Hey Quitate Enana

57 Miranda Tiene Razón

Esto no se pondrá nada bien. 

Miré a Callan y luego a Christian. Ambos se miraban molestos.

—al idiota que esta parado frente a mi—respondió Callan.

La música dejó de sonar, las personas dejaron de hacer lo que hacían y comenzaron a observar la escena. Christian empujó a Callan y eso fue suficiente para que el se enojara. Antes de que pudieran comenzar una pelea me pare frente a Christian y cerré los ojos, un “¡Ah!" logró escucharse por parte de la mayoría. Abrí los ojos encontrando a Callan frente a mi.

Su mirada mostraba confusión y enojo. Negó con la cabeza, se dió media vuelta y caminó hacia la puerta, la abrió y sin decir nada salió yéndose.

Me giré encontrando a Christian confundido—¡Te pudo haber golpeado!—me reclamó.

—pero no lo hizo—dije.

—aún así pudo haberte golpeado, no debiste ponerte frente a mi—miró a Miranda, la cogió del brazo, se acercó hasta la puerta sin soltar a la pequeña y ambos la cruzaron para irse también.

Miré a todos quienes me miraban expectantes gracias a lo que había sucedido, Liliana me salvó exclamando “¡Que siga la fiesta!” la música comenzó a escucharse nuevamente y todos siguieron bailando. Entré a la cocina seguida por Camile.

—ese chico te pudo haber golpeado—dijo con seriedad llegando hasta mi.

—pero no lo hizo.—¿Por qué insistían con eso?

—aún así.

—el no lo haría.—respondí segura.

—¿Por qué estas tan segura?—preguntó molesta.

—por que..—se que el no me haría daño—... No lo creo capaz.

Camile negó con la cabeza y Liliana entró—¿Estas bien?—asentí—lo siento, pensé que se comportaría, no pensé que fuera a pasar algo como esto, no debí decirle nada, es solo que creí que había cambiado.

—no pasa nada,—dije—todo esta bien y estoy segura de que no quiso actuar así.

No estaba molesta, más bien no sabía como me sentía, muchas cosas habían sucedido en tan solo un día.

Luego de aproximadamente dos horas todos comenzaron a irse, claro nada había vuelto a ser lo mismo desde el casi enfrentamiento entre Callan y Christian. Observé el techo y muchas cosas pasaban por mi cabeza. En especial el beso con Callan.

Algo dentro de mi me decía que el no me haría daño. Pero ya estaba tan acostumbrada a ser traicionada que ya no sabía si confiar o no.

***

Llegué al instituto encontrando a Liliana y Alan en la entrada muy empalagosamente abrazados. Caminé por su lado y me dirigí hacia el salón. Dejé la mochila sobre el asiento, me senté y me recargue en el pupitre deseando que el sueño no me invadiera.

Liliana entró sonriendo, se acercó a mi y me miró—¿Estas dormida?—levanté la cabeza y negué, dejó la mochila encima del pupitre para que ya no me recargara y se sentó junto a mi, el maestro y los demás alumnos entraron, segundos después Callan entró. Liliana se levantó, cogió su mochila y se fue hasta su lugar.

Callan se sentó a mi lado como siempre, intenté decirle algo pero la clase dió inicio, durante toda la hora se la pasó observando la pizarra y su cuaderno.

Durante todas las demás clases intenté hablar con Callan pero se la pasó evadiendome, se metía a lugares a los cuales yo no podía entrar. Liliana quedó de pasar la tarde con Layla, a pesar de que ella ya no fuera mi amiga no podía impedir que Liliana pasara tiempo con ella, así que quede con Camile para ir al cine.