Los Que Se Pelean ¿Se Desean?

Capítulo 85.

Louis viene hasta nosotros cargando con la escalera para así subirse a ella y poder colgar la imagen. Ayudo a Bella a sujetar la imagen, pesaban más de lo que me imaginaba.

Cuando queda colgada, doy un par de pasos hacia atrás para verla mejor. Miro a Bella y cuando veo que esta me mira, sonreímos. La imagen había sido echa uno de los primeros días del festival, en el que Bella y yo habíamos ido vestidos de blanco. Bella aparece sujetada por mi brazo, mientras yo me agacho como si la fuese a besar, pero ambos aparecemos riendo.

-¿Ya hemos terminado con las fotos, no?- pregunta Louis bajándose de la escalera.

Bella asiente con la cabeza.- Por hoy hemos terminado.

Después de aproximadamente veinte minutos, nos despedimos de Louis y el chico se va del piso dejándonos a mi y a Bella a solas.

-¿Qué hacemos?- Bella deja caer su cuerpo sobre el mío que está detrás suya.

La cojo entre mis brazos. Los dos reímos.

-¿Cenamos?- le miro con cara de pícaro. Bella ríe.- Y cocino yo.

Bella jamás dirá que no a que otra persona prepare su cena ya que, entre lo que más pereza le daba hacer, se encontraba el preparar la cena.

Me mira pensativa.- Vale, me parece buena idea.

No sé para que se ha echo la pensativa...

***

Bella.

-Menos mal que os he tenido a vosotros para ayudarme...- dejo el plato sobre la mesa de cristal que he comprado hoy para la terraza.

Que Max y Louis me hubiesen ayudado durante estos días, no me había podido venir mejor. Mañana de tarde viajaría a Londres y, de esta vez, no tenía ningún tipo de escapatoria para poder quedarme aquí.

-Si, menos mal... Porque sino no sé si aún estarías empezando a montarlos.- ríe.

Golpeo su hombro divertida.- Que sepas que en Londres monté todos yo sola.- digo intentando sonar lo más convincente posible. Max me mira alzando una ceja.- Bueno, en realidad pagué más para que me los montaran.

Max suelta una carcajada.- Si es que quieres hacerte la digna y no...

Los dos reímos.

-Tengo ganas de volver a Barcelona solo para cenar aquí todos los días.

Cenar en la terraza iba a ser uno de mis planes favoritos cuando viniese a Barcelona. Es imposible que esté más cómoda.

-Quédate aquí y recojo yo.- dice Max levantándose.

Lo agarro y lo echo hacia atrás haciendo que se siente de nuevo en donde estaba.

-Tu ya has cocinado, me toca a mi.- me levanto del sofá.- Vete buscando la película que querías ver en el ordenador.

Recojo todos los platos y cubiertos que hemos ensuciado durante la cena y, a continuación, salgo de la terraza.

La parte mala de la terraza es que está en la habitación de arriba...

Para cuando llego a la planta principal, dejo todo en el fregadero de la cocina y así, lo fregaré mañana después del desayuno. 

Apago todas las luces de la planta ya que no volveríamos a bajar, subo de nuevo las escaleras hasta la planta de arriba y corro hacia la habitación.

-¿Qué haces?- pregunto desde la entrada de la terraza.

Para mi sorpresa, cuando miro la pantalla de mi ordenador, veo como Max está leyendo uno de los tantos capítulos que he escrito en Wattpad para desahogarme.