— ¿Abigail? —Susurró una voz y sentí una mano sacudir ligeramente mi hombro—. Despierta. Son las seis.
Gruñí, moviéndome en mi cama—. Abby. No Abigail.
Me ignoró—. Levántate. Tienes una cita programada con el doctor en media hora —dijo Niall, cruzando sus brazos.
— ¿Qué? —Inquirí confusa, sentándome vagamente.
—Cita. Regresaré en veinte minutos para escoltarte. Prepárate —dijo cortante y luego salió de mi habitación.
Me incorporé inmediatamente, abrí el grifo de la ducha para dejar que el agua se calentara mientras me sacaba la ropa.
Salté dentro de la lluvia de agua caliente, disfrutando la sensación mientras el agua golpeaba mi piel. Rápidamente me enjaboné el cabello con el shampoo de esencia de manzana que estaba en el estante de la ducha.
Quien sea que haya elegido la esencia de manzana en verdad tenía un buen sentido del olfato. Estaba completamente encantada con ella.
Después de haber enjuagado el shampoo de mi cabello, apagué la ducha y envolví mi cuerpo con una toalla.
Me sequé rápidamente, me puse un par de vaqueros casuales y una camiseta blanca.
Encendí la secadora de cabello y quité la toalla que había colocado alrededor de mi cabeza.
Una sensación de ardor se sintió en mi mano y me percaté que había sujetado la parte equivocada de la secadora—. ¡Ay! ¡Mierda!
Apagué la secadora, acunando mi mano lastimada contra mi cuerpo. Toda la palma estaba enrojecida y la sensación de dolor incluso llego a las yemas de mis dedos.
— ¿Abby? ¿Estás lista? —Llamó una voz fuera de mi habitación—. ¿Dónde est-? —Abrió la puerta del baño y sus ojos azules rápidamente se concentraron en la mano que ocultaba—. ¿Qué sucedió? —Su voz disminuyó considerablemente, con un tono más suave.
—Me queme mi —intenté explicar, pero él ya tenía mi mano quemada sobre la suya, examinándola cuidadosamente.
—Ven —alegó gentilmente, guiándome al lavabo y abriendo el agua fría—. Ponla aquí… luego podemos ir para que Liam le dé un vistazo.
Colocó mi mano bajo el agua fría, enfocándose intensamente en ella.
—Oye, lo recordaste. —Le sonreí.
Me miró de manera divertida—. ¿De qué estás hablando?
—Me llamaste Abby, no Abigail.
—Calla. —Bramó, poniéndose colorado. Pero podía ver una sonrisa asomándose en sus labios.
— ¿Quién es Liam? —pregunté curiosa mientras Niall cerraba el grifo y me entregaba algunas toallas de papel.
—El doctor. El también curara esto. Vamos —dijo e hizo un gesto con su cabeza para que lo siguiera.
Lo seguí rápidamente después de que me escoltara fuera de mi habitación. Mientras caminábamos por el largo pasillo, Niall aclaró su garganta—. Dime ¿por qué Zayn salió de tu habitación furioso la noche anterior? —Caminaba rápido y tenía dificultades para mantenerme a su paso.
Parpadeé—. No lo sé.
—Vamos, debiste hacer o decir algo. ¡Estaba jodidamente molesto! —mencionó curioso—. Cuando le pregunté, él no me respondió—. Disminuyó su paso ligeramente, esperando mi respuesta.
— ¿Así que se supone que no lo sabes?
—Cuéntame. —Demandó. Algo en sus ojos me decía que él no debería saberlo.
— ¿Y qué si no lo hago? —Desafié.
—Fácilmente puedo hacer tu vida un infierno aquí. Básicamente soy el segundo al mando. —Comentó despreocupado, pero podía notar el trato que implicaban sus palabras.
Dudé. Realmente no quería tener problemas con Niall. Y no era la gran cosa decírselo ¿cierto?
Exhalé—. De acuerdo.
Sonrió—. ¿Y? ¿Qué ocurrió?
