Durante todo lo que quedaba del día Zayn y yo nos la pasamos en cama. Él ordenó comida china para el almuerzo y para la cena tomamos helado viendo películas. Él y yo conversamos de experiencias graciosas en nuestro pasado y supe muchas más cosas de él que yo ignoraba.
En realidad todo lo que conversamos nos sirvió a ambos. Al día siguiente Zayn se levantó muy temprano en la mañana, tomó su celular y leyó algo que no le agradó mucho.
-¿qué sucede?—pregunté algo preocupada.
-es un mensaje de Louis—contestó serio
-¿qué dice?—me senté junto a él.
-tenemos que viajar hoy en la madrugada, vamos a seguir con el tour.
-¿por qué te molesta eso?—pregunté intrigada.
-porque planeaba quedarme aquí por más tiempo.
-pero iré contigo, si lo que te molesta es que me quede sóla.—dije
-no es eso
-entonces no entiendo qué es lo que te molesta—dije desafiándolo a que me diga la verdad.
-ya te dije, quería quedarme mas tiempo aquí, eso es todo—Zayn se puso de pie.
-pero para qué querías quedarte más tiempo aquí, eso no lo entiendo—refuté.
-olvídalo—dijo resignado.
-¿por qué no mejor me dices que quieres quedarte aquí porque quieres seguir cuidando a Vanessa?—dije molesta. Zayn regresó a mirarme de manera fulminante.
-¿otra vez con eso?—dijo enojado. Recapacité y me acerqué a él con cara de arrepentimiento.
-perdóname—dije y lo abracé aunque él no correspondía.—sé que hice una promesa en realidad perdóname, es que no sé por qué querías quedarte más tiempo.
-sólo debes conformarte con saber que quería mas tiempo y punto—dijo serio
-pero Zayn creo que debo saber tus razones, soy tu esposa.
-una esposa no rompe sus promesas—volvió a decirlo molesto
-oye yo rompí mi promesa después de que tú no quisieras explicar tus motivos.
-bueno entonces, de castigo no te diré por qué quiero quedarme, ok?—dijo y se metió a la ducha.
Eso me enojó, no me gusta que me haya castigado, pienso que no tiene derecho hacerlo. Sin embargo es cierto que rompí mi promesa, me equivoqué; pero estoy más que segura que él en algún momento también lo hará y yo también lo castigaré.
Bajé a la cocina y preparé el desayuno, planeaba ser fría con Zayn por el castigo que él me había dado. Él bajó y le serví el desayuno. Yo me lavé las manos y caminé hacia las escaleras.
-¿dónde vas?—dijo detrás de mí desde la mesa
-a bañarme—respondí seria
-¿no comerás?—preguntó un poco molesto
-ya comí—dije y subí más rápido las escalera para que no pudiera alcanzarme. Entré rápido al cuarto y tomé mi toalla. Zayn subió corriendo las escaleras y me tomó del brazo justo antes de que yo entrara al baño.
-¿por qué estás así?—preguntó
-¿así cómo?—respondí
-así de fría
-¿fría? No sé de qué hablas, voy a bañarme—dije e hice fuerza para salir de su agarre.
-sí sabes de qué hablo, no finjas—apretó sus dedos en mi brazo
-me estás haciendo doler-advertí
-pero dime la verdad ¿qué te pasa?
-ya te dije que nada, supéralo—dije y me solté.
Entré al baño y después de una larga ducha salí. Zayn seguía sentado en el filo de la cama esperando por mí. Salí envuelta en una toalla.
-Ve a desayunar—dije colocando mi ropa utilizada en el cesto correcto. Zayn se puso de pie y me quitó la toalla. Quedé desnuda. Tapé con una mano mis pechos y con otra mi parte inferior.—OYE!!—reclamé
-quiero que me digas que te pasa o te hago mía a la fuerza—la mirada de Zayn era oscura, pero a la vez se notaba que lo hacía de broma.
