Pokemon la Región Zero

Delirios de una Chica Enamorada

Un muchacho misterioso con debilidad por las damas, una gran habilidad para repartir halagos y enamorar muchachas y la particular costumbre de visitarlas por las noches. estas ideas dieron vuelta en las cabezas de los muchachos y no tardaron en formarse una opinión sobre Kein: Es un mujeriego.

 -Y toda esta historia ¿Qué tiene que ver con que estuvieras en el río?- Preguntó Carmín.

-Pues...-La muchacha bajó la mirada- Kein suele verse por las noches, o cuando alguien está en problemas, por mucho que queramos no podemos verlo en otras ocasiones. Yo tengo la oportunidad de estar con él más seguido que otras chicas, pero siempre por poco rato, sé que muchas me envidian por mi suerte, otras intentan sacarme celos asegurando que han pasado la noche con él pero yo no les creo. Algunas aseguran que Kein está enamorado de ellas, hablan de sus besos y otras cosas pero no tienen nada para probarlo... Y... Lissie una de las niñas más bonitas de aquí, asegura que Kein está loco por ella. El otro día se cayó al río y comenzó a ahogarse, esa tonta ni siquiera sabe nadar, nos hizo pasar un gran susto, entonces llegó Kein se lanzó al río y la salvó, ella tragó mucha agua y quedó inconsciente, por eso Kein le hizo respiración boca a boca. Lissie asegura que no fue eso, que fue un beso apasionado, pero yo sé que no es así, la única razón por la que sus labios se juntaron fue porque él quería salvarla, porque es un héroe, nada más, fue por obligación...

 "Es tan inmadura" pensó Shell, pero en cierta forma le recordaba un poco a ella misma, no a su yo actual, si no a su antiguo yo, a aquella que había sido hacía tanto tiempo atrás.

 -Yo le voy a demostrar que está equivocada -prosiguió la muchacha-,  que él haría lo mismo por cualquier chica que se estuviera ahogando, que Kein no le pertenece a ella. Por eso, para demostrarlo me lancé al río esperando a que él viniera a salvarme.

-¿Y si no aparecía? -Preguntó Shell- podría darse el caso de que él simplemente no estuviera cerca y no se enterara de que estabas en peligro, no puedes arriesgar tu vida de esa manera ¡Podrías haber muerto!

-¡No importa! Debía demostrar que ella se equivocaba, debía hacerlo, porque.... Porque... No podría soportar que él amara a otra, porque... No puedo vivir sin él... ¡NO SOY NADA SIN ÉL!

 Sin previo aviso Shell dio un paso y se puso frente a la muchacha y le dio una bofetada que dejó a todos perplejos. Luego la morena la miró con el rostro serio y le gritó.

 -¡Nunca vuelvas a decir que no eres nada sin un hombre! Nunca te arrastres ni te humilles por nadie, te aseguro que no vale la pena, no se lo merece, ese gusano no merece ni la mitad de lo que vales.

-¡Cállate tú no lo conoces! -Comenzaba a llorar- ¡Tú no sabes lo que siento! ¡Tú no sabes lo que es estar enamorada!

 Acto seguido la muchacha salió corriendo mientras seguía llorando.

 -Si sé lo que es estar enamorada -dijo Shell en un susurro- por eso te lo digo.

 Shell estaba muy rígida mirando al suelo, su rostro mostraba una expresión dura y angustiada, como si estuviera luchando para apartar algún pensamiento doloroso de su mente. Carmín preocupada se acercó tímidamente y con delicadeza posó su mano en el hombro de Shell.

 -¿Estás bien?

 Shell dio un respingo, al mirar a Carmín recordó donde se encontraba y cambió inmediatamente su expresión por una sonrisa despreocupada.

 -No es nada, no se preocupen, ahora no nos detengamos más y vallamos a la aldea de una vez. Seguro que Gray está ansioso por probar los huevos de Chansey.

-No tanto -contestó el muchacho con sencillez.

-Vamos no seas modesto -Shell comenzó a arrimarse al hombro de Gray -¿Quieres que te dé de comer en la boca como lo hice mientras estabas enfermo?

-¿Qué?

-No le hagas caso Gray, eso es mentira, mientras estabas enfermo ni siquiera podías comer, ella nunca hizo nada de eso -replicó rápidamente la ojiverde.

-Bueno quizás eso nunca pasó, pero lo que si pasó fue que una noche parecías tener mucho frío, así que me acosté a tu lado para brindarte calor y dormimos juntos.

-¡Eso también es mentira! -Gritó Carmín.

-¿Cómo lo sabes? Tú estabas dormida en ese momento.

-Pues.... Si te hubieras levantado a dormir con Gray yo me hubiera dado cuenta, tengo el sueño ligero.

-Yo soy muy sigilosa, simplemente no te despertaste.

-¡Todo lo que dices es mentira! ¡Yo lo sé! Gray no le creas nada, ella...

Para cuando miró Gray no estaba por ningún lado, había salido corriendo con la cara roja seguido de Blue y Demon dejando a las muchachas discutiendo solas. Estaba muy preocupado y avergonzado, ahora que le decían eso, tenía un vago recuerdo de que entre sueños había sentido a una criatura suave y cálida que se acostaba a su lado y le brindaba calor. El recuerdo era borroso y confuso pero preocupante. Por suerte y para su tranquilidad, más tarde Blue le explicaría que lo que Shell decía era mentira y que había sido él quien había dormido a su lado.