Kyungsoo estaba a un lado de él, leía un libro mientras mantenía su ceño fruncido y de vez en cuando mordía su labio inferior como si tratará comprender algo. Pensándolo bien ese chico era muy bonito, sus facciones, el color de su piel, sus manos mientras cambiaba las páginas.
Espera.
Confuso miro todo su alrededor pero cuando se intentó levantar un fuerte mareo en conjunto a un punzante dolor en su garganta lo hizo recostarse de nuevo mientras se masajeaba los sienes. Es en ese momento que el otro lo volteó a mirar preocupado, después dejó su libro a un lado para levantarse de la silla y acercarse a medir su temperatura.
—Estás mejorando, no te muevas mucho que te puedes desmayar de nuevo— Le comentó mientras tocaba su rostro.
¿Desmayar? ¿De nuevo?
—¿Qué pasó? ¿dónde estoy?— Preguntó entonces su garganta doliendo más y su voz sonando ronca.
Kyungsoo lo miro con pena para volver a sentarse en su silla y poner sus manos sobre sus rodillas para pensar si decirle o no lo que había pasado.
—Nada, sólo te desmayaste en medio del pasillo y te traje a la enfermería— Le respondió.
Mark asintió para después mirar por la ventana entonces preocupándose cuando observó el atardecer tras ella. ¿Porqué era tan tarde? Ya debía estar en su dormitorio. Es entonces que cayó en cuenta.
—¡Donghyuck!— Gritó levantándose casi de golpe sintiendo su alrededor dar vueltas y el mismo dolor punzante en su garganta y cabeza.
—Acuestate de nuevo— Le pidió el moreno para acercarse e intentar hacer que vuelva a la camilla.
Pero Mark no se dejó y aunque se estuviera sintiendo muy mal buscó su móvil en la enfermería encontrándolo en un buró. Lo tomó y lo desbloqueo sintiendo su preocupación salir más a flote cuando observó que el reloj marcaba las siete treinta y cinco de la tarde.
Oh no, Donghyuck debía tomar sus medicamentos a las siete en punto y ya era demasiado tarde.
Rápidamente tomó su mochila y la colgó en su hombro para salir casi corriendo de la enfermería. Detrás de él un jadeante Kyungsoo lo seguía mientras intentaba guardar su libro en su mochila para poquito después llegar junto a él.
—¿Qué haces? ¿A dónde vas?— Le preguntó.
En ese momento ya estaban casi llegando la salida.
—Debo ir con Donghyuck, esta enfermo— Le respondió a duras penas.
El moreno se puso en frente de él abriendo sus brazos para evitar que siguiera avanzando. Ya estaban en el campus y muchas de las miradas de los estudiantes que pasaban por ahí estaban sobre ellos, aunque más bien en él. Comprendía que sea el centro de mira al ser el juguete de los reyes pero, ¿porqué lo miraban con horror?
—Deja de correr o si no te vas a desmayar de nuevo— Pidió jadeante—. No te preocupes por Donghyuck, yo ya le di la pastilla y él está bien, preocúpate por tí.
Se abrazó a si mismo al sentir que las miradas sobre él nada más se hacían más intentas. En ningún instante el dolor en su cabeza y garganta había parado de dolor pero ahora sentía algo más, un ardor en el área de sus hombros y cuellos.
—¿P-Puedo ir a mi dormitorio?— Pidió casi en un susurro.
Kyungsoo asintió y después de eso juntos caminaron hasta llegar al edificio de las habitaciones, donde cada que dieran un paso siempre tenían miradas sobre ellos y ni siquiera intentaban disimular, incluso miradas de personas ajenas al Instituto. No tardaron en llegar a su dormitorio cuando Kyungsoo se despidió diciendo que debía ir al propio.
Cuando entró se alivio al ver dormir a Donghyuck plácidamente sobre su cama, se acercó antes de dejar sus cosas sobre su escritorio y se sentó en la orilla de la cama de su amigo para tocar su frente. Ya estaba mejorando, lo cual era bueno. Al parecer el mayor se dio cuenta de su presencia pues abrió los ojos de poco a poco pero terminó por abrirlos por completo horrorizado cuando lo miro.
—Mierda Mark que te paso en el cuello— Le preguntó asustado.
El canadiense algo confuso llevó sus manos a su cuello tratando de sentir algo pero no lo hizo, tan solo siguió doliendo y ardiendo más.
—¿Qué tengo en el cuello?— Cuestionó confuso.
—No lo sé parecen chupetones— Murmuró mirando algo de cerca para entonces abrir los ojos de par en par—. Joder Mark, ¿te líaste con alguien?
—¿Qué? ¡No!— Negó para levantarse y caminar hasta el baño.
Gritó cuando observó su reflejo en el espejo. Lo que primero le llamó la atención fue las marcas de unas manos alrededor de su cuello, después de eso marcas de diferentes tamaños entre rojizas y moradas repartidas entre su cuello, mandíbula y hombros.
Es entonces que recordó.
—¡¿Qué cojones?!— Gritó nuevamente y Donghyuck se asomó por la puerta.
—Entonces— Habló pícaro—. ¿Si jodiste con alguien? Con razón tardaste mucho, ¿fue gentil contigo? Parece que fue todo una bestia.
Mark con toda la información llegando a su cabeza, desde Sehun ahorcandolo hasta que por poco lo mata, Johnny haciendo marcas sobre él y todas aquellas miradas que estaba recibiendo. ¡Mierda! ¿Había salido así a la calle? ¿ahora que pensaran de él?
—Y-Yo Donghyuck, debo estar a solas.
El otro no comentó nada al respecto y se fue felizmente a su cama a dormir otro rato. Por mientras el castaño se encerró en el baño para sentarse en el suelo con su espalda contra la puerta mientras rodeaba su propio cuello con sus manos intentando encontrarle sentido a aquello.
Que jodidas mierdas.
¡Hola! ¿Qué les va pareciendo la trama? :)
No creo que tenga nada que aclarar así que si en cualquier momento tienen dudas ustedes pregunten, yo les responderé encantada. Y si no lo hago perdón, es que soy muy despistada. :(