Amor Clandestino | Camren

Capítulo 20

Lauren había quedado inmóvil. Por más que tratara de separar a Anne, ella no se movía, quería golpearla. Nunca la había visto así. Tenía una mirada que me aterraba.

— ¡Ya basta! — Le grite al ver que no soltaba a Lauren. — ¡Ella no hizo nada!

— ¡Por su culpa mi hijo está muerto! — Grito furiosa soltando un par de lágrimas. — ¡Tu más que nadie lo sabe!

Dinah llego rápidamente y me ayudo a tomar a Anne de los brazos para separarla de Lauren.

Lauren seguía sin moverse, se encontraba ida. Comencé a hacerme una idea del cómo se sentía. Ella quería a Harry y escuchar que su madre la culpaba por su muerte probablemente la devastaba.

—Hey, tranquila, tú no tienes la culpa de nada. — Coloque mis manos en sus mejillas guiando su mirada en la mía. Lauren tenía los ojos cristalinos, estaba reprimiendo el llanto.

—Es mejor que te vayas de aquí. —Le pidió Dinah a Anne, quien estaba sosteniéndola para que no se acercara de nuevo a Lauren.

— ¡¿Cómo es posible que la defiendan?! ¡Ella ha matado a mi hijo!

— ¡Ella no ha hecho nada! —Grite soltando a Lauren y acercándome a mi madrasta. — No vuelvas a decir que ella tuvo algo que ver ¡Fue Harry quien decidió matarse! — Anne me dio una gran bofetada provocando que girara un poco mi cabeza. Coloque mi mano sobre mi mejilla y voltee la cabeza de vuelta hacia ella. — Largo.

—Le diré a tu padre que eres una asquerosa lesbiana y que te has besado con esa cosa. — Señalo a Lauren con asco. — Estoy segura que no permitirá que pongas un pie en nuestra casa.

—Largo. — Volví a decir manteniéndome firme tratando de no perder el control.

Ella se soltó de Dinah bruscamente y comenzó a caminar lejos sin dejar de lanzarle miradas amenazadoras a Lauren.

Regrese hacia Lauren y tome sus manos con las mías. Su labio inferior estaba temblando y no podía mantener su mirada en mí.

— ¿P-por qué ha dicho que lo mate? — Pregunto Lauren tartamudeando un poco.

—Tú no lo has matado. ¡Mierda! Tú ni siquiera estabas aquí.

— ¿Qué fue lo que paso? — Me pregunto.

—Lauren, por favor, no importa ya.

— ¡Joder Camila! ¿Cómo puedes decir eso? Tú haz visto lo que paso ¡ella me ha culpado de la muerte de su hijo! — Grito derramando un par de lágrimas.

—Hey, no llores. — Seque una lágrima que resbalaba por su mejilla con la yema de mi dedo.

—Q-quiero que me cuentes lo que ha pasado.

—Está bien, te contare. Pero por favor cariño, no llores. —Envolví a Lauren en mis brazos y le di un fuerte abrazo.

Estuvimos así durante unos momentos, después me separe de ella para decirle a Dinah que me llevaría a Lauren. Le pedí que cuidara a Morgan y ella no se negó, me dijo que ella y las chicas la llevarían al centro comercial.

Deseaba tanto que Morgan no haya presenciado la escena de hace un rato.

Maneje el auto de Lauren, Dinah se llevaría mi auto y Lauren no estaba en condiciones para manejar el suyo.

Maneje durante unos minutos, no me aleje mucho en realidad, aparque el auto en frente de un parque y salimos de el para dirigimos a una banca cerca de un enorme árbol.

— ¿Por qué ha dicho que lo mate? — Pregunto Lauren ya estando más tranquila.

—No lo has matado, Lauren.

—Vale... ¿Pero porque ella piensa que si?

Suspire profundamente, era tiempo de hablar...

—Harry se suicidó, o eso es lo que creen... Semanas después de que te fuiste, el cambio. Comenzó a tomar alcohol a diario, al principio llegaba a casa en estado de ebriedad, después ya ni siquiera llegaba a casa. Se descuidó un poco, se dejó crecer el cabello y también comenzó a drogarse. Tenía malas amistades. No hablaba con nadie de nosotros, pero un día, ese día, llego a casa llorando, solo nos encontrábamos los dos, Anne y mi padre habían salido a una cena. El me hizo una pregunta: ¿Cómo alguien puede seguir viviendo cuando quien es tu vida ya no está contigo? No supe que responder, porque yo también estaba devastada pero yo mantenía la esperanza de que regresaras.

Lauren comenzó a llorar en silencio, tome su mano y le di un pequeño apretón.

— ¿Q-que paso después?

—Él salió de casa y no lo detuve... — Hablar de eso me era difícil pues en cierta manera me sentía culpable de lo que paso. — Nunca imagine que nunca lo volvería a ver, él se lanzó de un precipicio.

—Es mi culpa Camz. Por mi culpa él está muerto. — Dijo soltando en llanto. Rodee mi brazo en su cintura para poder abrazarla de lado.

—No Lauren, él fue quien tomo sus decisiones.

—Pero yo fui quien le provoco que tomara esas decisiones.

—No. — Tome su mentón y gire un poco su cabeza hacia mí. — Escúchame muy bien, tú no tienes nada que ver con lo que le paso.

—Pero es mi culpa, Anne tiene razón.

— ¿Anne? Ella solo quiere culpar a alguien, quiere darle nombre a la razón por la que su hijo hizo lo que hizo.

—Yo no quería que Harry muriera, yo solo quería hacer lo correcto. No podía seguir con él cuando te quería a ti.

En otras circunstancias hubiera sonreído al escuchar eso.

Lauren no paraba de llorar, y me partía el alma verla sufrir.

—Espero que me sigas queriendo. —Hable, para cambiar un poco el tema de conversación.

Lauren sonrió un poco y limpio sus lágrimas con la manga de su ropa.

—Nunca deje de hacerlo, pero con lo que paso, tus padres nunca aprobaran nuestra relación.

— ¿Y quién dijo que quiero que la aprueben? De la única persona de la que necesitamos aprobación, es de tu hija.

—A ella le agradas.

— ¿Cómo crees que actué cuando le diga que eres mi novia?

Lauren se encogió de hombros.

—Yo... no lo sé, en verdad le agradas mucho, creo que se pondría muy feliz, pero supongo que lo sabremos cuando llegue el momento.

—Creo que no me entendiste... —Me levante de la banca y me coloque frente a ella tomando sus manos. —Te quiero, Lauren, quiero que seas mi novia.

Lauren puso los ojos como platos, aun se encontraban un poco cristalinos, pero el llanto ya había pasado. Se quedó sin decir nada durante un momento, cosa que no me agradaba para nada.

—Yo creí que tu querías... — Dije al ver que seguía sin decir alguna palabra.

— ¡Claro que quiero Camz! Es solo que siempre creí que sería yo quien lo propusiera.

—Pues tú puedes ser la que proponga matrimonio. — Ella soltó una gran carcajada y se levantó para besarme tiernamente en los labios.

— ¿Esto qué significa? — Pregunte al separarme un poco de sus labios y mirarla a los ojos con una sonrisa.

—Que eres mi novia.