Capítulo 7

552 54 9
                                    

Había pasado un mes y las cosas con Camila habían cambiado. Definitivamente sentía algo por ella. Ella no era más la hermana de mi novio, ni siquiera era una amiga, era más que eso. Lo era todo, sin ni siquiera serlo nada. Comenzamos a tener una extraña relación, a escondidas, claro. Camila salía de la escuela y se dirigía a mi nuevo departamento, era el único lugar en donde podíamos ser libres sin temor a que alguien nos viera. Cuando iba a su casa, fingíamos no ser nada, incluso a veces pretendíamos odiarnos o simplemente nos ignorábamos como solíamos hacerlo antes.

Sé que debería hablar con Harry, pero no puedo simplemente llegar con él y decirle: "Hola, me gusta tu hermana." Es más difícil que eso. Algún día hablare con él y le diré la verdad.

Mire la hora en mi celular, eran las 3:15 de la tarde a esta hora Camila ya debería estar aquí. Suele salir de la escuela a las 2:45pm y dirigirse a mi departamento.

Después de un par de minutos, escuche el timbre de la puerta. Sonreí con el simple hecho de pensar que podría tratarse de ella. Arregle un poco mi cabello y abrí la puerta. Era ella, ocultaba una de sus manos en su espalda.

—Tardaste.

—Sí, pero tarde por una razón. – Apareció un par de orquídeas de la mano que ocultaba y me las entrego. – Cuando las vi pensé en ti.

—Son lindas, me encantan, gracias. – Le dije con una tonta sonrisa. — ¿Quieres pasar?

—No en realidad esperaba permanecer aquí afuera. – Hizo una pequeña pausa y rio un poco. — Si, si quiero pasar.

Esbocé una sonrisa ante su comentario, después él tome de la mano para que entrara y cerré la puerta. Al estar dentro me tomo de la cintura y me giro un poco, recargándome hacia la puerta.

—Camila...

—Shh... — Coloco su dedo sobre mis labios y enseguida se acercó comenzando a besarme. Inmediatamente cerré los ojos al mismo tiempo que correspondía su beso.

—Camila.... – Dije mientras intentaba separarme un poco de sus labios, pero ella me lo hacía imposible.

—Camila... — Dije una vez más. Ella se separó.

—Lauren, cállate o juro que te mato a besos.

— Tengo que ponerlas en agua. – Le mostré las orquídeas que aún permanecían en mi mano. Camila hizo una pequeña mueca y rodeo los ojos.

—Creo que no fue buena idea comprártelas.

—Claro que lo fue, son muy lindas. – Camine hacia la pequeña cocina y tome un jarrón. Abrí la llave para poder llenarlo con agua. – Ahora siempre que las vea me acordare de ti. – Camila sonrió.

— ¿Dónde las pondrás?

Camine hasta mi habitación, ella me seguía.

—Creo que a un lado de mi cama. – Las coloque en una mesita de noche. – Sera como despertar y verte a mi lado.

Le mostré una pequeña sonrisa, me senté sobre la cama y extendí una mano para que la tomara y así poder acercarla a mí. Ella la tomo y la senté sobre mis piernas mientras dejaba un pequeño beso en sus labios.

— ¿Crees que algún día pueda amanecer a tu lado? – Me pregunto mientras me miraba a los ojos. No supe responder, en lugar de eso comencé a besarla tiernamente. A los pocos segundos aparto sus labios de los míos.

— ¿Qué sucede? – Le pregunte.

— ¿Cuánto tiempo estaremos escondiéndonos? Me gustaría poder salir contigo sin temor a que alguien nos vea. Hay muchos lugares a los que quiero llevarte.... ¿Sabes? Creo que hoy terminare con Chris.

Amor Clandestino | CamrenWhere stories live. Discover now