El Brujo y El Muro: Fuera del espejo (libro 1)

❄️C.2: Jimmy, el loco❄️

❄️ Jimmy, el loco ❄️

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No tengo idea de cuánto llevamos hablando estupideces o ya cuántas veces nos hemos burlado del pobre Tommy desde que nos alejamos de la barra el rarito del rey Jimmy y yo, y todo gracias a ese maldito cigarrillo. Resulta que el tipo este ni siquiera se llama Jimmy (aunque no me dice su nombre real), la bella chica que lo chocó toda molesta es algo así como su "novia a veces" y está furiosa porque se me acercó a pesar de sus amenazas, no puedo creer lo popular que me he vuelto sin notarlo, ahora todos parecen conocerme. Suspiro agotado y bebo de mi botella.

Tommy y el resto de los Tigres han hablado bastante de Jim. En general todos hablan pésimo del hombre, todos menos Thomas. Con el tiempo se creó un intento de secreto a voces de que el Tigre líder y el contrabandista habían sido amantes, ninguno lo negó o lo confirmó, y siempre se comenta lo enigmático de su alianza pues nadie sabe de dónde o desde cuándo se conocen. Tristemente es debido a su cercana amistad que ambos han tenido severos problemas, según Egon (otro Tigre) a Tommy le han propinado palizas terribles para lograr sacarle información sobre Jimmy, y al rey del antro lo han intentado matar por su cercanía con "maricones". Aunque hablando con este obvio rebelde sumado a que viví meses con el Tigre-líder puedo deducir que a ambos les da igual ganarse peleas por el otro. Quizás si fueron amantes.
Gracias a los Tigres me he enterado de este complejo y fascinante mundo underground, de que este sujeto con el que tan amenamente estoy compartiendo es una celebridad por esta zona, está entre los mejores contrabandistas, es un loco irresponsable con complejos suicidas, un bisexual reconocido, un bohemio de esos que quieren morir joven, lo consideran un rebelde anarquista que ama el caos y un icono de la marginalidad. Y en estas cuatro horas que he estado hablado con él lo único que he podido confirmar es que es un raro, no de mala forma, pero es demasiado distinto al promedio, incluso para los habitantes underground. Sale de la media y no necesita tener el pelo color rojo ardiente para llamar la atención en un lugar, es más alto que yo, sus ojos son castaños y puedo ver su fascinación conmigo en ellos. No creo que sea el típico hombre Carpe Diem, no, yo creo que hay algo más, aburrimiento quizás. Si los rumores son ciertos ha vivido en la calle desde siempre, es un vagabundo que nadie, ni un sistema opresor como el actual, puede domar; un gato feral con exceso de libertad, de esos que tienen curiosidad por dormir en una casa junto al fuego y recibir mimos y comida a cambio de sumisión, pero que al llegar la noche mira al cielo y al ver la luna se da cuenta que prefiere los techos y las ratas únicamente porque así no se pierde a sí mismo, su rareza y su cuello libre de correas.

- ¿Tengo algo en la cara? - me pregunta tan de golpe que caigo en la cuenta de que he estado mirándolo mucho tiempo callado y pensativo.

- Solo pensaba - le respondo con sinceridad, él me sonríe.

No puedo negar que es bastante agradable hablar sin condescendencias de ningún tipo y si mi humor se había oscurecido por vivir un tiempo en las calles, ¡este hombre tenía alma de alquitrán! Años criándose solo entre callejuelas, frío y sitios abandonados lo han torcido bien. Hemos hablado por horas de cosas que no esperaba hablar con alguien como él, los estereotipos engañan bastante. La carrera espacial le fascina, la música y el cine son su mayor deleite aunque es de gustos más extranjeros, tiene preferencias por la música inglesa y el cine estadounidense, del que yo no sé casi nada a excepción de David Bowie, de él sabemos lo mismo y nos fascina a partes iguales, también sabe diferenciar distintos tipos de hierbas, infusiones y tés, y definitivamente no es el gallito de pelea que me habían descrito, no parece ser alguien irascible o violento sin provocación, tengo la impresión de que no es fácil de ofender y siento que hemos generado una confianza básica, así que pregunto algo que ha robado mi atención desde que saludó a los Tigres. Se sorprende sobremanera cuando le pregunto por su pierna, no me contesta y no para de sonreír. No soy tonto, sé está midiendo y me está analizando, aunque no entiendo porqué se está midiendo, ya que, no parece tener trabas morales ni nada, maldice bastante y tiende ha hacer comentarios fuera de lugar, faltos de tacto o de lleno ofensivos sin que les tome el peso. Espero su respuesta, lamentablemente decide no contestar, y eso enciende una curiosidad que quiero saciar. Ni siquiera se molesta en cambiar el tema, simplemente guarda silencio sin apartar la mirada de la fiesta que sucede tan cerca y tan lejos a la vez.
Casi nunca siento curiosidad por nadie y menos ahora que me voy a morir, pero vamos, este tipo es un raro de tomo a lomo, un animal distinto, casi extinto. No quiero perder la conversación, quizás sea la última conversación fascinante que tenga en la vida, por lo tanto termino cediendo y pregunto otra cosa.

