Aquel en el que Supercorp está en cuarentena

Capítulo 58

De alguna manera, Lena estaba empezando a amar las mañanas, pero durante el par de meses que habían estado viviendo juntas, aprendió una cosa: Kara era casi imposible de despertar. Eso llevó a la decisión ejecutiva de poner su alarma media hora antes de lo necesario y a Lena le encantaba el hecho de que podía simplemente acostarse en la cama durante media hora más con los brazos de Kara alrededor de ella porque también aprendió algo: Kara se despierta si ella escucha una alarma (y que necesita un despertador reforzado) y Kara era muy cariñosa por las mañanas.

"Hola", Lena le sonrió a Kara, ignorando el hecho de que Kara casi la había convertido en polvo. "Puedo conseguir uno nuevo", se encogió de hombros, "tengo tiempo en el laboratorio hoy, me llevará tres minutos hacer uno". Kara ya la estaba besando suavemente en la mandíbula.

"Eres un genio", sonrió Kara, antes de inclinar la cabeza hacia el cuello de Lena y succionar perezosamente su pulso antes de alisarlo con la lengua.

Lena jadeó, "No comiences algo que no puedas terminar, cariño", sonrió mientras Kara se movía hacia ella un punto de pulso diferente en su cuello, golpeando cada punto que sabía que Lena amaba como si hubiera estudiado todo su cuerpo con detalle.

"¿Cuánto tiempo podemos dedicar?" Kara preguntó, rápidamente antes de caer a su clavícula. Lena giró la cabeza hacia un lado y tomó su reloj, tratando desesperadamente de concentrarse en leer la hora y no en el hecho de que Kara estaba deliberadamente alejándose de los lugares favoritos de Lena con una sonrisa petulante que Lena podía imaginar.

"Quince minutos", le dijo finalmente, teniendo en cuenta el hecho de que Kara probablemente ignoraría el límite de tiempo y Lena se lo permitiría.

"Tengo que ser rápido", sonrió Kara, agachándose más y dejando que sus dedos jugaran con la parte superior de los pantalones cortos de Lena pidiendo permiso en silencio.

"Realmente lo haces", asintió Lena y Kara usó su supervelocidad para quitarse los pantalones cortos. "Kara", chilló Lena, riendo.

"¿Quieres que me-".

"No", cortó Lena antes de que pudiera terminar de preguntar.

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Se movieron por el ático como lo habían hecho un millón de veces antes. Lena terminó de vestirse mucho después de Kara y ya encontró su café y desayuno esperando y calentados y Kara sonriendo desde donde estaba comiendo su waffle y leyendo las noticias. Lena se sentó a su lado y sin decir palabra hizo lo mismo en su propio teléfono, inclinándose más hacia la sección de negocios y ciencia que Kara, ocasionalmente comentando las historias que estaban leyendo. Ambos terminaron el desayuno y Kara aceleró para ordenar todo mientras Lena se aseguraba de que Lola estuviera lista. Lena tuvo la primera oportunidad de mirar el atuendo de Kara y perdió la concentración por un segundo mientras miraba los jeans de cintura alta que Kara había combinado con uno de sus muchos botones.

"¿Qué?" Kara se encogió de hombros.

"Nada, simplemente te ves impresionante", sonrió Lena, levantándose de donde estaba agachada junto a Lola para darle un beso rápido a Kara.

"Tú también, zrheuiao (hermosa) ", sonrió Kara. Lena vestía un sencillo traje negro.

"Gracias", sonrió Lena, se quedaron en el espacio del otro por un segundo, apreciando la cercanía hasta que Lola ladró, sacándolos de sus pensamientos. Lena tomó un abrigo para Kara mientras Kara agarraba sus teléfonos y llaves, intercambiaron y bajaron, Lena se llevó a Lola con ella.

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Lena dejó a Kara en CatCo en el camino y no anticiparon la gran cantidad de paparazzi. Kara se inclinó y le dio a Lena un beso rápido de todos modos, sin importarle lo que iban a decir los titulares.