One Shots - Camila Cabello y tú

Día alocado (Sin G!p)

Narras tú

–¿Debo ir?– pregunté haciendo un puchero.

–_____, por favor, quiero que los conozcas– escondí mi cabeza en su cuello.

–¿Y si no les caigo bien?– rió.

–Amor, te amaran, eres la razón por la cual ahora sonrío, y les he hablado mucho de ti, quieren conocerte– sonreí contra su piel.

–No les haz contado la parte sexual, ¿Cierto?– la miré y se rió.

–Ammm...Quizás un poco– me sonrojé levemente.

–¿Qué les dijiste, Karla?— frunció su ceño levemente.

–¿Cómo me llamaste?– reímos –Solo que ya hemos tenido relaciones, nada más– levanté una de mis cejas.

–Tienes 21, ¿Por qué ellos saben esas cosas?– me abrazó.

–Tenemos mucha confianza, y no tengo vergüenza con ellos– reí levemente.

–Pero yo no– se sentó sobre mi.

–La tendrás– me besó suavemente.

–No me beses mientras estamos desnudas– reí y acaricié su cuello.

–Yo te voy a besar cuando yo quiera– sonreí y sentí sus labios contra los míos.

Enseguida Camila profundizó el beso metiendo su lengua dentro de mi boca. Bajé mis manos por su cuerpo hasta llegar a su desnudo trasero y la atraje hacia mi.

–Cam...– me calló enseguida volviendo a poner sus labios sobre los míos.

–¿No quieres sexo?– mordí mi labio.

–Eres demasiado caliente– besé su cuello –Y...Claro que quiero–.

-2 horas más tarde-

–¿Te sientes bien?– pregunté al notar que mordía demasiado su labio y ella asintió.

–Es solo...Me pasa siempre antes de cada show– tomé sus manos –¿Esta bien mi ropa?– asentí.

–No mientas, en los que he estado nunca te ha pasado esto– besó mi mejilla.

–No te preocupes– se alejó un poco para seguir con sus calentamientos vocales. Unos minutos después la vi acomodando su vestuario y dejé mi celular sobre una mesita para acercarme a ella.

–¿Está todo bien?– asintió.

–¿Cómo se ve el traje?– lucía algo alterada.

–Perfecto– asintió y suspiró.

–No se ve bien, ¿De verdad se ve bien?– asentí acariciando sus hombros.

–Camz...– se miraba al espejo volviendo a acomodar la ropa así que tomé sus manos, notando que su respiración era bastante rápida e irregular.

–Tiene que verse bien _____, tengo que hacer que– puse mi dedo sobre sus labios al notar que incluso estaba sudando levemente.

–Camz, te ves perfecta– me miró –Ven, siéntate– la ayudé a sentarse en el sofá y enseguida me abrazó.

No dije nada, solo acaricié su espalda suavemente hasta que poco a poco su respiración se fue calmando y dejó de temblar.

–Gracias– besé su cabeza.

–¿Ocurre algo de lo que no me haya enterado?– asintió y me abrazó mas fuerte.

–Todos ya saben que eres mi novia– me miró y levanté una de mis cejas –Nos tomaron fotos en el avión– suspiró –Roger se enojó demasiado– la abracé.