Lincoln que está sentado en el borde de una de las camas sisea sintiendo como Abigail termina de coser la herida de su cabeza con preocupación. Su camiseta está manchada de sangre al igual que sus brazos y el pantalón, la hemorragia de su nariz está siendo frenada por un ensangrenatado pañuelo de tela.
—No entiendo porque ese guardia te ha atacado —farfulló Abby con preocupación limpiando bien su herida—. ¿Le habías visto antes?
Lincoln que ni siquiera puede mirarla mientras tiembla aún ligeramente por la terrible sensación que siente niega imperceptiblemente.
—Espero que Lexa le de una reprimenda —dijo Abby duramente terminando de cortar el hilo y limpiar con una gasa la sangre saliente—. Bastante hemos pasado en ese bosque como para tener que soportar ataques sorpresa también aquí.
Lincoln que apartó la mirada no queriendo mentirle aún más escuchó la puerta. Abby que levantó la vista vio a Octavia de pie ante ella y se sonrió ligeramente.
—Mira quién ha venido a verte —murmuró ella feliz de que Octavia estuviese allí para reconfortarle recogiendo las gasas sucias para marcharse—. Os dejaré a solas para que habléis...
Abby que pasó por al lado de Octavia en la puerta le dedico una débil sonrisa.
—Cuida de él.
Octavia que asintió débilmente forzó buena cara y asintió.
—Es lo que hago siempre...
Abby que le devolvió la sonrisa con cariño se alejó por el pasillo sujetando las gasas sucias y el estuche de sutura contra si. Estos chicos... siempre metidos en algún lío.
Octavia que se quedo viendo a Lincoln a los ojos cerró la puerta tras de si.
—No lo sabe, ¿no? —preguntó ella tras unos incómodos segundos de silencio.
Lincoln que bajó la cabeza negó vencidamente alargando la mano para dejar el sucio pañuelo sobre la mesilla al haber parado de sangrar.
Octavia que tragó al verle así sintió su estomago sobrecogido y tembló ligeramente. Por mucho que desease abrazarle, cuidar de él y borrar todo lo malo que hizo sabe que no puede.
—He hablado con Bellamy —murmuró ella haciendo a copio de todas sus fuerzas para que la voz no le temblase más—. Ha prometido no denunciarte ante Lexa si te marchas de aquí.
—Octavia...
—Bellamy quiere que te vayas, Lincoln —le interrumpió ella no queriendo oírle suplicar, sintiendo sus ojos llenarse de lágrimas sin dejar caer ninguna—. Y yo también lo quiero.
Lincoln que sintió un nudo en su garganta notó una lágrima resbalar por su cara teniendo que apartársela con disimulo en silencio. Lo comprende. Sabe que no puede culparles por ello, tampoco se atrevería a hacerlo.
—He preparado algunas cosas en la habitación, te irás al alba mientras todos aún duermen. Luna te acogerá, dijiste que si teníamos problemas ella lo haría... —Octavia que paso la mano por su mejilla se apartó otra lágrima en silencio—. Ve con ella...
Lincoln que se levantó al escucharla quiso acercarse pero ella retrocedió.
—Octavia, yo...
—Lo sé... —le interrumpió ella entre lágrimas con una amarga sonrisa—. No digas nada...
Lincoln que sintió las lágrimas resbalar por su rostro en silencio la miró afectado no queriendo marcharse de su lado.
—Yo ya lo sé...
Octavia que sintió un intenso dolor en el pecho cerro sus ojos apartando la mirada de él con una triste sonrisa.
—Podríamos haber sido tan felices juntos...
Lincoln que no pudo evitar llorar en silencio al escucharla sintió desquebrajarse su corazón.
—Quizás algún día...
—Quizás... —se despidió ella sabiendo que si permanecía más tiempo allí se vendría abajo abriendo la puerta de la habitación para salir—. Cuidate mucho allá afuera, sé que Luna y los suyos lo harán por mi...
Octavia que le vio aproximarse salió de la habitación cerrando tras ella con hondo pesar. Podrían haber tenido un futuro juntos, ser felices uno al lado del otro y ahora nada de eso iba a poder ser, la vida era un asco...
Continuara...