Inefable - Serendipia

Miedo y logro

Solo la mitad de las golosinas había sobrevivido a dicha huida espontánea, todas rescatadas por Regulus que hizo lo que pudo para rescatarlas siendo su prioridad la chica que había disparado una bombarda o algo así contra un tacho de basura. Ni bien habían llegado Regulus rió aunque fue el único que estaba divertido pues Lia aún seguía nerviosa por aquel hechizo involuntario.

—No te rías —dijo Lia aún ansiosa, Regulus bajo la mirada para reprimir sus risas mientras la chica iba hacia la ventana

Apago la luz antes de aquello, adentro aún había un poco de luz debido a la iluminación del cartel del Motel que venía desde afuera, aún así Lia no quería que notaran que ellos seguían despiertos y menos que al acercarse se viera su figura debido a la luz, por eso se acercó a la ventana cuando apagó la luz, se apoyó a un lado viendo apenas por un milímetro de ventana, observando al señor de la recepción mirando a todos lados mientras con clara confusión veía el bote de basura destrozado.

—Se que te ríes —dijo Lia que empujó el hombro de Regulus al volver hasta la cama donde esté seguía sentado mirando al piso disimulando su risa
—¿Por qué hiciste eso? —preguntó con el tono de voz que indicaba que seguía divertido con lo que había ocurrido
—Porque el basurero me miró mal —respondió Lia con sarcasmo mientras volvía a la ventana, observando como el recepcionista limpiaba los restos de basura que habían quedado— pobre... —susurró sintiéndose culpable, se sentó en la cama de lado de la ventana y cayó sobre esta con tristeza
—¿Quieres ayudarlo? —preguntó mirando a la chica que tenía su vista en el techo— eso te pondría en evidencia pero... podría ayudarte
—Uhm... —susurro con un suspiro profundamente apenada
—Puedes echarme la culpa —sugirió a lo que Lia le sonrió, moviendo la cabeza negándose a aquello— no es que me afecte, los muggles no me interesan
—Lo se... —susurró sabiendo que aún así no lo culparía, y tampoco se daría en evidencia, lo sentía profundamente pero lo que menos quería eran problemas

Regulus sonrió mirando a la chica que seguía con la vista en el techo, aún la podía ver, más aún porque ella estaba a la luz directa de la ventana, sin querer pensar más en lo que hacía se tiró, aún en su dirección de ver hacia la puerta, por lo que estaba del lado contrario pero con el cuerpo en la misma dirección, viendo el perfil del otro.

—¿Puedo preguntarte algo? —habló Regulus que miraba el techo como la chica solo que al hacer la pregunta se rascó los labios sin fuerza solo por los nervios en dicha pregunta
—Sí... —aceptó Lia girando su rostro para verlo, a la altura de sus ojos estaba su boca y a la altura de su mentón sus ojos, por lo cual veía como sus labios se movían para formular su pregunta— ¿Si realmente me miró mal el basurero? —preguntó haciéndolo reír
—No... —negó sonriendo girando su cabeza al lado contrario de Lia pues no quería sonreír más— es sobre... la... tesomancia
—¿Por tu cruz? ¿Te dio miedo? —preguntó sonriendo con un poco de burla
—No... bueno... eh... ¿Ya te han leído el té alguna vez? —preguntó siendo esta su verdadera pregunta, por lo que la chica volvió a mirar al techo para recordar las clases con Trelawney
—Creo que sí —respondió aún pensativa
—¿Y... qué pasó? —preguntó girándose para verla con el ceño fruncido con total intriga y atención
—Ah... por lo que recuerdo... creo que Trelawney, mi maestra, vio algo malo en mi taza, aunque ella era un poco muy fatalista
—¿Qué vio? —preguntó con rapidez sin siquiera dejarla continuar
—Ah... había una serpiente y un león, por lo recuerdo, aunque dijeron que la serpiente era más como una marca tenebrosa, como la que tienes en tu brazo —comentó sonriendo pero este aún tenía el ceño fruncido sin estar nada tranquilo con la respuesta
—¿Por qué la marca?
—Ah, fue porque vieron una calavera —respondió despreocupada, contrario a Regulus que sintió un gran golpe interno retumbar en todo su ser, sabiendo que alguna coincidencia no podía ser, tomando una gran bocanada de aire por el mensaje abrupto que llegaba a él— quizás fue por lo de Rabastan, eso fue muy peligroso, pero bueno ya pasó, no es tan grave lo que diga eso y... no te preocupes por tu cruz, quizás era por la señora religiosa