría así el resto de mi vida? Sin poder tocar siquiera a la persona que amaba.

Al final me levanté de la cama de mal humor y comencé a alistarme para ir a entrenar. Me encontré con Garett en la cocina y mientras él se tomaba un café sentado en la barra yo no dejaba de pensar en esa sensación, él era la única persona disponible en ese momento a la que le tenía completa confianza, por lo que las palabras salieron solas.