-¿qué?—dije sonriendo. Retrocedí algunos pasos para encontrar algo de ropa, pero él me alcanzó y me lanzó en la cama con mucha fuerza.
-¿me dirás o no?—preguntó sacando la correa de su pantalón. Para mí esto era un juego.
-no—dije y traté de salir de la cama pero Zayn me tomó del tobillo y me arrastró hacia él. Reí un poco con eso, y le seguí el juego. Zayn se sacó el pantalón y la camiseta mientras yo me cubrí totalmente entre las sábanas.
-no escaparás, hoy serás mía—dijo él sacando con fuerza las sábanas. Quiso abrir mis piernas pero hice fuerza para que no lo haga.
-aléjate—dije entre bromas. Al ver que no podía abrir mis piernas, él mordió mi cadera haciéndome doler. Eso desinfló todas las ganas que tenía de jugar. El dolor que sentí fue muy parecido al que me provocó el hombre que abusó de mí.
-AUCH!!!—dije y lo alejé de mí—no lo hagas, eso me trae malos recuerdos. Zayn cambió su gesto.
-Oh! Lo siento, perdóname, lo olvidé.—se puso triste. Para no perder el momento emocionante que habíamos tenido hace unos segundos, me acerqué a besarlo intensamente. Zayn se sentó en la cama apoyándose en el espaldar y yo me senté en sus piernas totalmente abierta.
-Esta vez yo te voy hacer mío—dije seductoramente. Me dejé llevar por la excitación y pasé mi lengua por su quijada y la succionaba provocativamente. Bajé hacia su cuello y lo besé tan lentamente que hacía que Zayn gimiera de placer. Tomé con mi lengua el lóbulo de su oreja y jugué con él.
Bajé mi mano hasta su bóxer y apreté con mi mano su miembro. Eso le provocó dolor pero no me dijo que me detenga. Saqué su bóxer y empecé a besar su pecho; poco a poco bajé hasta su vientre. Pude sentir como se contraía él cuando estuve a punto de llegar a su punto débil.
El amigo de Zayn estaba tomando más fuerza. Cuando lo agarré con mi mano, empecé a moverlo y él gemía. Acerqué mi boca a la punta del miembro de Zayn y pasé mi lengua. Zayn echó la cabeza para atrás y cerró los ojos. Introduje la punta de su amigo a mi boca cuidando que mis dientes no lo tocaran. Bajé mi mano hasta la base de su miembro y succionaba su punta.
Rocé mis labios por él y de a poco iba introduciendo toda la masculinidad de Zayn en mi boca. Zayn movió mi cabello hacia un lado, sin duda para ver cómo lo hacía. Mis lamidas eran cada vez más rápidas y conforme succionaba, movía mi mano.
-Espera—dijo y me sacó de él. Se acostó.—ven aquí—Zayn hizo que yo pusiera mi feminidad arriba de su rostro mientras que yo tenía libre acceso a su amigo. De esa forma nos dimos placer los dos.
Mientras yo jugaba con su miembro, Zayn succionaba mi punto débil volviéndome loca. Lo hacía de una forma tan dura que sentía que me hería, pero mi excitación era tan grande que no quería decirle algo. Yo subía y bajaba mi mano sobre el pene de Zayn, no podía meterlo todo en mi boca, pero hacía lo que más podía.
Los dos gemíamos fuerte, estábamos sintiendo tanta excitación que parecía que íbamos a perder el conocimiento. Llegué a clímax y detuve lo que hacía con Zayn, quería sentir esa sensación completamente. Después de gritar, seguí con lo que le hacía a Zayn. Mi mano apretaba el amigo de Zayn, sentí en un momento que él se contrajo.
-Espera—dijo y me sacó de él. Me acosté e ingresó su miembro en mí. Alcé mis piernas para sentir un poco de dolor y llegué muy rápido. Me sorprendí de mi misma de lo rápido que había llegado en mi segunda vez. Minutos después llegó Zayn apretando con fuerzas mis senos. Escucharlo gemir era lo mejor para mí.
