Aquel en el que Supercorp está en cuarentena

Capítulo 2

Lena se despertó para encontrarse en su cama, todavía estaba usando la sudadera con capucha un poco incómoda y los mini shorts con los que debió haberse quedado dormida anoche. Trató de moverse pero se encontró contenida por los fuertes brazos de Kara. Sin embargo, no le importó y volvió a dormirse. Era sábado y no es que tuvieran nada mejor que hacer.

La próxima vez que Lena se despertó, era una Kara demasiado excitada. "¡Sotavento! ¡Sotavento! ¡Sotavento! ¡Despierta! ¡Sotavento!". Lena abrió los ojos a regañadientes para ver a una Kara que obviamente ya se había duchado y vestido inclinada sobre ella.

"¿Qué?" suspiró, el sueño era espeso en su voz.

"¡Primer día oficial de aislamiento!" Kara habló como si fuera lo mejor que le hubiera pasado en su vida.

"Soy consciente", Lena se frotó los ojos, tratando de despertarse un poco más, "¿Por qué esto requiere estar despierto?" preguntó: "Vamos a tener mucho tiempo libre, cariño". Kara miró a Lena como si hubiera hecho la pregunta obvia en el planeta y luego su estómago gruñó.

"Quieres que te cocine el desayuno, ¿no?" Lena se rió de Kara que estaba actuando como un cachorro excitable.

"¿Puedes por favor hacer panqueques porque los tuyos son mucho mejores que los míos y eres increíble, increíble, hermosa, talentosa y un genio?", Lena se relajó un poco, haciendo una demostración de disfrutar los cumplidos que se le lanzan. " y amable y generosa ", Kara no había notado el hecho de que Lena se estaba burlando de ella todavía," y mencioné hermosa y talentosa y majestuosa y maravillosa y... y... y... "Kara se estaba quedando sin adjetivos.

"No, continúa, lo estaba disfrutando mucho", Lena se rió de Kara, que lentamente se estaba volviendo del color de un tomate. "Por supuesto que te haré panqueques, cariño", sonrió, sentándose en la cama. KAra tiró de ella fuera de la cama y Lena notó algo, "¿Esa es mi sudadera?" se rió, levantando una ceja.

"Quizás," Kara se sonrojó y antes de que Lena se diera cuenta, estaba de pie en la cocina.

"Tienes que dejar de hacer eso", se rió nerviosamente de la rubia que todavía sostenía ligeramente a Lena, con los brazos sueltos alrededor de su cintura, Lena mirando a Kara. Era como ayer, el aliento de la periodista se deslizaba sobre sus labios; Lena miró nerviosamente desde esos hermosos orbes de zafiro brillantes hasta sus suaves labios antes de mover rápidamente su mirada hacia arriba y salir del agarre de Kara. Ella se entretuvo, tratando de recuperar la compostura. Kara estaba igualmente mal, pero Lena no podía ver eso. Pasó un tiempo particularmente largo buscando una sartén de lo que encontró en el primer segundo de abrir el armario, pero Kara no necesitaba saber eso. Una vez que sintió que había recuperado la capacidad de hablar, el director ejecutivo dio órdenes y le dijo a Kara que trajera los huevos, la leche y la mantequilla.

El desayuno se comió mientras veía las noticias. Era difícil no asustarse por las historias que se extendían por todo el planeta. National City, Metropolis y Star City lideraron los esfuerzos de auto-islotin para poner a la ciudad bajo llave, mientras que la otra mitad del país se negó a reconocer que había una crisis, en gran parte debido a la idiotez de cierto presidente. Lena Luthor era una de las pocas directoras ejecutivas de su industria que era una ávida defensora de los demócratas, la mayoría de los acuerdos que tenía que negociar y todas las personas en su directorio parecían ser defensores xenófobos y sexistas de Trump. Kara le gritaba a la televisión entre bocados y bocados mientras Lena echaba humo en silencio.

"Joder", suspiró Kara junto a ella y Lena giró la cabeza para mirar a la rubia.

"¿Acabas de jurar?" Trató de no reírse, pero fue difícil. Esas palabras eran las que pensó que nunca escucharía del kryptoniano. Kara se sonrojó ante sus palabras.