Hey Quitate Enana

42 No Me Gusta Ryder

¿Por que no?

—claro.

Me despedí de el y me fuí a casa. Me encerré en mi habitación, realicé las tareas que tenía pendientes y el sueño no tardó mucho en apoderarse de mi.

»Mis ojos estaban cristalizados. Cada lágrima que recorría mi mejilla era el suficiente dolor. Sus ojos comenzaron a cerrarse lentamente hasta cerrarse por completo. Ya no podía mas. Lo estaba perdiendo todo.

***

Caminaba hacia el instituto mientras escuchaba música a todo volumen, me quite los audífonos en cuanto llegué y lo primero que pude ver fue a Callan besando a una pelinegra plana y sin chiste, la rubia de la cafetería de la vez anterior llevo hasta ellos, de la nada comenzaron a discutir, la castaña se alejó dejándolos a ellos seguir.

Respiré profundamente. Ya no me sorprendía ver a Callan besándose con cualquier chica, después de todo el ya se había besado a medio instituto.

Liliana apareció en esos instantes frente a mi, saludo y nos fuimos hasta el salón, nos sentamos en nuestros respectivos lugares, Callan llegó luego de algunos minutos y se sentó junto a mi sin decir nada.

¿Enserio? ¿Ni una disculpa por lo de la fiesta?1

.

***

Las clases terminaron. Fui a casa y dejé mis cosas, había quedado con Liliana para ir al centro comercial, al llegar Liliana me esperaba, fuimos a una pequeña cafetería que había allí, no conversamos mucho, solo fuimos por las bebidas que realmente eran deliciosas.

Estuvimos caminando por el centro comercial mientras hablábamos de tonterías Un mucho sentido, entramos a una tienda de ropa y Liliana se metió a los probadores con muchas prendas, me senté en una banca para esperarla ya que supuse que tardaría mucho y no me equivoqué. Miraba detenidamente la puerta del probador al que Liliana había entrado y rápidamente vinieron a mi mente algunos recuerdos.

»Me terminé de colocar el vestido azul pastel que mi padre me había comprado para mi fiesta de cumpleaños. Me miré en el espejo y sonreí. Era feliz. A pesar de todo yo era feliz.

Baje corriendo esperando ver a todos mis "amigos" pero no había nadie, pensé que tal vez esa muy temprano y llegarían más tarde por lo que decidí esperar, pero pasadas las horas nadie llegó. Mi cumpleaños número diez la pase sola. Lloré toda la tarde.

Al siguiente día cuando llegué a la escuela, me dirigí a mis "amigos" para preguntarles que había pasado y por qué no habían asistido a mi fiesta.

—tu tía nos dijo que asesinaste a tu mamá—dijo uno de ellos—y no queremos arriesgarnos«

Desde ese día no quise volver a celebrar mi cumpleaños, aunque también el hecho de que cuando yo cumplía un año más de vida mi madre cumplía uno más de haber fallecido.

Lo que me tenía de nervios era que esa fecha se acercaba.

—Yamileth, Yamileth, Yamileth—salí de mis pensamientos y ví a Liliana frente a mi.—¿Estas bien?

—si. ¿Por que no debería de estarlo?

—te quedaste callada por unos minutos y tengo diciéndote que te pruebes esta blusa pero no me haces caso. Y tus ojos están...—me limpié inmediatamente los ojos y las mejillas.

Cogí la blusa y la observé. Era una blusa blanca de encaje que llegaba por encima del ombligo, entré al probador, me la coloqué y salí para que Liliana me viera, ella sonrió y me dijo que estaba genial, regresé al probador y me la quité, me volví a colocar la blusa que traía puesta, salí y le entregué el top.

Liliana compró muchas blusas, la esperé afuera mientras pagaba, al salir me entregó una bolsa en la que venia la blusa blanca que me acababa de probar.

—gracias, pero no debiste—dije volviendo a guardar la blusa en la bolsa.

—no es nada, además se te veía genial.—sonrió—esa blusa estaba destinada para ti.

Seguimos caminando hasta encontrarnos con Ryder y Layla quienes venían conversando y sonriendo muy amistosamente, me di media vuelta, Liliana me cogió del brazo y me llevó hasta donde estaban ellos. Layla sonrió al ver a Liliana, me vió a mi y su sonrisa se esfumó, miró a Ryder y deposito un beso en sus labios.

—Hacen una linda pareja—dijo Liliana emocionada.

—así es—Ryder me miró, le susurró algo a Layla y dió media vuelta para alejarse, la peli-morada me miró—nosotros si hacemos una linda pareja, digo espero que no te moleste Yamileth—la miré confundí. ¿A que se refería?—yo se que te gusta Ryder pero el ahora es mi novio.

¿¡Que!? ¿Que dijo? ¿Gustarme Ryder? ¡Esta loca! 

—¿Así que de esto se trataba todo?—no dijo nada—es una idiotez la tuya el dejar de hablarme y llamarme "mala amiga" por creer que me gustaba Ryder. ¡A mi no me gusta Ryder!—en ese momento Ryder regresó hasta donde estábamos—no puedo creerlo, me dijiste todas esas cosas solo por que creías eso.—negué con la cabeza—Creo que la única mala amiga aquí eres tu.—un chico pasaba con una malteada de chocolate, sin decir nada se la arrebate y la tiré encima de Layla—ahora si tienes razón, soy una mala amiga pero no peor que tu.