—Bueno… no estoy exactamente segura. Él estaba… eh… sí.
—Muy detallado. Sé exactamente qué fue lo que salió mal —dijo sarcástico.
Rodé mis ojos—. Él… no estoy segura del todo… pero estaba impresionado cuando se dio cuenta de que era…
Hizo un gesto para que continuara.
—…virgen —dije lentamente.
La sangre desapareció de su rostro y lo siguiente que sabía, era que estaba siendo aprisionada contra el muro—. ¡¿¡Eres qué!?!
—Niall ¡me estás lastimando!
El agarre de sus brazos se aflojó un poco, sin embargo no lo suficiente para detener el dolor.
—Mierda Abby. ¿Sabes qué-?
Niall fue interrumpido por un grave y masculino gruñido.
Zayn.
—Aléjate de ella.
Inmediatamente Niall deshizó su agarre y retrocedió, con sus manos levantadas de forma defensiva—. Solo se la llevaba a Liam.
Zayn me sujetó del antebrazo, jalándome hacia él. La fuerza que había empleado fue suficiente para que me estampara contra su pecho.
Noté que Niall nos miraba a Zayn y a mí, luego a Zayn y después a mí otra vez, pensando profundamente.
—La llevaré yo. ¡Ve y asegúrate de que todos están despiertos! —Gruñó, poniéndome junto a él. Niall asintió rápidamente y se volteó para seguir las órdenes de Zayn.
Enfurecido, me jalaba a su ritmo que era mucho más rápido de aguantar para mí.
—Señor, por favor ¡vaya más despacio!
Se detuvo bruscamente, frunciendo el ceño—. ¿Te lastimó?
— ¿Qué? No.
—Entonces ¿qué es esto? —Zayn levantó la mano que estaba envuelta con las toallas de papel.
—Oh. Me queme.
Levantó una ceja—. ¿Cómo?
—Tal vez sí o tal vez no sujete el lado correcto de la secadora de pelo.
Me dio una mirada divertida y luego hizo algo absolutamente inesperado.
Rió.
— ¡No es divertido! —dije severa, pero una sonrisa se me formaba en el rostro.
Eso causó que riera aún más—. Solo tú, Abby.
No pude evitarlo, pero me di cuenta de que me llamo Abby en lugar de Abigail.
Una pequeña risa escapó de mis labios y luego yo también reía.
— ¡No es divertido! —protesté entre risas, mis pulmones pedían aire—. ¡Duele!
Zayn negó con la cabeza, aún riendo levemente—. Podemos ir para que Liam te revise. Vamos.
Me sujetó de la mano que no estaba lesionada y me guió detrás de él.
Giró a la izquierda y entramos a un pasillo más pequeño—. Este es el ala del hospital. Creo que olvide mostrártela antes.
Incluso había una pequeña área de espera. Esto era legítimo. Deseaba saber cuánto dinero había invertido Zayn en su mansión.
Un alto, hombre gentil salió de una de las habitaciones, vestido con una bata blanca de doctor. Con sencillez en el rostro y sus ojos eran vivamente marrones.
Una vez que nos miro, su rostro se iluminó y sonrió—. ¡Zayn! ¿Dónde habías estado? ¡No bajaste más! ¡Eché de menos verte! —Abrazó a Zayn.
Mientras se separaba de Zayn, me observó—. Bueno ¿a quién tenemos aquí? ¿Un nuevo miembro de la mansión?
Zayn asintió—. Abigail.
—Abby. —Corregí.
Zayn arqueó una ceja.
Sonrió y luego me envolvió en un cálido abrazo—. Es un placer conocerte Abby. Soy el Doctor Payne. Pero solamente dime Liam, porque sinceramente, ‘Payne’ es un nombre horrible para un doctor. —Rió.
Solté un risa.
Se giró hacia Zayn—. Yo me encargo desde ahora.
—La verdad, necesito hablar contigo. A solas —replicó Zayn.
Liam asintió—. Bien Abby, déjame llevarte a la habitación que usaremos.
