Dúo imparable (Sin G!p)

13.3K 339 94
                                    

Narras tú

Nos encontrábamos en la línea de meta, estábamos, mi novia y yo, practicando para una próxima carrera en la escuela. Las dos éramos bastante competitivas y siempre queríamos ser la mejor, cosa que se nos complicaba porque en sí, somos buenas en muchas cosas.

–¿Lista para perder Amor?– reí mordiendo mi labio.

–Esa pregunta deberías responderla tú– escuché su risa.

–Deberíamos apostar algo ¿No crees?– giré mi rostro para mirarla.

–Que propones Cabello– sonreí.

–Sí yo gano- mordió su labio –Me dejarás ser la activa toda una noche– reí fuerte, en todo lo que iba de relación siempre me he negado a yo ser la pasiva, pero la apuesta me parece interesante.

–¿Y si yo gano?– levanté una ceja.

–Dejaré que me folles con un strap-on– sonreí alegre, yo siempre había querido usar uno pero ella se negaba.

–Es mejor que te vayas preparando amorcito– mordí mi labio.

–¿Aceptas?– estiró su mano y la tomé.

–Acepto– nos posicionamos listas para correr y la profesora nos ayudó para partir. El silbato sonó y fuimos corriendo por la pista lo más rápido que pudimos, siempre llegábamos casi juntas pero esta vez casi me caigo justo llegando a la meta y Camila me ganó solo por un maldito segundo. Seguí corriendo despacio unos cuantos metros y me tiré al piso cubriendo mi cara.

–Buscaré como ser una buena activa– se sentó en mi regazo.

–No quiero– hice un puchero y respiraba descontroladamente por la reciente carrera.

–Siempre dices lo mismo, ya no puedes decir que no– acaricié sus piernas.

–Es que no entiendes– hice un puchero nuevamente.

–¿Qué cosa?– me senté, quedando ahora ella sobre mis piernas y con sus piernas a cada lado de mis caderas.

–Nada nunca ha entrado en esta chica– abrió un poco los ojos y luego sonrió.

–Pues tu primera vez será genial, te lo aseguro– mordió su labio y sonreí –Perdedora pasiva– puse una mano en mi pecho simulando estar ofendida.

–No me ofendas de esa forma– reímos y se levantó.

–Vamos levántate, voy a patearte el trasero en el partido– me levanté quedando más alta que ella.

–Sí mi equipo gana, yo mañana uso el strap-on contigo, ¿De acuerdo?– asintió.

–Y si yo gano, lo usaré contigo esta noche– dudé por unos segundos –¿Estas dudando por qué sabes que perderás?– ella si sabe jugar con mi ego.

–No estoy dudando, acepto– nos dimos las manos y le di también un corto beso para correr a la cancha, el partido sería de solo 30 min.

El silbato sonó y el partido comenzó, solo a los 2 minutos mi amiga me dio un pase increíble y metí un gol fácilmente, sonreí mirando a Camila. Cuando la profesora se giró le levanté el dedo medio y luego hice un corazón con mis manos. Ella me sacó la lengua y fue al centro para partir. Cada una era la capitana de los 2 equipos que habían en la escuela, lo que nos hacía mucho más competitivas. El silbato sonó nuevamente y cuando mi novia corría con el balón interpuse mis pies y salió de la cancha, miré hacia arriba y me miró algo molesta pero me dio la mano para levantarme.

–No ganarás– me reí fuerte.

–Ya lo estoy haciendo, cuando tus piernitas corran lo suficiente para llegar al arco es cuando tendré miedo– gruñó y fue a recibir el pase de manos de su compañera.

One Shots - Camila Cabello y túWhere stories live. Discover now