La marcha

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La chica entrecerró los ojos y lo observó con total intriga, curiosa pero también desconfiada, no de Regulus, del cuarto, de que fuera algo tan terrorífico o algo tan extraño que no quisiera mostrarlo, bueno, lo entendía pero eso no le quitaría es sensación, por eso mantenían fija la mirada, el uno con el otro, con suma seriedad sin ceder ante el otro

—Uhmm... —murmuró bajando la mirada y cambiándola a la chimenea pensativa pero algo bajoneada, como si dentro suyo quisiera escuchar lo que había pero a la vez no, teniendo que fuese algo muy malo aunque no lo veía así, él no tendría algo horroroso en una de las habitaciones, ese no era el Regulus que conocía pero en caso existiera un pequeño y mínimo porcentaje de...
—Mentira —intervino Regulus con tranquilidad y despreocupación, sin tomarse nada en serio— es solo un cuarto y ya, fue para poner drama —reveló y Lia se giró para verlo, algo indignada

Por lo menos confirmaba que no existía ese pequeño y mínimo porcentaje de que guardara algo horroroso dentro de esa habitación.

—Guardo cosas importantes ahí, por eso es el único cuarto que está protegido aunque la cabaña lo está así que está aún más protegido ¿Quieres verlo? —le preguntó y ella alzó las cejas intrigada pero después de lo que había ocurrido...—No... quizás lu... —de no ser por el aparente "quizás luego" Regulus habría creído que era porque no le interesaba, pero en cuanto capto el porqué supo que podía usar su primera suposición a favor suyo—Tranquila, entiendo, si no te importa... —comentó con cierto dramatismo y la chica intuyó aquello pero dentro de todo si sintió que sus palabras no habían sido las indicadas por lo que había funcionado —No, si me... me importa, solo..., ¡ah! —frunció el seño y lo empujó observando la sonrisa de triunfo en Regulus, que claramente no había ocultado para que viera que había caído

El chico sonrió ante el empujón y se levantó agarrando las manos de la chica y tirando de ella "Vamos" fue lo que exclamó para luego llevarla hacia la segunda estancia. El chico la miro en cuanto estuvieron delante de la puerta, miro tanto a Lia como a la puerta con un leve suspiro sin saber si entrar o no pero no era por Lia, por ella subía, frenaba por él, por los recuerdos de la habitación, esos recuerdos que volverían de uno a uno en su mente y no sabía si quería cada uno en su corazón, por eso estaban en un cuarto aparte, cerrados por su protección, seguridad, pero también para evitarlos.

—Está bien si no entramos... —la chica sostuvo la mano de Regulus con más fuerza notando en él una mirada fija en la puerta, sonrio suavemente para que entendiera que estaba bien si no entraban o algo así, pero este no dio un paso atrás—No es por ti —aclaró por si acaso ella pensaba que no quería entrar por tener su compañía— es...—Esta bien —volvió a decir con comprensión y esté la miro fijamente sin expresiones como tratando de comprender cómo podía decir algo y ya, tenía todo con eso

Pestañeo para poder quitar la mirada de la chica y después de eso ya no quería volver, se puso nervioso, nervioso de tener que explicar aquella mirada y no a ella seguro no se lo pediría respetaba mucho sus propios pensamientos, como se explicaría a él aquello, aún no podía ver que el amor podía llevar de la mano la admiración entre tantas cosas y que todas ellas la sentía por ella. Trago en seco y abrió la puerta observando el lugar y luego a Lia que miro todo con un encanto inigualable, los ojos iluminados observando todo.

—Tienes otro... —dijo encantada rozando con los dedos el piano negro que había visto en una esquina

Había una gran ventana diferente a todas las otras, la del cuarto con seguro era circular cosa que había dejado encantada a Lia. En cuanto dirigió su vista a la esquina derecha de la habitación recordó el piano inmenso de la casa Black, ahora entendía quien le daba el mayor uso, era de sus cosas favoritas de la casa y Regulus tenía un piano negro no igual de inmenso que el de la casa Black pero era similar, una parte de su hogar en su cabaña, le resultaba muy dulce.

Inefable - SerendipiaWhere stories live. Discover now