Esclavitud. (DekuKatsu)

Embarazo-60

Dos días enteros pasaron para que todo lo relacionado a la guerra quedará a un lado, así como los cuerpos de los hombres muertos que fueron llevados a sus reinos respectivos, para brindarles el honor que se merecían, como a cualquier guerrero que defendiera a los suyos aun si estuvieran mal o no.

El reino de Shigaraki tuvo que rendirse ante la desaparición de su Rey y ante la obvia minoría que eran ellos.

Desde entonces no se sabía nada del peli cenizo y fue Toga quien tomó la corona a su favor. Dejando claro a los otros reinos de un tratado pacífico desde ahora, a no ser que el verdadero Rey se apareciera y volviera a irse contra a ellos.

Pero...Muchos dudaban de aquello.

Si Tomura no se había aparecido en esos dos días, era por el hecho a la vergüenza, algo que los reinos derrotados de pensamientos muy orgullosos solían hacer para no tener que admitir la derrota públicamente.

Aunque de Toga se sabía que era una completa loca, no parecía mentir por el momento, por lo que nadie interfirió cuando esta se alzó hacia el trono de Shigaraki.

Todoroki después de escuchar todas aquellas palabras de su padre se hizo el desentendido, lo único que ocupó sus pensamientos después de aquello fue el cuerpo moribundo de Lida siendo traído en la espalda de Kirishima. Sus piernas se movieron con rapidez para rápidamente atenderle sus heridas y así se mantuvo en todo los siguientes días.

Tan solo después de dos días mas es que por fin pudieron llegar al Reino de Midoriya, el cual estaba muy mal cuidado, en todo este tiempo no hubo gente que cuidara de las flores o los mismos cultivos para poder comer, por lo que tendrían que ponerse rápidamente manos a la obra.

Bakugou había estado estos días de manera normal, no había tenido un notable acercamiento a Midoriya, ya que este estaba demasiado ocupado como para prestarle la atención, pero si había algo en particular y es que todas las noches estos compartían la misma carpa para dormir.

No había nada fuera de lo ordinario, unas cuantas conversaciones y ya, pero había notado un ligero cambio en el Alfa. Este parecía bastante interesado en saber si había estado comiendo bien, si no se había caído, que no debía alejarse más de la cuenta y sobre todo en que estaba obligado a dormir enrollado por aquellos fuertes brazos.

Eso le generaba un sentimiento extraño.

Se sentía enojado, porque sentía que le estaba tachando de Omega débil, pero por otra parte no podía evitar sonrojarse y sonreír como bobo cuando este no le miraba fijamente.

Todo era muy confuso.

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El ruido era bastantes, eran muchas las voces alegres que estaban contentos de volver vivos y sanos, aunque muchos también tristes, pero aun así era un alivio volver.

Desde una ventana un peli rubio de ojos gatunos veía como todos se empezaban a esparcir cada uno por su lado, buscaba con el corazón en la mano a aquel pelirrojo que había torturado sus pensamientos.

Cuando su vista lo encontró y lo vio hablando con un desconocido, todo su ser sintió un completo alivio, tanto que sus piernas casi cedieron para irse contra el suelo.