-¿te cansaste?—le dije. Yo tenía ganas de más.
-no—respondió--¿quieres más?
-sí, quiero hacer más cosas contigo—respondí y me puse de rodillas al igual que él. Mientras nos besamos me vino a la cabeza hacer algo loco. Me separe de su beso y le di la espalda. Apoyé mi trasero en su miembro y meneé mis caderas.
-¿estás segura que quieres?—preguntó en mi oreja
-sí, si quiero—respondí. Zayn me hizo inclinar un poco y me sostuve con las manos en la cama. Cuando él puso su punta en mi orificio anal, sentí dolor. Me alejé de él de inmediato.
-¿qué sucede?—preguntó él.
-ya no quiero—dije y él rio.—no seas malo—fingí estar ofendida. Zayn se acostó a mi lado y me abrazó por detrás.
-tranquila, tendré que comprar lubricantes—dijo él. Admiro su sabiduría en estas cosas. Zayn acarició mi cintura y alzó mi pierna y por detrás de mí introdujo su miembro en el mismo lugar de siempre. Nunca me hubiera imaginado hacerlo así. Los dos estábamos acostados de lado y de esa forma era muy difícil para mí moverme. El hizo todo el trabajo.
Hasta que llegamos casi juntos. Fue lo mejor de lo mejor. Habían pasado ya dos horas. Ahora sí teníamos mucha hambre. Descansamos un poco abrazados en la cama.
-ahora sí me dirás por qué estabas molesta—dijo
-quería saber por qué necesitabas más tiempo aquí, eso es todo—contesté. Zayn se acomodó para mirarme de frente.
-Quería más tiempo para disfrutar de mi gente, de ti, de todo lo que vivimos. Allá estaré ocupado todo el tiempo, por eso quería más días en Londres.
-¿estás seguro?—pregunté por las dudas
-por supuesto que sí—contestó.
-tú me prometiste que me sacarías a pasear para que yo no me aburriera en los lugares en los tienes shows
-y lo haré, pero no es lo mismo salir a pasear cuando sabes que al día siguiente te espera otro show. Estando aquí en casa te puedo hacer mía cuando quiera y donde quiera.—Zayn besó mi cuello y reí.—De todas formas me alegrará los días verte despertar junto a mí.
Después de esa charla fuimos a desayunar. Todo parecía ir bien y así queríamos estar. Zayn tomó su celular y recibió un mensaje de Vanessa.
-Es un mensaje de Vanessa—dijo enseñándome la pantalla
-¿qué dice?—pregunté
-está preguntando cuándo me voy...no sé cómo se entera de las cosas—refutó molesto.
-¿te despedirás de ella?—dije mirando mi plato
-no, pero debo decirle que me voy
-¿irás a su casa?
-no lo sé, ¿crees que debo hacerlo?—Zayn ahora necesitaba de mí para tomar decisiones.
-Quisiera decirte que no, pero debes ir. Tienes que preguntarle si necesita algo antes de que nos vayamos.
-no te pongas mal, solo será una visita corta.—dijo y acarició mi mejilla.
Después del desayuno salimos para la casa de Vanessa. Zayn ya se había puesto en contacto con sus guardaespaldas y les dijo que ya necesitaban volver a trabajar. Llegamos a casa de Vanessa y la señora Bethania nos recibió. Nos hizo pasar y nos comunicó que Vanessa estaba vomitando en el baño de su cuarto. Zayn me miró preocupado.
-subamos—dije resignada. Cuando subimos noté que la casa de Vanessa era grande, los pasillos estaban llenos de fotos de ella en algunas portadas de revista o simplemente en sesiones fotográficas. Salía hermosísima. Tuve envidia de aquello. Cuando llegamos al cuarto de Vanessa escuchamos que efectivamente estaba vomitando.
