El primer paso

"Extra: Un vistazo al futuro - 3 - No es una competencia"

- ¿Que haces aquí? No tenias porque venir.

- Solo quiero pasar tiempo con ustedes, no veo el problema.

- Quería estar sola con Melisa.

- ¿Sola con Melisa? Puedes estar sola con Melisa y conmigo.

- No puedo creer que seas tan idiota.

- Oye ya calmate, si iban a salir a ver chicos me lo hubieras dicho.

- ¡Violette mira! - Gritaba emocionada la joven de pelo rubio en un puesto de algodón de azúcar. - ¿Probaste alguna vez? Son deliciosos, mi mama compro una maquina para hacerlos en casa ¿Quieres uno?.

- Si - Respondió la pequeña de pelo negro con el rostro lleno de alegría.

Tal comportamiento no paso desapercibido por su hermano - Yo también quiero uno Melisa. - Le hablo sonriendole.

- ¿Que haces? - Pregunto molesta.

- Ya entendí que tienes - Violette sintió que se quedaba sin aire al oír eso - Siempre, siempre quisiste todo lo que yo tenia, desde que eramos niños, como cuando me sacaste mi colección de bloques de piratas.

- ¿Que? De que hablas.

- Estas celosa, celosa de mi, por eso te molesta que intente conquistar a Melisa. Sabes que siempre seré tu hermano aunque tenga novia.

- No puedo creer, eres un tarado. - decía la pelinegra tomándose la frente.

- Ayudame Viollete, dejame con ella, te lo compensare.

- ¡No! Y deja de molestarme.

Melisa llego al banco donde los jóvenes Hanbridge la esperaban, Violette la había invitado a pasar el día en el pueblo, paseando y haciendo compras, no entendía el porque el repentino interés de la pelinegra en pasar tiempo con ella, pero asumió que quería intentar cambiar su forma de ser y tal vez ser amigas, acepto con mucho gusto aun sabiendo que Paul podría aparecer y acosarla como lo hacia desde que tenia 14 años.

- Solo le quedaban dos - comento apenada la rubia - Toma - extendiendo uno de los algodones a Paul - Tu y yo podemos compartir Violette, ¿Si?.

La pelinegra se sintió triunfante, una pequeña victoria moral para su lado - Por supuesto, tu y yo compartimos. - Comento con una mirada burlona hacia su hermano.

- Toma Melisa, prueba - Pidió el joven extendiendo su mano con un pedazo de algodón.

La rubia acepto con gusto y probo el pequeño pedazo de algodón de azúcar que Paul le invitaba de su mano, Violette lo sintió personal "Eso no es justo" pensó para si misma, mientras ideaba una forma de atraer la atención de la rubia.

- Mel te quedo algo aquí - Señalo la pelinegra la comisura de la boca de la rubia, pasando su dedo y llevándose sin dudarlo a la boca.

Melisa se sonrojo levemente por la acción, su mama Akko le había comentado sobre esos supuestos "besos indirectos" que se acostumbraban a dar entre ella y su mama Diana, pero aparto esa idea rápidamente de su cabeza, debido a que Violette solía ser así cuando estaba con ella "suele ser algo rara cuando esta conmigo, me alegra ser la amiga con la que pueda liberarse" pensó inocentemente y sonrió para si misma.

Paul por su parte estaba rojo de ira, esa acción cruzo una linea en su mente, su hermana jugaba sucio y el no la dejaría ganar tan fácilmente.

- ¡Oh! Un puesto de helados - Señalo la rubia emocionada saboreándose de la idea de comer algo de chocolate - ¿Quieren? - Pregunto mientras salia rápidamente hacia el puesto, ambos Hanbridge asintieron con una sonrisa.

- Ya deja de jugar - Inicio molesto el joven.

- ¿Jugar? No es un juego.

- Pareces divertirte molestándome con tus acciones.

- Sigues sin entender nada.

- Entiendo que te gusta molestarme, Melisa me gusta y lo sabes, ya deja...

- ¡A mi también me gusta! - Grito molesta la pelinegra callando a su hermano.

- Viol...

- Me gusta mas de lo que te imaginas Paul.

- Son chicas.

- ¿Y que con eso? No detuvo a sus madres, ni las madres de Anette.

- Son brujas es algo normal en ellas, recuerda lo que papa nos contó, pero tu no eres así, no es normal.

- ¿Normal? Ya suenas como el abuelo.

- No voy a cambiar mis sentimientos por esto.

- No quiero que lo hagas, solo quiero que dejes de entrometerte cuando estamos juntas.

- No voy a perderla - hablo serio ahora el joven poniéndose de pie. - ¿Pensaste en que dirá mama o papa al respecto?.

- No y por ahora no quiero pensarlo.

- Tu sabias que ella me gustaba, desde su fiesta...

- De cumpleaños, donde la viste con ese vestido rosa y babeabas como un cachorro. Si, me lo repetiste cientos de veces.

- ¿Como sabes que te gusta? Tal vez solo sea, una extraña obsesión o solo la admiras.

Violette miro extrañada la pregunta de su hermano - No lo se, solo se que desde que tengo recuerdos con ella, me ha gustado, su pelo, sus ojos, la manera en la que hace sonreír a todos, es como si llevara felicidad guardada en algún lado y la repartiera con su andar. - Paul solo miro asombrado a su hermana menor mientras hablaba - Me gusta mucho y no es un juego para mi.

- ¿Que pasa Paul? ¿Ya te vas? - Pregunto intrigada la rubia al ver al joven de pie junto al banco.

- Si Melisa, recordé que tengo algo importante que hacer - Comento serio sin mirarla.

- Que mal, aun no hemos recorrido ni la mitad del lugar.

- Podríamos hacerlo la próxima, solos tu y yo. - Respondió aun sin mirarla haciendo que Melisa se sonroje.

- S-Si n-no le veo el problema - le contesto apenada.

- La pase bien - comento acomodándose el pelo, se volteo para poder tomar la mano de la joven Cavendish y darle un casto beso. - Nos vemos - haciendo que la pequeña ojicarmín  se sonrojara mas - Adiós Violette. No pienso perderla - Susurro al oído de su hermana saludándola.

- Bueno ¿Donde vamos?. - Pregunto alegre la rubia.

- No se, mientras este contigo podemos ir donde quieras - Respondió rápido la pelinegra.

Melisa sonrió, tomo la mano de Violette haciendo que esta se sonroje furiosamente - ¡Vamos a caminar entonces! - Sacándola del asiento y comenzando a caminar entre los puestos que habían ese día.

A la distancia, tres brujitas las espiaban detrás de un árbol.

- Vaya que tienes competencia Anette. - comentaba la brujita de pelo rosado.

- Yo diría que Violette va ganando. - agrego la pequeña rubia.

- Y-Ya cállense ustedes dos - Hablo enojada la pelirroja. - Mel es mi amiga, solo quería ver que estuviera bien, no confió en esa loca de Violette.

- Si, si, como digas - Comento Susan rodando sus ojos.

- Hacen linda pareja - Menciono algo apenada Tina.

- ¡No hacen linda pareja! - Grito molesta Anette.

- "No estoy celosa" - Se burlo Susan imitando la voz de la pelirroja.

- ¡N-No se para que les dije que me acompañaran!.