19 No Me Conocen

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No me puede expulsar, tengo mis derechos ¡Exijo un abogado!

—¡No puede expulsarme por una pelea! ¡Entienda que ellas comenzaron!

—pero tu las golpeaste—exagerada.

—¿Y cuando ellas me golpearon a mi que? Solo les mando un citatorio, eso no es justo.

—pero tu ya hiciste muchas bromas en tan solo un mes.

—entonces también expulselas a ellas por haberme mojado. 

—¿De qué hablas?—¡Mierda! Soy una estúpida, ella se fue temprano ese día. 

Reí nerviosa y ella me miró con cara de pocos amigos.

***

— ¡Exijo una explicación ahora mismo!—exclamó molesta mirándonos a todos.

—si me lo permite, yo puedo explicarlo—intentó hablar la pelos de elote.

—si, no es lo que parece, bueno mas bien lo que esta—me señaló la otra asistonta con su mano derecha—le dijo.

—que quede claro que yo estaba suspendida—se defendió la zorra mayor.

—¿Nos va a suspender a todos los que participamos en esa guerra de agua?—preguntó una chica.

—¡Lo admiten! Hicieron una guerra de agua.

—Amanda y Nicole empezaron—no tengo idea de quién dijo eso pero todos asentimos.

La directora nos miró con enojo a todos, negó con la cabeza y salió del salón de clases dejándonos a todo confundidos sobre qué haría al respecto.

Luego de que las clases terminaran me dirigí a mi casillero, deje la mochila en el suelo, saque unos libros que necesitaría, cerré el casillero y pude ver a Liliana llegando hasta mi.

—¿Que es lo que te pasa?—preguntó confundida.

—no me pasa nada—estaba algo molesta con ella y Layla por no ayudarme o mínimo defenderme frente a la directora diciendo que yo no había comenzado, después de todo era verdad. Yo no había comenzado nada.

—¡Le arrancaste cabello a mi hermana!—exclamó frente a mi cara.

—¡Eran extensiones! Pero si las quiere de regreso se las doy—dije molesta. Aunque no tenía idea de donde rayos sacaría extensiones.

Layla se acercó hasta nosotras—¿Por qué demonios gritan?

—Liliana me viene a gritar que le arranque "cabello" a su hermana cuando en realidad solo le arranque las estúpidas extensiones.—estaba muy molesta.

—es que no logro entender por que lo hiciste—dijó aún confundida y algo molesta.

—si...—Layla hablo está vez—te pasaste un poco.

—no me iba a dejar—respondí.

—no puedes agredir a las personas solo por que imaginas que te molestan—dijo Liliana.

—¿Acaso crees que imaginé que ellas me molestaron? Que bueno que somos amigas—hablé irónicamente—¡Me da gusto saber que me consideran una loca!

—¿Que te esta pasando?—preguntó Layla—Esta no es la Yamileth que conocimos.

—tienen razón—cogí la mochila y la coloqué sobre mis hombros—quizás no me conocen realmente.

Pase por su lado y comencé a caminar dejándolas allí, escuché como algunos alumnos murmuraban cosas pero no preste atención y seguí con mi camino. Tenía en mente ir hacia el parque y así lo hice, al llegar me senté en el pasto, me coloqué los audífonos y comencé a escuchar Thank You de simple plan.

Luego de un buen rato de estar en el parque escuchando música y ver a los niños corriendo decidí ir a casa, una parte dentro de mi me decía que no fuera. No se por que pero hice caso de no ir y seguí caminando por el parque. El viento comenzó a aparecer, comencé a tener un poco de frío pero seguí caminando teniendo la mirada perdida hasta que choque con alguien

Por favor que no sea quien creo que es.—lo siento— levanté la mirada encontrándome con Jason.

—¿Podemos hablar?—¿Ahora el me sigue?

—no quiero hablar contigo—me limité a responder.

—por favor, dejame explicarte lo que pasó.

—no quiero que me expliques nada.

—por favor—pidió—dame solo cinco minutos.

—dije que no, no me interesa saber lo que pasó. Yo los ví... Y para mi fue suficiente explicación.

—no es lo que parecía, ella...—nisiquiera lo deje terminar de hablar, rápidamente lo interrumpí.

—¡No Jason! ¡No me interesa saber lo que en realidad pasó! Yo se perfectamente lo que vi, creí que eras diferente pero veo que me equivoqué, hazme un favor y alejate de mi.

—¿Estas tratando de decir que...?

—¡Que no te quiero volver a ver nunca mas en mi vida!—exclamé molesta.

Hey Quitate Enana Where stories live. Discover now