Aquel en el que Supercorp está en cuarentena

Capítulo 35

Cuando Kara se despertó, instintivamente se inclinó para buscar a Lena y encontró la cama vacía. El pánico comenzó a crecer dentro de ella mientras buscaba los latidos de su corazón; cuando lo encontró logró respirar un poco mejor al escuchar que era normal. Se arrastró fuera de la cama para encontrar a su novia, poniéndose un par de pantalones deportivos grises. Caminó penosamente hasta la cocina donde encontró a Lena sentada en la isla con Lola en su regazo haciendo un crucigrama de su libro de rompecabezas, casualmente como si nunca hubieran recibido la llamada que hicieron la noche anterior.

"Oye, cariño, ¿sabes quién protagonizó Deliverance en 1972, de apellido Reynolds, cuatro letras?" Lena apenas levantó la vista del crucigrama con el lápiz entre los dientes y las gafas colocadas en la parte superior de la cabeza.

"Burt", respondió Kara con indiferencia, "¿Estás bien?". Trató de no enojarse y se inclinó sobre la encimera para mirar a Lena.

"Estoy bien", Lena todavía apenas levantó la vista del periódico.

"Lena," Kara trató de llamar su atención.

"Estoy bien, Kara", insistió, mirándola por un segundo antes de concentrarse demasiado intensamente en su crucigrama. "¿Conoce una abreviatura de tres letras para un tipo de animación?".

"CGI, tal vez", respondió Kara con indiferencia. "Lena, ¿cómo estás tan relajada?".

"No es como si fuera la primera vez. ¿Sabes cómo se llamaba Tailandia, empieza con S, cuatro letras? ".

"Lena", casi le suplicó Kara.

¡Siam! ¡Eso es lo que es!" ella escribió la palabra en el rompecabezas.

"Lena, por favor".

"No quiero pensar ni hablar de eso. ¿Puedes simplemente dejarlo? " Lena casi gritó, tirando el libro.

"Ya sea que esté diciendo la verdad o no, tu vida estaba amenazada, Lena, no es el tipo de cosas que simplemente puedo dejar", Kara estuvo a punto de gritarse.

"Encuentra una manera", le dijo Lena, bajándose del taburete, "Me voy a dar una ducha".

"Lena", la llamó Kara, pero la ignoraron. Kara se dejó caer contra la encimera con la cabeza entre las manos. Sintió a Lola acariciar sus piernas, gimiendo. "Ven aquí, bubba", tomó al cachorro en un abrazo que Lola aceptó con gusto, acurrucándose cerca de su pecho. Kara lo ajustó para que el peso de Lola estuviera en un brazo y escaneó la cocina en busca de comida. Ella notó una nota del microondas y se la quitó. Lena se había preparado el desayuno y lo había puesto en el microondas para mantenerlo caliente. Kara maldijo a Lena por ser perfecta porque realmente quería estar enojada con ella. Garabateó un agradecimiento en la nota, dudando antes de agregar tres besos y volver a colocarla en el microondas antes de tomar el plato aún caliente de huevos revueltos con queso con tocino, tomates asados ​​y tostadas. Lena incluso había mantenido los huevos fuera de la tostada para que no se empapara. Kara sonrió para sí misma y se mudó a la isla, frente a donde se había sentado Lena.

Lena no estaba mucho mejor. Se estaba castigando a sí misma por criticar a Kara, lo que la había llevado a sentarse en el suelo de la ducha y llorar, suplicando en voz baja que Kara pudiera oírla. Sabía que no lo haría, el agua estaba demasiado ruidosa, pero quería que lo hiciera. Quería pedir perdón antes de que su orgullo se hiciera cargo, una maldición con la que Lena siempre había luchado. Incluso cuando deseaba desesperadamente disculparse, sentía vergüenza cuando lo hacía. Solo otra cosa con la que Lillian la había agrupado. Es por eso que ella no quería hablar de eso. No quería hablar sobre el hecho de que su madre quería matarla. No quería hablar sobre el hecho de que su familia la consideraba una abominación y una traición. Abrió una compuerta, una compuerta que Lena había mantenido cerrada durante 20 años. Abuso infantil, degradación emocional, homofobia. Todo estaba allí, en el agua, detrás de esa puerta que amenazaba con estallar en cualquier segundo, ahogando a Lena. Lena ni siquiera sabía si podría sobrevivir a la apertura de la puerta. Así que, en cambio, se limitó a sentarse y llorar, esperando en vano que Kara pudiera oírla porque todo lo que quería era que la abrazaran y no sentirse tan sola en todo.