Enséñame a Vivir

La fundación...

La fundación...

–Alicia camino por los pasillos hasta llegar a los laboratorios sonrió al observar a una buena aliada ahí, al principio se negó a hacer lo que ella le había pedido pero ante la muy jugosa suma de dinero que le ofreció no pudo resistirse–

Alicia – estar a dieta un poco no le vendrá mal –sonrió negando mientras se acercaba a la habitación donde estaba la madre de Rogelio–

Rogelio – iba a buscarte –se veía preocupado–

Alicia – lo siento, es sólo que como vimos aquí a Daniela quise ir a buscar a Nico para hablar con él

Rogelio – debes darle tiempo –la observó– por cierto –guardó silencio para después suspirar– me dijiste mi amor sólo para que Daniela y Rigel escucharan –Alicia negó– por favor Alicia no mientas –ella bajó la mirada–

Alicia – bueno sí, y tienes que entenderme Rogelio yo sé que te dije que quiero cambiar pero tampoco me pidas que trate bien a la zorra esa

Rogelio – sé que te dolió lo que Armando hizo –Alicia negó–

Alicia – no fue sólo Armando, ella apreció lo sedujo hasta hacer que me dejara plantada

Rogelio – sí él no te hubiera dejado plantada, tú ahora estarías con él –su comentario estaba cargado de reproche–

Alicia – él hubiera no existe –lo observó un poco nerviosa– creo que no es bueno que removamos el pasado –se acercó a él– mejor dime ¿cómo está tu mami?

Rogelio – pues al parecer bien, solo fue un pre infarto y bueno estará en observación tendrá que hacer dieta, y cuidarse

Alicia – me alegra, bueno ya que ahora sé que está bien yo quiero ir a mi casa a cambiarme –se señaló– creo que este atuendo no es para un hospital –Rogelio negó dibujando una pequeña sonrisa–

Rogelio – tienes razón, deberías de ir a tu casa darte un baño, descansar –Alicia asintió–

Alicia – ¿vas a estar aquí? –Él asintió– voy a mi casa me doy un baño y regreso

Rogelio – no es necesario

Alicia – es parte se mi cambio, por favor déjame hacer algo diferente –Rogelio suspiro–

–Daniela junto a Rigel y el pequeño llegaron a una cafetería, bastó un par de minutos en el área de juegos para que Daniel hiciera amigos, mientras su madre y Rigel platicaban él se divertía aunque le hacía mucha falta alguien, suspiró al recordarla para luego aventarse de la resbaladilla–

Daniela – ¡entonces Rania y Rogelio! –estaba realmente sorprendida–

Rigel – ella jura que son amigos, pero –con la cuchara quitó un poco de pana de su frape para llevarla a su boca– yo creo que hay algo más

Daniela – pero Alicia dijo mi amor –Rigel asintió– y Rania no estaba con... –Rigel la interrumpió–

Rigel – me preocupa que Rania piense en darse una oportunidad con Rogelio, pero esté este con Alicia, porque digo nosotros sabemos lo que esa arpía es capaz

Daniela – ni que lo digas, de verdad que intentó entender porque hace tanto daño y no lo logró descifrar, es cómo si los odiara, como si con el sufrimiento de Regina y Nico ella fuera feliz

Rigel – yo creo que deben ser celos, envidia, o que simple y sencillamente es una arpía –Daniela sonrió negando– mira –observó al mesero– cheese cake –observó a Daniela– hay que pedir uno