[2] Transmigración: criar al hijo del jefe principal masculino

Capítulo 216- Recuperar lo perdido (2)

Incluso si lo supieran, aún podría fingir no saber nada. El salón de belleza no estaba a su nombre. ¡Esas propiedades inmobiliarias, podría decir que su madre se las compró! ¿¡Qué prueba tenían !?

Yu Xinjie pensó en esto y calmó su respiración.

¡Sorprendentemente, Yu Yaoyao se echó a reír! "¿Malentendido? ¿Cómo es que incluso guardé las grabaciones de sonido, quieres escucharlas? preguntó inocentemente, con el pretexto de querer aclarar las cosas con su hermana, pero solo estaba apretando su agarre sobre ella.

El rostro de Yu Xinjie palideció instantáneamente, ante esto, Yu Yaoyao se acercó y preguntó en voz baja.

"¿A dónde se fue el dinero, cuándo los tomó prestado, las transacciones fueron a través de qué bancos y a qué cuentas ... Lo recordé todo muy claramente, hermana, quiere echar un vistazo?"

Empujó el cuaderno hacia Yu Xinjie.

¡Yu Xinjie solo echó un vistazo y sintió que su cerebro explotaba! ¡¿Entonces Yu Yaoyao se había estado haciendo el tonto frente a ella todo este tiempo ?!

En el cuaderno, todas las cantidades estaban escritas claramente, algunas de ellas ni siquiera recordaba, ¡pero ahora todos los registros se lo recordaban!

¿Hizo grabaciones de sonido?

Yu Xinjie de repente se sintió aterrorizada y sintió sudor frío en la espalda. Miró la cara aparentemente inofensiva, inocente, pura y bonita de Yu Yaoyao, y no pudo evitar respirar profundamente. Sostuvo el cuaderno con fuerza y ​​no lo soltó.

¿Qué había salido mal, que Yu Yaoyao de repente se volvió tan astuto?

"Hermana, lo retiraré y le preguntaré a mamá". Incluso sus dedos temblaban ahora. Yu Yaoyao se rió inocentemente.

"Adelante, solo tómalo, los tengo todos en mi cabeza de todos modos", aseguró.

No le importaba si fuera antes, cuando su rico esposo todavía tenía todo el dinero, sería inapropiado que ella recuperara el dinero que el dueño original del cuerpo le había regalado.

Pero la situación era diferente ahora, ¡millones de dólares pueden comprar tantos filetes y langostas para su bebé! Ella pensó vertiginosamente.

"Je, hermana, sabes cómo bromear ..."

"No, nunca bromeo", Yu Yaoyao sonrió y le dio unas palmaditas en los brazos, "Hay una cosa que me importa ..." Dijo y miró a Yu Xinjie con fiera frialdad. "Quienquiera que se lleve mis cosas, yo las devolveré", dijo con claridad y amenazante, "¡Quienquiera que haya robado mi comida, dejaré que lo escupan!".

Mientras hablaba con una sonrisa en su rostro y una voz tierna como de algodón, los ojos feroces como bestias sobresaltaron la mano con la que Yu Xinjie sostenía el cuaderno.

"Hermana ... volveré y ... preguntaré". Yu Xinjie casi saltó de la silla.

Tenía tanta prisa por irse que casi derriba la silla del comedor que estaba junto a ella.

"Vaya, esta silla es muy cara, creo que está hecha de caoba, unos 2 mil dólares. ¿Es así, cariño? Yu Yaoyao se volvió hacia su esposo y le preguntó inocentemente.

¡Pero Yu Xinjie de repente sintió que era el objetivo de una bestia en el bosque!

"¡Hermana, me voy ahora! ¡Descansa temprano! " ella casi gritó. Movió la silla a un lado y se apresuró a irse, pero un tenedor apareció inesperadamente frente a sus brazos.

Ella miró hacia arriba y vio el hermoso rostro pequeño de Yu Yaoyao, con frialdad brillando en sus ojos.

"¿Solo te vemos una vez de vez en cuando, y te vas así con las manos vacías?"

Yu Xinjie se estaba mareando y rápidamente pensó en una excusa ...

"Yo ... traje una muy buena botella de vino añejo conmigo ... para mi hermano ... cuñado".

Había pasado por todas las dificultades por esta buena botella de vino. Fue un vino realmente bueno de una bodega francesa, bastante difícil de conseguir aunque se tenga dinero. Tienes que conocer gente de la comunidad, e incluso se necesitaba entender el vino hasta la médula.

Originalmente, quería ponerlo en su bodega y lucirlo para que sus amigos lo apreciaran.

Pero...

"¡Esto me costó decenas de miles!" Yu Xinjie apretó los dientes, haciendo una mueca al saber que tenía que renunciar.

"Bueno," Yu Yaoyao parecía que estaba observando los patrones plateados en él y frunció el ceño, miró a Shen Yichong y de mala gana dijo: "Guárdalo".

No bebe, pero sabía que su querido esposo podía hacerlo.

Yu Xinjie parpadeó al escucharlo. ¿Era Yu Yaoyao ahora un bandido?

"El vino es bueno, pero espero que tú y Yichong todavía estén de buen humor para probarlo". Yu Xinjie apretó los dientes y lanzó una oración con una mueca de desprecio. "Quizás, la fuente de ingresos más grande de Yichong se va a volar pronto, Chen Jiao ..."

Estaba a la mitad de la oración cuando se dio cuenta de que algo no estaba bien y se detuvo de repente. Pero el daño ya esta hecho. Ella no se detuvo lo suficientemente pronto.

¡Y cada par de ojos en la sala de estar ahora la miraban!