Mi Reflejo...

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Mi Reflejo...


–Los días fueron pasando, Federico no hubo momento que no estuviera pendiente de su princesa, todos los días iba a diferente horas a estar con ella sin descuidar su trabajo y el papel más importante de su vida el de ser padre. Nicolás y Daniela estaban de lo más felices, las palabras de Alicia no habían provocado más que Daniela sintiera lastima por su cuñada, y es que no había otro sentimiento que sentir ante una persona que lo único que tiene en su vida es amargura y soledad. Rigel junto a Armando organizaban la boda lo más antes posible y es que estaban tan felices con la noticia que serían padres. Para Raquel las cosas no eran distinta le encantaba ver a su hija contenta a pesar de lo que estaba pasando, aunque la situación con Elías cada vez era más insoportable ella trataba por todos los medios de sobre llevarlo por su hija. Por su parte para Alicia estos días habían sido complicados, Nicolás escuchó todo lo que ella le había dicho a Daniela y no le gustó nada, así que en cuanto pudo le dejo claro que no la quería en su vida, que se mantuviera alejado de Daniela y de su hijo, para Alicia fue difícil que Nicolás le exigiera mantenerse alejada de él, pero lo que ,más le había dolido era el reclamo de Rogelio cuando se enteró lo que ella había hecho a Rigel y es que él le pidió lo mismo que Nicolás le había pedido que se mantuviera lejos de él–


–esa mañana Raquel junto a Regina habían ido a la clínica, la Oncóloga Luna junto a Nicolás, la revisarían y por fin le quitarían el dren que le habían colocado, los puntos de la cirugía también se los habían quitado esa mañana, tanto la oncóloga como Nicolás le explicaron a Regina que la operación había sido un éxito que el siguiente paso en su proceso sería continuar con las quimioterapias las cuales serían menos agresivas que las primeras y después de eso, analizarían si sería necesario las radiaciones o solo una vacuna tomada que le tendrían que suministrar cada mes, esa mañana había sido una mañana buena, la seguridad en el rostro de los médicos que la trataban le dio la fuerza que necesitaba para saber que todo iba a estar bien–

Raquel – mi amor te lo dije –Regina la observó con una sonrisa–

Regina – ay mami –la observó– yo sólo quiero poder llevar una vida normal

Raquel – y la llevaras cariño –acarició su rostro– mira –tocó su cabeza, el cabello ya le estaba saliendo– esto parecía casi imposible –Regina sonrió con sus ojos llenos de lágrimas–

Regina – nunca me imaginé lo importante que era mi cabello

Raquel – así pasa mi amor, a veces no nos damos cuenta de las cosas maravillosas que tenemos hasta que ya no están en nuestra vida –Regina la observó con ternura sabía a lo que se refería–

Regina – tan mal están las cosas con mi padre –Raquel suspiró con pesar–

Raquel – creo que nos hicimos mucho daño en todos estos años

Regina – ¿acaso no lo quieres? –Raquel la observó–

Raquel – mi amor, a veces el amor no es suficiente para poder mantener una relación sana, la confianza es lo más importante y saber perdonar es fundamental

Regina – pero siempre se veían felices

Raquel – ay Regina, muchas veces solo era apariencia, pero bueno no quiero hablar de eso

Regina – sabes que lo que necesites cuentas conmigo –Raquel acarició la mejilla de su hija–

Raquel – lo sé mi amor –se acercó para darle un beso en la mejilla– necesito hacer unas cosas –Regina le dio una sonrisa–

Enséñame a VivirWhere stories live. Discover now