CAPÍTULO 81

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"Regreso al Sur, y desapariciones misteriosas"





La montaña del Sur, había estado recibiendo reportes de ciertas personas desaparecidas, algo que venia sucediendo desde hace ya una semana. Los lideres de las cuatro sectas, habían acordado una reunión, la cual fue cancelada de golpe. Los hermanos lideres de la Secta del Oeste, enviaron una carta, avisado que viajarían lejos a los clanes de su territorio, dado que en ese lugar, los reportes de desapariciones eran mayores. 

El líder Gu ZhinZa, recién se terminaba de recuperar por completo del extraño veneno. Otra razón para esa reunión, pero Gu ZhinZa pidió mantener el secreto del veneno, ya que era lo mejor. 

Sobre la Secta de su Excelencia, el Este. Su Excelencia informó que visitaría cada Secta, y Clan para analizar la situación, comenzando por su territorio.

Finalmente, en el Sur, Liu Jian era invadido por mucho trabajo, los reportes de desaparecidos eran mas que nada niños de aldeas un poco lejanas dentro del territorio del Sur. 

Riu Ha despertó, dándose cuenta que había regresado a su habitación en el Sur, y que Liu Sheng estaba en la suya. Casi era capaz de golpear a el General Lei. 

"¡¿Que diablos hacemos aqui?! ¡¿Porque detuviste a Liu Sheng!?". 

El General Lei lo miró de arriba a abajo. - Joven Maestro, me temo que eso es imposible, no sabe a quien se enfrenta... El señor Feng Ha no es solo un dios desterrado... El fue el mejor guerrero del cielo.

Riu Ha se burlo. "¿Entonces porque diablos lo desterraron?". 

Sin Respuesta.

Riu Ha "....."

El viento de la ventana le dio a Lei directo en el rostro, y recuerdos vinieron a él. Un hombre hermoso y valiente, montando un blanco caballo de armadura plateada. Al lado de ese hombre, otro que se destacaba por una vestimenta carmesí, mirada coqueta, y un abanico dorado en su mano. Lei vio esa escena a lo lejos en un campo de flores, y su ser tembló. Lei se miró a si mismo, y después a esos dos hombres, y entonces se dio cuenta... Sus ojos solo podían mirar, porque nunca sería parte de esa imagen.

Aunque su mirada estuviera puesta en ese hombre de túnicas carmesí, lo que el deseaba, era ser el hombre que montaba ese hermoso caballo. Un sueño iluso e irreal.

Riu Ha grito. "¡Hey... ¡Hey!". 

Lei volvió a la realidad, bajando la mirada, y apretando su puño. - Puedes pensar que Feng Ha solo es un miserable dios que cayó en desgracia, pero no es asi... Feng Ha tuvo algo con lo que la mayoría solo soñaba. No solo era un guerrero nato e incomparable, también fue el único artesano de los dioses, forjador de armas que harían temblar a los tres reinos. Pero sin dudas, lo que mas le envidiaban era... Que él, un simple dios de cientos en el cielo, había robado el corazón de quién en ese momento, era el ser mas apuesto y poderoso de los tres reinos.

Ante estas palabras, Riu Ha frunció el ceño como un destello de un presentimiento. "¿Zhi Ha...?". 

El General Lei sonrió con cierto toque de recelo. - Veo que lo descubriste... Bueno, era obvio.

La mente de Riu Ha dio un gran ¡¡¿QUE?!! ¡¡ZHI HA!! 

Esta bien era verdad, Zhi Ha es muy apuesto, con un cuerpo muy bien formado, alto, ojos seductores, y una aura que te hace caer ante él. PERO... PERO... ¿De verdad era considerado como el ser mas apuesto y poderoso de los tres reinos? ¡¿Que?!

No era por ofender, pero Riu Ha incluso pensaba que Liu Sheng era mas apuesto de el Rey Demonio Fuego Rojo. 

Lei observó la silla de lado de la mesa. - ¿Puedo?

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