-No pases mejor—dijo Zayn. Lo analicé rápido y él tenía razón, lo mejor es que ella no me vea dentro de su cuarto.
-ok, pero no te encierres con ella y habla en voz alta para que yo puedo escucharte—dije celosa.
Zayn entró y golpeó la puerta del baño.
-Vanessa abre, soy yo, Zayn—dijo. Vanessa abrió de inmediato.
-¿qué pasó?—pregunto ella
-¿cómo qué pasó? Yo debería preguntar eso, ¿por qué estás vomitando? ¿qué pasó?—dijo mi amor
-esto es normal, el doctor dijo que me va a pasar esto hasta los 5 meses máximo.
-¿lo haces cada mañana?
-No sólo cuando como algo que me desagrada
-¿qué comiste?
-yogurt de durazno
-pero ese es tu favorito—dijo Zayn y yo me retorcía de rabia afuera sabiendo que él aún recuerda lo que a ella le gusta.
-sí, pero últimamente ya no me pasa. Me sabe horrible.
-mmm...pero el bebé está bien ¿no es cierto?
-sí eso creo. ¿sólo viniste para ver cómo estaba? ¿dónde dejaste a la loca de tu mujer?
-Vanessa!!!—reclamó Zayn.—Sólo vine porque quería preguntarte si te hace falta algo más, es que hoy mismo viajo.
-¿qué?---refutó—No puede ser, ¿me dejarás sola?
-No! Te quedas con Bethania—se refería a la señora de la limpieza
-No puede ser Zayn. No puedo creer que me dejes sola con este embarazo y solo vengas a decirme qué necesito. Te has convertido en un hombre frío desde que te uniste a esa mujer. Cuándo aceptarás que no dejas de amarme, estoy segura que mientras la besas piensas en mí, mientras le haces el amor piensas en mí...-Vanessa empezaba a subir la voz, como si supiera que yo estaba afuera de su cuarto. Antes que ella continuara con sus desprecios, Zayn la interrumpió.
-Ya basta Vanessa, deja de decir estupideces. Dime si necesitas algo o no.
-A ti, a ti te necesito y sé que tú también me necesitas a mí. Yo sí recuerdo las veces que lloraste por mí, las veces que te embriagabas por mí, las veces en las que te desvelaste hablando por teléfono conmigo aun cuando tenías una presentación al día siguiente, yo recuerdo el día en que me diste el anillo de compromiso, estábamos tan felices. ¿por qué dejamos ir nuestro amor? Dime ¿por qué?.—Vanesa tenía su voz quebrada, al igual que mi corazón. Zayn no me ha dado un anillo a mí, ni siquiera me dio cuando nos casamos y siempre creí que tenía algo que ver con la cultura de su padre. "QUÉ MIERDA"
-¿amor? "¿por qué dejamos ir nuestro amor?" Vanessa tú y yo no nos amábamos, sólo estábamos juntos por la sensación que causamos en la prensa, nada más. Además te recuerdo que fuiste tú la que rompió con todo compromiso.—aclaró Zayn
-Sí pero estaba mal, yo estaba confundida....al igual que tú...tú también fallaste, me engañaste con muchas chicas y lo sabes.
-Ya no quiero hablar Vanessa, esto se está tornando un poco incómodo.
-Zayn no te vayas....mira yo te amo tanto que podría esperarte el tiempo que tu decidieras, yo podría ser quien alivie tus heridas cuando esa bruja de _______ te falle, yo podría ser quien te espere a escondidas cuando tu quieras, porque sé que hay algunas más, yo lo sé, así tú me digas que amas a _____ yo sé que tú no eres de una sola mujer—dijo.
Vanessa me dejaba paralizada con eso, sentía que mi corazón dejó de latir, mi respiración no era la misma, mi cuerpo se tensó y empecé a sentir mucha ira.
