All Is Found © [BTSxJin]

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Atrae sus rodillas hasta su pecho y abraza sus piernas con sus brazos para tratar de sentir menos frío, no sabe si es su imaginación o no; pero cada vez más está sintiendo que la temperatura de su cuerpo está bajando. Además se siente mareado, esto lo asume con el hecho de que no ha ingerido ningún alimento durante todo el día, espera que la ventisca que se está dando en el exterior pare de una vez y así pueda regresar al reino Occidente. Aunque le cueste hacerlo, va a tener que ir hacia la base general de los guardias e identificarse como el príncipe de Neos para que le den hospedaje al menos y pueda seguir con su búsqueda respecto al espíritu de tierra. No piensa darse por vencido por nada del mundo, lo pasó con esos bandidos fue un obstáculo; tiene que ser perseverante.

—Podría intentar ponerme en contacto con él —escucha que le dice Hoseok a las dos criaturas—. Pero dudo que pueda hacerlo, lo siento, Nam, pero tu guarida es muy oscura y eso debilita mis poderes.

—Está bien. Solo debemos esperar que la ventisca pare —menciona Jimin con desinterés—. Será a lo mucho hasta mañana, así que no hay problema.

—Para nosotros no, pero... —Hoseok dirige su mirada hacia él con preocupación—, para SeokJin sí.

—Estará bien.

NamJoon no cree en las palabras de su hermano menor y avanza hasta el ciudadano de Neos.

—Estás temblando —es lo primero que suelta al verlo.

— ¿Eh? — Todavía, se le hace raro que le hablé como si nada hubiese pasado—. Ah, yo, sí..., tengo frío...

—Lo siento, quisiera hacer algo, pero eres humano y tu energía comienza a debilitarse —se disculpa con una mueca—. Mhm... —recuerda algo—, dijiste que estabas hambriento, ¿qué baya te gusta?

SeokJin parpadea aturdido por la pregunta y responde automáticamente cuando su estómago suena al pensar en su baya favorita. Por otro lado, Jimin rueda los ojos con fastidio cuando su hermano de piel media oscura se arrodilla y coloca ambas manos sobre la superficie para susurrar unas palabras, y mágicamente un pequeño arbusto de arándanos aparece haciendo que los ojitos del problemático humano brillen tanto por el asombro como por la emoción por tener algo para comer.

— ¡Oh! ¡Están muy ricos! — Exclama llevando otro buen puñado al interior de su boca.

—Espero que con esto pueda disculparme por la forma cómo lo traté, ciudadano de Neos SeokJin —asiente con las mejillas llenas de comida y NamJoon piensa que se parece a un adorable roedor—. Bien. Si quiere más, me avisa.

Hoseok siente un poco de alivio al ver que el aura alrededor del humano comienza a brillar de nuevo; al parecer necesitaba comida. Aún así, aquello no será suficiente para que su energía no sea absorbida, es normal debido a que no es un ser mágico como ellos.

—Los humanos son tan débiles —murmulla Jimin cruzando los brazos—. Ah, que molesto es JungKook. Justo hoy tenía que hacer su famosa ventisca.

—Él solo está cumpliendo con su labor —le recuerda Hoseok con una amable sonrisa—. Más bien, ¿crees que puedas darle un poco de agua a SeokJin cuando vuelva a perder su energía?

— ¿Qué? No, no lo haré.

—Debes hacerlo, es un ciudadano de Neos —menciona NamJoon arrugando su ceño—. No importa si es humano, pertenece al reino de Neos y...

—No me importa si pertenece al reino de Neos. No pienso hacer nada más por él. Es más, debí dejar que muriera.

—No digas eso, Jimin —lo regaña el espíritu de luz.

—Es la verdad. No entiendo por qué lo salvé —chasquea la lengua con fastidio y alza la voz haciendo que SeokJin lo escuche—. Y no entiendo por qué me están molestando tanto. Si quieren ayudarlo, bien, háganlo; pero yo no quiero hacerlo —confiesa molesto—. Es más, ustedes llevénlo de regreso al reino Occidente, ni bien termina la ventisca me iré a dónde pertenezco.

Con esas últimas palabras, el espíritu del agua se aleja de sus dos hermanos mayores y del problemático humano quien traga con pesadez algunos arándanos, y siente cómo el hambre se le va.