Me guió a una habitación mediana, lucia exactamente igual a la oficina de un doctor. Abrió uno de los cajones, y saco un camisón de hospital—. Ponte esto para mí. Regresaré ¿sí?
Asentí.
Salió de la habitación, cerrando la puerta detrás de él.
Deseaba saber sobre que quería hablar Zayn con él.
Me quité la ropa, colocándola sobre el mostrador que estaba cerca del lavabo. Cuando finalmente me coloque el camisón se oyó un suave golpeteo en la puerta y luego Liam entró.
—Sube a la mesa para mí por favor.
Me senté sobre la mesa-cama para pacientes.
—Entonces ¿cómo estás Abby? —Dijo, colocando el estetoscopio en sus oídos y la otra parte sobre mi pecho, escuchando el ritmo de mi corazón.
—Bien, creo.
— ¿Cómo llegaste aquí? —preguntó.
—Fui sacada de las calles… a plena luz del día, por decir.
Bajo el estetoscopio por mi pecho—. Necesito que respires lentamente para mí.
Inhalé lentamente, mirando mientras escuchaba el estetoscopio.
—Bien. —Quitó su estetoscopio, buscando el objeto que mide la presión de la sangre.
Revisó la presión de mi sangre y mi pulso, anotando todos los números en su cuadro.
—Bien, necesito que te recuestes sobre tu espalda.
Obedecí inmediatamente. Asintió en aprobación.
—Ahora no voy a exponerte, pero tengo que hacerte un examen de senos. Estarás cubierta con tu camisón el tiempo entero ¿de acuerdo?
Asentí.
—Bien. —Sonrió amablemente hacía mí, colocándose un par de guantes de látex azules—. Levanta tus brazos por encima de tu cabeza.
Obedecí y puso sus brazos firmemente sobre mis senos. Mientras sentía mis senos, contuve mi respiración. Para ser sincera, nunca había tenido un examen de este tipo antes, considerando que raramente iba al doctor y me sentía algo extraña.
—Relájate Abby, ya casi termino.
Finalmente, quitó sus manos—. Ahora puedes sentarte.
Cuando me senté, me observó—. Bien, voy a necesitar una rutinaria muestra de sangre. ¿Tienes dificultades con las agujas?
Dudé—. Algo.
—De acuerdo. El enfermero que se encarga de la muestra de sangre es bueno y lo hace rápidamente. No dolerá mucho. Estará aquí en pocos minutos para la muestra.
—Está bien. —Asentí
—Bien ¿puedes pararte en la balanza para mí?
Rápidamente seguí sus instrucciones y anotó mi peso—. De acuerdo, ahora necesito que te apoyes en el muro. —Señaloó la cinta métrica pegada al muro.
Me puse de pie, parándome derecha. Anotó mi altura en sus notas.
Se sentó sobre su silla giratoria, con una expresión seria—. Así que normalmente te daría una dosis de control de nacimiento, como sea…
Mis ojos se entrecerraron—. No quiero embarazarme.
—Sé bien eso. De otra manera, fui informado sobre… tu virginidad. —Colocó una mano sobre mi rodilla confortándola.
Tragué saliva, incómoda—. ¿Y?
—Abby ¿sabes lo que significa?
Negué con la cabeza—. No.
—Zayn no te tocara. Estas a salvo, Abby, siéntete libre de hacer lo que quieras. Para un hombre sin mucha moral, este es un gran dilema. Deberías estar feliz.
¿Debería estar contenta?
Sí, definitivamente debería estar feliz.
Entonces ¿por qué estaba tan infeliz?
Créditos a: @ziamfeathers
Lamento la demora, sé que me tarde mucho en actualizar. Les pido PERDON *se pone de rodillas* mi demora se debe a que pronto estaré de vacaciones y me llenan de tarea y proyectos *llora*
Abby esta infeliz :C :C :C según Liam, Zayn no la tocara, pero sera ¿verdad? o ¿no se resistira a la tentación?
¡GRACIAS POR TODO! LAS AMO!!!
Dedicado a: @Milena_Meyer