-Ya basta Vanessa, ¿de dónde sacas esas cosas? Tú no sabes lo que dices—dijo Zayn y lo escuché nervioso. Decidí entrar y enfrentar la situación. Cuando ingresé al cuarto de ella, vi cuatro peluches gigantes en cada esquina del dormitorio, casi me caigo cuando los vi. Eran hermosos, en la pared había dos fotos gigantes de Zayn y ella que yo ya había visto antes en las redes sociales, y que en algún momento Zayn tenía en su celular.
-¿qué haces aquí? LÁRGATE!—gritó Vanessa
-Zayn, vámonos—dije aguantándome todo
-Vanessa estás mal de la cabeza—dijo Zayn molesto y bajamos rápido. Salí de la casa de Vanessa lo más pronto posible, no me despedí de nadie. Estaba histérica. Tenía tantas cosas en mi cabeza ahora.
Zayn sacó el seguro del auto y entré sin necesidad que él abriera la puerta. Zayn ingresó de forma rápida y noté su cara de preocupación.
-Ella está loca, te puedo asegurar que eres la única—dijo acelerado.
-no te estoy reclamando Zayn—dije cruzando los brazos.
-pero puedo notar que estás molesta.
-Sí lo estoy, pero no diré nada. Estoy harta de hablar y hablar—dije. Zayn se estacionó y se sacó el cinturón de seguridad. Salió del auto y abrió mi puerta. Yo no sabía lo que él iba hacer. Puso mi asiento medio metro para atrás y se arrodilló delante de mí en el mismo auto.
-No quiero que lo hagas—dije antes que se arrodillara pero era tarde.
-Quiero que me escuches—dijo
-Ya te he escuchado muchas veces Zayn, ya sé lo que dirás. "yo te amo ____ quiero que lo entiendas, ella no es nada para mí, yo no la amo" ya me sé ese cuento—dije molesta. Zayn me miró a los ojos y yo desvié la mirada. De repente me tomó el rostro y me besó.
-Lo que ella dijo no es cierto, no tengo otra mujer en mi vida, la única eres tú y te lo juro por mi madre que es lo mejor que tengo. Es verdad que con Vanessa fui así, pero contigo no y eso me dice que de verdad estoy enamorado de ti, de verdad te amo. Dime ¿qué quieres que haga para que lo entiendas?
-Yo te creo Zayn, en el fondo sé que me dices la verdad. Pero me molesta mucho ver que hay cosas que has repetido conmigo que hiciste con ella. Mira los peluches, ella tiene 4 peluches grandes y no me digas que no se los diste tú porque sé que me estás mintiendo...le diste un anillo y a mí no. Eso me molesta demasiado. Sé que no debo ponerme así, pero me fastidia esta situación
-No puedo creer que estés celosa de Vanessa
-No lo estoy
-sí lo estás, porque si no fuera así no estarías molesta por esto. Es verdad que le di los peluches pero se los di porque era mi manera de mantenerla entretenida conmigo, no porque la amaba, le di un anillo porque pensé que ella sería la mujer de mi vida afortunadamente hoy sé que ella no lo es. _________, yo te amo como jamás a ninguna mujer he amado y creo que esto te pone en ventaja contra Vanessa. Te daré más que un anillo el día que el contrato termine, para así hacer las cosas como se deben.
-Zayn no sé qué pensar
-piensa en mí, en lo mucho que te amo, yo sin ti me muero. Piensa en la vida que tendremos juntos de ahora en adelante. Piensa en lo feliz que te haré siempre.—Ya no pude más y lo besé.
Después de eso fuimos a despedirnos a casa de Trisha y a las 17h00 salimos para USA que era donde se seguirían haciendo los shows.
CHICAS DE MI CORAZÓN....GRACIAS POR SU APOYO Y SUS COMENTARIOS....ESPERO QUE LES GUSTE DE VERDAD ESTE CAPÍTULO...LAS QUIERO UN MONTÓN.