Inefable - Serendipia

Gomitas

Lia terminó con su dibujo al anochecer y fue ahí cuando decidieron entrar a la tienda de campaña, la mariposa se posó en el hombro de Regulus y como ninguno tenía problema con su compañía decidieron darle cobijo. Lia no se acercaba mucho a esta temiendo asustarla o molestarla, prefirió tomar su distancia aunque cuando tomo su té mañanero la mariposa se le acerco.

—Es extraño ver una en invierno —susurro dejando a la mariposa posada en su taza— tienes alitas muy lindas —agregó hablando con la mariposa que volvió a volar muy tranquila

Lia levantó su mano mostrándole un dedo, con paciencia espero a que se acercara aunque se cansaba con facilidad pues su brazo no era ningún brazo entrenado, antes que se rindiera la mariposa se posó en su dedo haciendo que la chica sonriera.

—Hace frío pero ya no hay nieve —informó Regulus entrando a la tienda de acampar— hay rayos de luz, supongo que le hará bien —agregó observando a la mariposa que volaba en círculos por la entrada de la tienda, la entrada/salida no estaba cerrada pero se quedó unos segundos ahí para luego salir
—Por si se va —Lia se levantó y salió con ademán de verla por última vez si es que se iba

Tal cual Regulus había dicho, afuera no había nieve, apenas caían unos copos de nieve que desaparecían al poco tiempo pero nada comparado con lagos congelados o lugares con metros de nieve, era invierno y el frío aún se hacía presente y era seguro que pronto todo volvería a llenarse de nieve pero por ahora, como la mariposa, disfrutarían de los pequeños rayos de sol que claro no daban calor pero iluminaban el lugar haciéndolo muy cálido. Lia se sentó sobre sus talones en el pasto menos verde que jamás había visto, observo a la mariposa feliz mientras Regulus se sentaba al otro lado mirando más a lo lejano como investigando o analizando el lugar, más de lo que ya lo había analizado.

—Hmm —Lia apretó los labios pasando su vista de Regulus a el lugar donde veía él. Pasó su vista a un tercer lugar después de pensar algo, en cuanto abrió su bolso buscó un paquete que encontró casi de inmediato— La marca —dijo con una leve sonrisa, le mostraba a Regulus su brazo izquierdo el cual tenía una marca tenebrosa de gomita

Regulus analizó su brazo por unos segundos mientras ella ocultaba lentamente su acción, su mirada juzgante volvió cuando pasó la vista a Lia quien apretó los labios avergonzada, con rapidez agarró la gomita y se la comió, observando el lugar como si apenas lo viera. Lia dirigió su vista al piso pues la gomita que estaba comiendo no estaba exactamente dulce sí no ácida, muy ácida, no de las ricas si no de las que son hechas por los Weasley.

—Están horribles —murmuro pensando en los gemelos con odio, había probado unas anteriormente y le habían encantado pero no todo podía ser perfecto si se trataba de ese par

Regulus la observo confundido pues no había entendido lo que Lia había dicho, ella lo miro por unos segundos y se dio cuenta de las palabras que había murmuro, más nerviosa aún alzo la bolsita de las gomitas y se lo mostró como justificando sus palabras. Él tomó la bolsita algo extrañado pensando que se lo entregaba, pero fue más raro aun cuando Lia negó al momento que sacaba una.

—No están... —trato de frenarlo pero él ya se había comido la gomita y no había parecido desagradarle. Le había tocado una buena como a ella hace tiempo.
—¿Quien tiene tantas ganas de morir? —preguntó él alzando la bolsita de gomitas
—Los... ah... —Lia observo todo con confusión, aún seguía consternada con la gomita mala que le había tocado y la suerte de Regulus con su favorable gomita— Weasley's —continuó con rapidez para no confundirse más
—Están buenas —confesó él sacando otra gomita y Lia volvió a mirarlo consternada— ¿Que Weasley's? —pregunto volviendo al tema
—Ah...
—Hay varios, por lo menos hasta donde...
—Sí, sí hay... varios.... —susurro confundida aún con la vista en la bolsita de gomitas— ah... hay... ¿Quieres que te cuente sobre la nueva orden? Eso te pondría más al corriente —comentó agarrando una gomita, esta vez sabía muchísimo mejor