Amor Clandestino | Camren

Capítulo 23

Chris hablo sobre como Brad apareció en la casa de su padre en busca de Morgan para reclamar sus derechos. El padre de Lauren lo corrió y le exigió que no volviera a aparecer pero el amenazo con volver y días después llego con una carta del juzgado en donde Lauren debía aparecerse, Brad iba a luchar por la patria potestad de su hija.

— ¡Esto debe ser una jodida broma! ¡¿Cómo se atreve a aparecerse después de años y querer quitarme a mi hija?! — Lauren realmente estaba enojada, nunca la había visto de esa forma.

—Debes tranquilizarte. — Le pedí. — Él no puede quitarte a Morgan, eres su madre. —Voltee hacia donde Chris. — No puede ¿cierto? — Chris se encogió de hombros.

—Tienes que presentarte en el juzgado, las cosas están a tu favor, tienes todo por ganar.

— ¡No dejare Miami e ir a Europa para un maldito juzgado!

—Mami ¿Por qué gritas? — Apareció Morgan abrazando su jirafa haciendo un mohín.

—Por nada cariño, ven aquí. — Lauren se acercó a su hija y la cargo entre sus brazos. — Vamos a tu habitación.

Lauren se llevó a Morgan dejándome a solas con Chris. Tuvimos un silencio incomodo, antes de ser novios fuimos amigos, después dejamos de serlo y no tuvimos contacto. Chris no se suicidó como lo hizo Harry, así que creo que él no la pasó tan mal.

—Lauren y tu... — Comenzó a decir Chris. — ¿Qué son?

—Um, ella es mi novia. — Chris arqueo ambas cejas.

—No creí que lo serían tan rápido.

— ¿Tu lo sabías? — Chris asintió con la cabeza.

—Lauren me lo conto, le fue muy difícil hacerlo, creyó que la odiaría por quitarme a mi novia.

— ¿Y no fue así? — El negó suavemente la cabeza con una sonrisa.

—Me salvo la vida, gracias a ella estoy aquí, y es mi hermana, no podría odiar a mi hermana, no cuando siempre quise tener una.

— ¿Y a mí me odias? — Pregunte en voz baja, pero aun así logro escuchar. Chris soltó una pequeña carcajada.

—Haces muchas preguntas. —Se acercó hacia el muro de la pared y se recargo en ella cruzándose de brazos. — Creo que al principio sentía coraje, pero después recordé aquel día en que terminaste conmigo. La habíamos pasado muy bien, me dijiste que era un chico increíble pero que estabas confundida y no querías hacerme daño, dijiste que merecía que alguien me amara de la misma forma en la que yo amara. Bueno y después no sé qué paso porque desperté en el hospital.

—Y... ¿ahora estas saliendo con alguien?

—He salido con un par de chicas, pero nada formal. ¿Qué tal va todo con Lauren?

Me resultaba extraño hablar sobre Lauren a mi ex novio y ahora cuñado, pero tendría que acostumbrarme a que no sería la última vez que me preguntara algo parecido.

—Bueno, ella es magnífica. Me siento bien cuando está conmigo, creo que todo es más sencillo ahora que hace años, aunque... — Solté una bocanada de aire antes de seguir hablando.— No creo que a mi padre le agrada mucho la idea de que salga con una chica y menos con Lauren.

— ¿Aun no lo sabe? — Pregunto un poco sorprendido separándose de la pared y dando unos pequeños pasos hacia mí. Negué con la cabeza ante su pregunta.

—Mi padre me matara.

—Alejandro no parece ser un hombre homofóbico. — Él tenía razón, mi padre nunca había mostrado alguna actitud homofóbica, creo que respetaba a esa parte de la sociedad, pero es muy diferente cuando tu hija te dice que le gustan las mujeres.