- ¿Es verdad que tú y Tommy tuvieron algo? - no me imagino a Tommy con un caótico como Jim, la verdad, pero ya que todos parecen indicar que lo fueron me decido a confirmarlo. La banda comienza a tocar una canción de Duran Duran, ambos lamentamos al mismo tiempo que el vocalista no pueda emitir ni una sola frase con un tono parecido, al menos lo intenta. Jim me mira a los ojos fijamente mientras analiza notoria y descaradamente qué decir.

- Si la pregunta se refiere a que si cogimos... - comienza a mascullar sin darle mucha importancia o pudor -. La respuesta es un no. El pequeño Tommy no es mi tipo, ¡míralo! - me grita divertido al tiempo que me señala a nuestro amigo en común que baila con una hermosa muchacha rubia entre la gente -. Es un jodido peluche, demasiada ternura en envase pequeño. Solo me gusta el exceso de azúcar en mis comidas y él no es mi tipo de comida, además... - haceuna pausa y prende un cigarro, no deben quedarle muchos -. Además ni siquiera tengo un "tipo" de gusto, realmente. Solo me acosté con un sujeto, un único sujeto. En parte porque me aburría y tenía curiosidad y en parte porque era alguien que apreciaba mucho y no sabía cómo retribuirle todo lo que había hecho por mí - se sinceró botando el exceso de humo de sus pulmones al aire viciado del galpón. Siguió fumando mientras me hablaba -. Después de ese encuentro me di cuenta de que me gustan más las mujeres, son más... ¿Cómo decirlo?
¡Ya sé! Son más suaves y curvas, por así decirlo. Pero nadie me perdonó la aventura y quedé como un bisexual reconocido, por suerte no me perjudicó demasiado con las chicas, te sorprendería lo pervertidas que se ponen al saber que estuve con un tipo, siempre quieren detalles. ¿Alguna vez estuviste con una chica? - me ofrece el cigarrillo.

- ¿Por qué das por hecho que soy homosexual? - pregunto sorprendido, doy una larga calada para llenarme los pulmones de veneno, y su falta de respuesta me hace entornar los ojos reformulando la pregunta -. ¿Tanto se me nota?

- No, para nada, la verdad - contesta sin ironía.

- ¿Y entonces? - comienzo a marearme un poco, ahogarme en vodka no fue una buena idea por lo visto.

- No lo sé, ¿por los detalles? - entrecierro los ojos con desconfianza -. Ok, ok. Es por detalles mínimos, por ejemplo, no mirasa las mujeres de este lugar y están bellísimas, llegaste con los Tigres que son "maricas reconocidos y orgullosos" y está el asunto de que casi todo el mundo cree que solo los homosexuales transmiten SIDA, ya sabes, la gente es estúpida y ama ser ignorante - da otro trago largo a su botella -. Y también está el hecho de que prefieres estar aquí conmigo en vez de estar disfrutando allá, vivirás menos que ellos, deberías estar disfrutando.

- Vaya, no tienes nada de tacto, ¿eh?

- ¿Demasiada sinceridad? - pregunta con su sonrisa desdibujándose por un momento, intenta disimularlo, quizás le preocupa el haberme ofendido de verdad esta vez.

- Sí, pero no me molesta - bebo otro trago y el mareo empeora -.
Entiendo que la mayoría querría divertirse y disfrutar sus últimos años o meses... Sin embargo, para mí no es lo mismo, ya perdí el gusto por la vida hace tiempo, lo perdí antes de que me enfermara con esta mierda - no logro evitar que mi voz suene resentida -. Además hasta tu novia sabe de mi "condición" - silabeo condición enfatizando las comillas con los dedos de una mano -. Si me acercara a ellos, me echarían o peor, piensa que el barman no quiso venderme un vaso, ¿crees que soy del tipo de hombre que se traga una botella de vodka solo?

Se me queda viendo y me quita el cigarrillo, lo fuma un par de veces y al tiempo que cambia de posición cruzándose de piernas en el suelo me quita MI botella y habla. Aún no sé si es muy estúpido por coger mis cosas y consumirlas, o es muy valiente. No me importa la verdad, se siente bien no ser tratado como la peste negra con patas.

- La verdad, no. Luces más como un tipo de gustos más exclusivos - ¿Qué? -. Algo así como un whisky añejo, un vino caro o un licor exótico.
Lo dice todo meneándose afeminadamente. No puedo evitarlo, me echo a reír a carcajadas.

- ¿Y ahora qué?

- No eres Jimmy el mago, eres Jimmy "el Loco" - sigo riendo y él finge ofenderse mientras se termina MI botella.